Es oficial: Walter Erviti jugará para Alvarado en el Federal A
El marplatense de 37 años jugará al menos hasta junio en el “Torito” después de haber rescindido su contrato con Independiente, donde viene de ser campeón de la Copa Sudamericana. Es el tercer refuerzo del equipo marplatense.
Alvarado dio el gran golpe del mercado este martes al confirmar la incorporación, al menos por seis meses, de Walter Erviti, marplatense, futbolista de elite, que viene de salir campeón a nivel internacional con Independiente en la Copa Sudamericana, y que ahora se pondrá la camiseta azul y blanca en la segunda fase del Federal A. Tras las llegadas de Leonardo Areal y Cristian Gautier, el exBoca es el tercer refuerzo del club para este semestre.
Alvarado es siempre candidato al ascenso, y sobre todo en las últimas temporadas donde fue incorporando jugadores de peso en la categoría. Sin embargo, este verano dio un salto de calidad sin igual y que repercute en todo el fútbol argentino: aunque en el ocaso de su carrera, el marplatense llega al club del que es hincha para brindar toda su experiencia y calidad para ir por todo en este semestre.
El rumor había surgido en las últimas semanas y fue tomando impulso en los últimos días con la recisión del contrato de Erviti con Independiente. El domingo, en el marco del último partido del torneo de verano, ante la consulta de QUÉ Digital, Facundo Moyano, quien estaba al frente de las negociaciones, admitió estar “hablando” con el exBoca y deslizó que se podría definir en estos días, y así sucedió.
Así, sin lugar en la consideración de Ariel Holan en el Rojo, encontró de brazos abiertos a Mauricio Giganti en el Torito, donde llega para reforzar un equipo que desde febrero afrontará la segunda fase del Federal A. El jugador, de 37 años, está en muy buena forma física (no por nada viene de jugar en un “grande”), cuenta con casi 600 partidos en el mejor nivel y, además de habilidoso, es un referente fuera y dentro de la cancha.
Debutó en 1999 en San Lorenzo, donde disputó 112 partidos, y desde ahí no bajó del primer nivel. De allí partió rumbo la Monterrey mexicano donde se convirtió en ídolo y permaneció durante seis años. Después, en su vuelta al país, grabó a fuego su apellido en la historia de Banfield, donde fue figura del conjunto de Julio Falcioni que se consagró campeón por primera vez en la historia en 2009.
Después, a pesar de que ya rondaba los 30 años, pasó a Boca, donde fue pieza clave en la temporada donde el Xeneize, también con Falcioni, ganó el torneo Clausura, la Copa Argentina, y perdió la final de la Copa Libertadores con Corinthians. Después, tras un paso por el Atlante, volvió a Argentina y ayudó a Banfield a regresar a Primera División y por su permanente buen nivel, volvió a ser requerido por un grande como Independiente.
Allí, en el club que en diciembre salió campeón sudamericano, no tuvo tanta regularidad pero sin dudas llegará a Alvarado aún en plenitud, donde aspira a ponerle un broche de oro a su carrera con el tan ansiado ascenso a la B Nacional.
