CNU: perpetua para Demarchi, Durquet y Otero
Fueron encontrados culpables en el primer juicio a civiles de Mar del Plata por integrar una asociación ilícita para cometer delitos de lesa humanidad. A otros cuatro imputados les dictaron penas entre tres y siete años, y dos quedaron absueltos.
El exfiscal federal Gustavo Demarchi y otros dos acusados fueron condenados este martes a la pena de prisión perpetua en el marco del primer juicio a civiles de Mar del Plata contra los integrantes de la Concentración Nacional Universitaria (CNU) apuntados por cometer delitos de lesa humanidad previos a la última dictadura cívico-militar. Otros cuatro acusados recibieron penas de entre tres y siete años, mientras que Raúl Rogelio Moleón y Raúl Arturo Viglizzo –para quienes fiscalía y querella también habían solicitado la reclusión perpetua- quedaron absueltos.
Los nueve acusados –ya que otros dos murieron durante el proceso– que llegaron al final del juicio, realizado en la ciudad desde junio de 2015, fueron condenados por el Tribunal compuesto por los jueces Luis Imas, Víctor Bianco y Alfredo Ruiz Paz.
En concreto, Demarchi, Mario Ernesto Durquet y Fernando Alberto Otero recibieron la pena de prisión perpetua, mientras que José Luis Granel fue condenado a 7 años, Juan Pedro Asaro a 5 años y Roberto Alejandro Justel y Juan Carlos Asaro a 3 años. Finalmente Moleón y Viglizzo quedaron absueltos de todo cargo.
Las penas a Demarchi, Durquet y Otero fueron en sintonía con lo solicitado por la fiscalía a cargo de Daniel Adler, Laura Mazzaferri y Eugenia Montero y por las querellas, sin embargo también habían solicitado la misma pena para Juan Pedro Asaro, Moleón y Viglizzo. Las defensas habían pedido la absolución de sus defendidos al sostener que los ocho crímenes juzgados cometidos en 1975 no son delitos de lesa humanidad y que no existen pruebas que den cuenta de su autoría.
Los ahora condenados conformaron una asociación ilícita comandada por Demarchi –designado como fiscal en octubre de 1974- para perseguir y eliminar a opositores políticos vinculados a la tendencia revolucionaria del peronismo.
El juicio se centró en la revancha criminal que llevó adelante la CNU para vengar la muerte de su líder, Ernesto Piantoni -asesinado por un comando montonero-, que fue bautizada como “cinco por uno”. La serie de asesinatos, que terminó con la vida de cinco militantes y ex militantes políticos de distintas fuerzas, fue el inicio de una seguidilla de muertes que incluyó a otras tres personas entre marzo de 1975 y febrero de 1976.
A Piantoni lo mataron el 20 de marzo de 1975 en una operación de Montoneros. Poco después, durante la noche del velorio, se decidió la serie de crímenes a cometer a modo de “revancha”. Primero mataron a Enrique Pacho Elizagaray, uno de los referentes de la Juventud Universitaria Peronista que recibió 28 disparos; a su tío Jorge Enrique Videla, y a sus primos Guillermo Enrique (16 años) y Jorge Lisandro Videla (22 años), todos militantes de la tendencia revolucionaria, que recibieron una veintena de disparos cada uno.
Luego, fueron a buscar a Bernardo Alberto Goldemberg, médico que había llegado de La Plata para instalarse en la ciudad junto a su familia, y también lo acribillaron.
Después del aquel “cinco por uno”, la CNU asesinó el 24 abril de 1975 al contador y militante de la Juventud Peronista, Daniel Gasparri; a su amigo Jorge Stoppani; y a la decana de la Facultad de Humanidades de la Universidad Católica, María del Carmen Coca Maggi, quien fue secuestrada el 9 de mayo de 1975 y su cadáver recién apareció el 23 de marzo de 1976.
