“Para el Poder Judicial, los niños son seres humanos disminuidos”
La jueza de Paz de Villa Gesell Graciela Jofré presentó en la Feria del Libro su título “Niños y niñas en la justicia” que busca concientizar a los operadores judiciales y a la sociedad sobre la situación que atraviesan los menores víctimas de maltratos y abusos.
La jueza de Paz de Villa Gesell Graciela Jofré pasó por la Feria del Libro y presentó su título Niños y niñas en la justicia, abuso sexual en la infancia un libro que crítica desde adentro al Poder Judicial por sus maneras de tratar a las víctimas menores de edad.
“La impronta del libro es hacer visible y concientizar no solo a los operadores judiciales sino también a la sociedad”, explica la jueza Jofré en diálogo con QUÉ y agrega: “La situación de los niños pareciera que fuera solo la de otros, pero no se ve que hay una interconexión con las mafias de prostitución infantil y pedofilia. Como esas situaciones horribles que nos toca vivir, que le toca vivir a Mar del Plata”.
“Se siguen considerando en el Poder Judicial a niños y niñas como seres humanos disminuidos e inferiores para hacerse respetar, escuchar y comprender en sus sentimiento”, escribe la jueza Jofré en su libro Niños y niñas en la justicia.
-¿Qué es lo que tiene que hacer el Poder Judicial para tratar mejor a los niños y niñas que ingresan al sistema como víctimas?
-La legislación internacional es clara: los niños que sufren abuso sexual infantil no solamente tienen que ser bien tratado por ser niños y niñas, sino porque son víctimas de delito. Hay directrices a nivel internacional que exigen que toda víctima de un delito tiene que ser bien tratada, respetada en su palabra, contenida.
“Los niños y niñas Son atropellados, maltratados e ignorados al momento de resolver sobre su existencia por operadores judiciales que se sienten dioses del olimpo“, continúa la jueza en su libro que crítica al Poder Judicial desde adentro.
-¿Y eso se cumple?
-No. Los victimólogos proponen que se haga la visibilización de los procesos penales sobre las víctimas, ante la necesidad de su buen trato ya que tiene un rol importante en el proceso. Más con estos delitos que tienen que ver con la integridad sexual de niños y que son “cifra negra”, que es la minoría lo que entra en el ámbito judicial, porque la mayoría queda silenciado.
“La Justicia se convierte, en estas situaciones, en una maquinaria destructiva de ese niño o niña y aplasta su integridad emocional. Es la triste realidad, el maltrato y desconsideración de niñas y niños en la Justicia“, se puede leer en el libro de la jueza de Paz de Villa Gesell.
-¿Hay redes de pedofilia y porno infantil en Argentina?
-Sí y son las mafias mafia que están asolando el mundo. En Mar del Plata, Villa Gesell existen. Los que están investigando la trata y la prostitución están viendo que cada vez las víctimas son más niñas y niños, y a parte no hay que entrar en mucho análisis: constantemente desaparecen niños de cualquier edad en el país. Esto tiene que ver con estas mafias y lamentablemente internet es un canal que incentiva delitos como la pedofilia. Eso nos hace plantear que también hay consumidores.
“Se descree de sus relatos, se desoye de las negativas a ver su padre o madre denunciados por violencia o incestos. Un no de un niño o niña no solo debe ser respetado en su palabra, sino en su dignidad humana“, dice en las páginas de Niños y niñas en la justicia.
-¿Alcanza con las normas vigentes para ayudar a los niños que son víctimas de maltratos y abusos?
-Las normas están. Hacen falta conductas, los operadores judiciales tienen que tener capacitación, empatía con las víctimas de los delitos, que no son solo las inmediatas, sino que también son las familias.
En Mar del Plata, un ejemplo inmediato a la situación que viven los nenas y nenas que son víctimas de abusos sexuales y que ingresan al sistema judicial como víctimas es el caso Gianelli, en el que la abogada que representa a Analía Schwartz -imputada por nueve casos de abuso sexual infantil y seis de corrupción de menores- Patricia Perelló, fue apercibida por el Colegio de Abogados por divulgar en un medio de comunicación el contenido de las declaraciones de las víctimas. Es decir, la operadora judicial fue apercibida por vulnerar los derechos y la integridad de nenas y nenes.
