El recital de La Renga, en duda: cómo fue la experiencia de 2015
Más de 35 mil personas pasaron ese día por la ciudad y el Estadio Minella. “No hubo detenidos, ni violencia ni desmanes”, fue el balance del gobierno y la Policía. Un repaso en medio de la incertidumbre.
En Mar del Plata acababa de asumir el intendente Carlos Arroyo. En las semanas previas los rumores de que suspendería el recital empezaron a crecer, pero nada de eso pasó. La fiesta que desató La Renga el 12 de diciembre de 2015 en el Estadio José María Minella no tuvo ningún incidente y así fue valorado el día después por las autoridades. El único inconveniente que se recuerda de aquella noche fue solo técnico – artístico: algunos problemas con el sonido. “No hubo detenidos, ni violencia ni desmanes”, dijo el gobierno. Dos años después, los 400 policías que fueron destinados para aquel operativo no serán destinados esta vez por disposición del Ministerio de Seguridad. Entonces, la incertidumbre sobre qué ocurrirá el próximo 7 de abril se mantiene. Y para el productor del show, Pablo Baldini, sólo hay un motivo: “Un claro atentado contra la cultura”.
Mientras se espera qué decisión de tomará y si el recital del próximo 7 de abril -para el cual ya se vieron la mayor parte de las entradas- se realizará o será suspendido, QUÉ Digital repasa cómo fue el último show de La Renga en Mar del Plata, en el mismo escenario, con la misma producción e idénticas características, pero con el agregado de que esta vez el Ministerio de Seguridad provincial no brindará un servicio especial para los 400 policías que se necesitan alrededor del estadio.
“Hemos hecho La Renga en 2015 a dos días de asumir el intendente con todos los líos habidos y por haber y donde también dijeron que no se iba a hacer el concierto. Y fue, para mí, en mis 30 años, uno de los mejores operativos que hicimos en conjunto con la Policía”, declaró este viernes en conferencia de prensa el titular de NA Producciones, Pablo Baldini.
¿Qué pasó en aquel recital? Ningún incidente de consideración, ningún detenido y ningún acto de violencia, según destacó el día después del concierto el gobierno.
El 3 de diciembre -diez días antes del show- las distintas áreas intervinientes de la Municipalidad se reunieron en instalaciones del Centro de Operaciones y Monitoreo con el objetivo de ultimar los detalles del operativo de control para el show que contempló la convocatoria de unas 35 mil personas.
Para aquel recital el perímetro que rodea al estadio contó con 250 personas destinadas al control, admisión y permanencia del público, 400 policías, 12 bomberos, 25 agentes de tránsito y 60 rescatistas y socorristas de la Cruz Roja. Además, a modo preventivo, hubo cinco unidades de servicio médico, nueve puestos de atención médica primaria y puestos de hidratación.
En las horas previas al recital las calles se transformaron en el escenario de los distintos grupos de jóvenes que en colectivos, combis, autos y caminando se acercaban para primero reunirse, festejar, encontrarse y después desatar la mayor fiesta posible en el show.
A las 22.10 de aquella noche, Chizzo, Tete, Tanque y Manu empezaron a tocar Corazón Fugitivo, el primer tema del recital. En el medio, aparecieron pequeños cortes generales en el sonido y esos baches fueron llenados por el público. A las dos horas de show Chizzo preguntó “¿Ya estamos no?” Y disparó La razón que te demora: todavía quedaba un largo rato de rock.
¿Cual fue el resultado valorado por el gobierno? “Tenemos la satisfacción de que todo transcurrió en paz, ordenadamente y que la gente del rock pudo disfrutar de un espectáculo tan convocante”, dijo el por entonces titular del Ente de Turismo, Emiliano Giri, el domingo después del show.
Y desde la Secretaría de Seguridad sólo detallaron que se secuestraron 200 litros de bebidas alcohólicas en las cercanías del estadio. “No hubo detenidos, ni violencia ni desmanes. Todo esto estuvo coordinado desde el Centro de Monitoreo y se pudo trabajar muy bien con la Policía de la Provincia de Buenos Aires, la Policía local y Tránsito”, destacaron.
Con este antecedente inmediato, la valoración que el productor Pablo Baldini realizó este viernes es que la decisión de no brindar policías “es un claro atentado contra la cultura”, y cuestionó: “¿Por qué no dicen la verdad, por qué no dicen que no quieren que La Renga toque en la Provincia de Buenos Aires?”.
