88 años contados en momentos: una vida llena de poesía
Hilda Martínez Viademonte, maestra jubilada, escritora y actriz, presentó “Momentos”, su más reciente libro de poemas y cuentos en los que con ternura, amor y dolor resume parte de su rica experiencia de vida.
A los 88 años, Hilda Martínez Viademonte aún escribe porque lo siente. Narra, porque necesita contar. Transforma los pasajes de su larga vida, los que la hicieron sonreír y llorar, en cuentos y poesías. La escritura es una de las tantas maneras que con naturalidad le permite expresar sus emociones.
“Momentos” es el nombre que eligió para su más reciente libro, el cual presentó este sábado en la sala de teatro de la Asociación Bancaria de Mar del Plata, acompañada por su compañero de vida, Carlos Méndez Caldeira, su familia, amigos y personas que la valoran y se emocionan con su manera de transmitir.
Hilda Martínez Viademonte nació en 1927 Junín y se instaló en Mar del Plata siendo muy joven junto a sus padres. Toda su vida fue maestra (se recibió en 1944 en la Escuela Normal Nacional de Azul), una apasionada por las letras, y desde hace ya algún tiempo, una brillante actriz y una escritora que aún conserva su facilidad para trasmitir emociones a través de la palabra.
Los cursos y seminarios de literatura, como así también los premios que recibió a lo largo de su vida por sus cuentos y poesías, son el reconocimiento formal que la sociedad le dio a su expresión. Pero implícito en cada uno de los momentos que describe en esta nueva publicación está la mayor de las recompensas que le otorgó el tiempo: su familia y su experiencia de vida.
Para Hilda, “Momentos” es lo que de alguna manera describe como una “pequeña antología de entre casa” y si bien con solo observarla, escucharla y entender lo mucho que ha vivido basta para comprender el por qué del título de este libro, la autora se encargó de explicarlo durante la presentación.
“Cada uno de los momentos que se alternan formando el carrusel de nuestras vidas yacen en el fondo de nuestros corazones. Momentos buenos, malos, tristes, de amargura, de alegría, todos permanecen allí con su carga enorme de emoción y pasión. Yo he sentido siempre la necesidad de liberarlos en un papel en forma de poema”, dijo rodeada de aplausos, no importa cuantos, sino lo mucho que valió escucharla.
Su familia, algunas amigas y gente del mundo del teatro que la acompaña hace tiempo subió al escenario para ponerle su voz a la lectura de algunos de estos poemas y cuentos. Estos últimos tienen su inspiración en hechos y personajes reales, aunque como bien explicó, “están condimentados con un toque inevitable de ficción o imaginación”.
Hilda reconoce no tenerle miedo a la muerte. A veces su salud la condiciona más de lo que espera, pero vive plena día a día. Disfruta y sonríe. Su mente y su memoria, son un privilegio, casi una bendición. El amor de su vida luego de 60 años juntos y sus hijas y nietos como resultado de ese amor puro, son parte evidente sin duda alguna de esas vivencias volcadas al papel.
88 largos años plasmados en momentos. Y si bien el título resume esa experiencia de vida, Hilda Martínez Viademonte encontró una vez más las palabras justas para sintetizar lo que significa este libro: “Hoy abro mi corazón y libero todos esos momentos. Quizás con el paso de los años lleguen a experimentarlos cuando yo sea solo un recuerdo”.
