Viernes 29 de marzo | Mar del Plata
07/07/2016

Caso Lario: autopsia psicológica, más pericias y falsos testimonios

El abogado Julio Razona se refirió al estado de la investigación sobre la desaparición del arquitecto. Dijo que la fiscal Sánchez “tuvo la causa parada tres años” y que ahora Castro “sigue de cerca” los avances. Todo apunta a la exmujer.

Caso Lario: autopsia psicológica, más pericias y falsos testimonios
(Foto: archivo/QUÉ Digital)

Hace cuatro años que Fernando Lario está desaparecido. Si algo falló a lo largo de este tiempo, fue la investigación, la búsqueda. Tanto la familia del arquitecto marplatense como su representante legal coinciden en que se cometieron gruesos errores que no solo entorpecieron, obstaculizaron y desviaron el eje de la búsqueda, sino que además responden a conductas delictivas.

Laura Lario, la hermana del arquitecto que fue visto por última vez el 7 de julio del 2012, pasó un largo tiempo sin tener un abogado. Lucía Castorina fue la primera representante legal de la familia. Luego fue César Civo, aunque por las exigencias que -según Laura- puso este último, optaron directamente por no tener un abogado.

La historia cambió hace cerca de un año, cuando el letrado Julio Razona se hizo cargo del caso. A cuatro años de la desaparición, el abogado habló con QUÉ del estado en el que se encuentra la causa.

-¿Hubo algún avance en la investigación?

-Se ordenaron todas las medidas que solicitamos. En este momento la causa está en la oficina pericial porque pedimos una autopsia psicológica del arquitecto Lario.

-¿Qué nuevos elementos de prueba vitales para la causa se pudieron reunir?

-Ordenamos estudios de las comunicaciones telefónicas para determinar desde dónde se mandaron unos mensajes de texto atribuidos a Fernando Lario.

-¿Qué entorpeció la investigación?

-Varias cosas. Por ejemplo el hecho de no haberse tomado las primeras medidas de investigación ni bien ocurrió la desaparición nos obligó a que reiniciemos la investigación a partir de los motivos que podría haber tenido el arquitecto en función de los falsos testimonios que hay agregados a la causa.

Julio Razona

Julio Razona, abogado de la familia de Fernando Lario (Foto: archivo/QUÉ Digital)

-¿Qué determinación se tomó ante estos supuestos falsos testimonios?

-Indudablemente fueron hechos para desviar la investigación, como el hecho de decir que Lario no tenía tatuajes, cuando tenía más de diez. Eso obligó a buscar a un NN en el primer momento, pero sin tatuajes. Nosotros pedimos que se impute por falso testimonio a los testigos que intentaron desviar la investigación.

-¿Qué se modificó desde que la causa cambió de fiscal?

-Durante tres años la causa estuvo prácticamente parada. Solo hubo un cúmulo de testimonios sin coordinación ni tarea investigativa. Nosotros aportamos una hipótesis cierta y sumamos cuáles fueron los delitos que se cometieron en la investigación.

-¿Fue volver a empezar?

-En la investigación criminal el tiempo que pasa es la verdad que huye. Hay que abordar la investigación desde quién pudo haber tenido motivos y quién salió beneficiado por la desaparición

-¿Mantiene contacto fluido con el fiscal Fernando Castro?

-Castro está pendiente de estas resoluciones que son difíciles de llevar a cabo. La expareja de Lario, (Carmen Graciela) Maldonado, tuvo acceso a la computadora de Lario un día después de su desaparición y sacó información de la misma. Hemos pedido a los peritos informáticos de la Corte que traten de reconstruir qué información se llevaron, lo que sería un indicio más que importante para saber qué se trató de ocultar en ese momento.

-¿Cree que algún día podrá saberse qué pasó con Fernando Lario y donde está?

-Es lo que todos queremos y vamos a seguir hasta tener la respuesta.

TODOS LOS CAMINOS CONDUCEN A LA EXPAREJA

La primera acción legal que tomó el abogado del caso Lario, Julio Razona, fue la de solicitar que se tomaran nuevas medidas de instrucción y en ese sentido se comenzó a ahondar entre quienes tenían “algún motivo para que Lario desapareciera”.

Que Fernando Lario era “mujeriego” no fue novedad alguna para su entorno y mucho menos para su hermana Laura. Para confirmar ese dato y al mismo tiempo descartar la hipótesis del suicidio, en una entrevista con QUÉ, con una mezcla de humor y bronca Laura expresó: “Mi hermano no se suicida. De la única manera que se podía matar era con 50 pastillas de viagra y 30 minas arriba de él”.

ACTO 3 AÑOS FERNANDO LARIO 04

Carmen Graciela Maldonado era la pareja oficial de Fernando Lario desde hacía nueve años, aunque al investigar trascendieron otras relaciones amorosas que el arquitecto mantenía en simultáneo.

Carmen fue quien el 8 de julio del 2012 radicó la denuncia cuando Fernando desapareció. Ese fue el primer “gran pero gran error”, dice la hermana del arquitecto y reafirma el abogado del caso.

¿Por qué un error? Carmen declaró que Fernando Lario “no tenía ningún tatuaje”. Pero en realidad, tenía 13. Uno de ellos en todo su antebrazo con la frase del expresidente Néstor Kirchner “No llegué hasta acá para dejar mis convicciones en la puerta”.

A su vez, supuestamente fruto de los “nervios del momento”, dijo que el día que desapareció llevaba puesto un jean y una campera azul o negra. Luego se constató que en realidad, al salir de su domicilio vestía un pantalón caqui color beige un pullover azul liso, zapatillas con puntera y una campera cazadora de corderoy marrón, color chocolate. Esa campera fue la que se halló posteriormente junto al morral y los documentos del arquitecto en la zona de Los Acantilados.

El abogado Julio Razona entiende que esos “errores” constituyen en realidad una “conducta delictiva” por falso testimonio, previsto en el artículo 275 del Código Penal.

Incluso, el representante legal refiere que se trata de “contradicciones mendaces” de Carmen Maldonado para eventualmente “desviar la búsqueda”, ya que en las primeras horas se buscó a un hombre sin tatuajes y vestido de otra manera, restringiendo así las posibilidades de hallarlo.

Carmen Graciela Maldonado rectificó semanas después la denuncia en Fiscalía General, aunque ya era tarde. Muy tarde. La causa volvió prácticamente a cero. La mujer, meses después de la desaparición, se alejó de la investigación y del entorno de la familia de Lario. Vale aclarar: tras nueve años de estar en pareja, se apartó totalmente de la búsqueda.

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07/07/2016