Jueves 28 de marzo | Mar del Plata
16/12/2017

Gianelli: audiencia en Casación y expectativa de las familias

Esta semana, las querellas y el Ministerio Público Fiscal defendieron ante el Tribunal de Casación Penal las apelaciones presentadas. Ahora, resta aguardar la resolución que podría revocar la absolución u ordenar un nuevo juicio.

Gianelli: audiencia en Casación y expectativa de las familias
(Foto: archivo / QUÉ Digital)

Pasados los meses tras el veredicto y sentencia que absolvió a la docente de música Analía Schwartz por las denuncias de abuso sexual infantil y corrupción de menores en torno a los jardines de infantes de los colegios Gianelli y Fleming, esta semana se concretó la audiencia oral en la que las querellas y el Ministerio Público Fiscal defendieron los recursos de apelación presentados ante el Tribunal de Casación Penal.

En concreto, la audiencia se concretó el pasado martes y estuvieron presentes el abogado querellante Cristian Prada; representantes del estudio del también querellante César Sivo; y la defensora de  Analía Schwartz, Patricia Perelló; además de las familias denunciantes y la fiscal de Casación en representación del Ministerio Público Fiscal (Fernando Castro).

En ese marco, se hizo una exposición de los recursos presentados, una especie de defensa oral de los puntos que fueron elevados en las apelaciones por escrito, con el objetivo de que la Sala V del Tribunal de Casación tenga todos los elementos necesarios antes de tomar una decisión.

En ese marco, el abogado Cristian Prada destacó, en diálogo con QUÉ Digital, la importancia de este tipo de audiencias, en el marco de un proceso por demás doloroso para las familias denunciantes: “Estuvo muy bien la presentación, la fiscal de Casación estuvo muy bien preparada, estuvieron los tres jueces de la sala. Expusimos todo basado en la pruebas de la causa y escuchamos las críticas de la defensa, que nos trata de mentirosos”.

Al respecto, Prada también destacó el hecho que los jueces se tomaron un tiempo para escuchar a los padres que se trasladaron a La Plata para presenciar la audiencia. Y en ese marco, en lo relativo a la resolución, Prada consideró que “si bien es una cuestión muy compleja, (los magistrados) no se pueden tomar mucho tiempo”.

“Yo creo que tendrán febrero o marzo, es una cuestión compleja pero no se pueden tomar mucho tiempo. Pueden pasar seis meses, pero creo que no, porque hablamos de una cuestión que socialmente reclama una resolución”, advirtió el abogado, respecto a la posibilidad de que el Tribunal revoque la sentencia absolutoria.

En ese sentido,  Prada ratificó que el pedido es de “casación positiva”, es decir, que el Tribunal tome la sentencia y dicte una nueva condena. Sin embargo, también admitió que es algo que se da “muy rara vez”. “La pedí basado en que las pruebas principales son las cámaras gesell y los informes periciales que figuran en el expediente y en que el testimonio de las docentes carece de relevancia porque ellas dicen que no pudo haber pasado, son testigos de creencia no de hechos”, puntualizó.

Sobre esto último, el letrado habló sobre la sentencia absolutoria y dijo que la misma “tiene errores muy grosos”: “Se habla de abusos grupales cuando en realidad nunca se denunció que fueron abusos que ocurrieron en el mismo momento, sino que fueron aislados, con niños de distintos grados”.

En caso de que el Tribunal no haga lugar a la “casación positiva”, la expectativa de los querellantes y el Ministerio Público Fiscal es que se revoque la sentencia y que a través del instituto del reenvío se desarrolle un nuevo juicio, con nuevos magistrados intervinientes.

LOS PADRES Y LA NECESIDAD DE SENTIRSE ESCUCHADOS

Para el abogado querellante, esta audiencia fue por demás importante no solo en función de los pasos procesales, sino de la situación que atraviesan las familias denunciantes. “Los padres tienen expectativa porque están convencidos de que la sentencia no refleja lo que ellos escucharon de sus hijos; no logran entender por qué la sentencia dice que los padres hoy deberían estar festejando y aplaudiendo porque sus hijos no fueron abusados, porque nadie les explica por qué los chicos dijeron lo que dijeron”, graficó.

En esa misma línea, ratificó que “la sentencia absolutoria dejó un gran vacío; fueron violados los derechos internacionales del niño que dicen que los relatos de un menor deben tomarse como creíbles”. Y finalmente, completó: “Esperamos un nuevo juicio o que le den un significado a los padres de lo que es la justicia, porque hay chicos que todavía sufren las consecuencias de lo que pasó”.

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16/12/2017