Las Canteras: una plaza para transformar el dolor
El espacio verde por el que Pablo Sebastián Morelli luchó, llevará su nombre a partir de un proyecto de AM. El joven falleció a fines del 2004 y su madre, Lidia Berón, preside hoy la sociedad de fomento del barrio.
Lidia es una de esas mujeres sencillas de barrio, con mirada de “madraza” y un oído siempre dispuesto a escuchar, seguido de un abrazo. La vida -en realidad un taxista imprudente que se dio a la fuga- le arrancó a su hijo Pablo a fines del 2004. Desde entonces, absolutamente todo cambió para ella y su familia. Hoy, un proyecto de ordenanza busca que la plaza del barrio Las Canteras lleve el nombre de Pablo Sebastián Morelli. Y aunque el reconocimiento parezca pequeño, para Lidia este gesto significa mucho más de lo que a simple vista parece. Pero para eso, hay que conocer su historia.
Hasta hace algunos años, en el terreno situado en Mariano Rosas entre Juana Manso y Florencio Sánchez, en el extremo sudoeste de Mar del Plata, había tierra. Lidia Berón recuerda que era un “potrero” en el que su hijo solía ir a jugar a la pelota con los amigos.
Hoy, ese pedazo de tierra se transformó en mucho más que una plaza situada frente a la sociedad de fomento del barrio Las Canteras, que preside justamente Lidia. De la mano del programa “Punto de encuentro” y con el empujón del Presupuesto Participativo, hay juegos, está iluminada, funciona una cancha de hockey, se dictan actividades del Plan Fines, un taller de radio y se desarrollan actividades barriales y comunitarias en un barrio donde el Estado estuvo totalmente ausente hasta no hace mucho.
Ese espacio verde de encuentro entre vecinos, llevará el nombre de “Pablo Sebastián Morelli”. Ese es, al menos, el objetivo que persigue un proyecto de ordenanza que impulsó el concejal de Acción Marplatense Héctor Rosso, que sería difícil no acompañar.
El autor de la iniciativa remarcó en diálogo con QUÉ que “Pablo fue uno de los impulsores de esta plaza y creo que es un proyecto que busca ponerle un nombre a un espacio desde otro punto de vista”.
Rosso conoce la historia de Lidia Berón y el triste final que tuvo la vida de Pablo, a quien el 19 de noviembre del 2004 cuando se dirigía a su casa en un ciclomotor, un taxista en contra mano lo embistió en la esquina de Rosales y Fregui, en el mismo barrio, a pocas cuadras de su hogar. Permaneció internado durante poco más de una semana en el HIGA y el 27 de noviembre, falleció. El conductor del taxi se dio a la fuga. Unos jóvenes lo vieron pero no alcanzaron a observar la patente ya que llevaba las luces apagadas. El hecho, quedó impune. Pasaron más de 10 años.
“Creo que la iniciativa es digna y puede ser un reconocimiento para Pablo y su familia, que ojalá acompañe el resto de los bloques”, añadió el concejal de AM.
LIDIA: “TENGO UNA EMOCIÓN ENORME”
Hay que aclarar algo. La plaza del barrio Las Canteras tomó forma de plaza en el 2013. Pero a fines del 2014, los vecinos se organizaron y colocaron por su cuenta un cartel con el nombre de Pablo. Es decir, le impusieron una identidad. Es lógico. Ante semejante dolor, no iban a esperar una ordenanza para rendirle homenaje a un joven trabajador de 21 años que la impunidad se encargó de arrancarle la vida.
Lidia Berón (Foto: Facebook Las Canteras)
Pero ahora, oficialmente, al Concejo Deliberante ingresó el proyecto y eso a Lidia, la llena de emoción. “La verdad que estoy contenta, tengo una emoción enorme. Todavía no lo puedo creer”, le dijo a QUÉ.
Cuatro meses después de la muerte de Pablo, el marido de Lidia, José Raúl Morelli, sufrió un infarto cerebrovascular que le costó la vida. Y ese dolor se sumó al primero. De ahí, tal vez, viene esa voz entrecortada y esa sonrisa temblorosa que muestra esta mujer luchadora al enterarse de que, oficialmente, la plaza llevará el nombre de su hijo.
Pero estos años Lidia no estuvo sola. La acompañó su familia y también los integrantes de la Asociación de Familiares Víctimas del Delito y el Tránsito de Mar del Plata, quienes la incluyeron y la vienen conteniendo desde que ocurrió la tragedia que cambió por completo su vida.
Algunos de los miembros de esta ONG fundada por Érico Dagatti en el 2003, como Marcela Bravo de Acámpora y Gastón Herrera, también fueron fundamentales para el crecimiento de la plaza “Pablo Sebastián Morelli” y del barrio Las Canteras, donde hoy viven alrededor de 600 familias sin cloacas, con una escuela alejada, un servicio de transporte público intermitente y la promesa de un centro de salud.
El próximo miércoles 18 de marzo a las 17.30, los vecinos se reunirán en la plaza para discutir algunos de estos temas pendientes que postergan la calidad de vida de los residentes de este sector de la periferia de Mar del Plata. La plaza, hoy es un lugar de charlas, mateadas y propuestas. En este encuentro, debatirán también la posibilidad de hacer un censo en el barrio, para tener un conocimiento certero de las distintas realidades a las que el Estado debe acercarles soluciones.
Por lo pronto hoy Lidia sonríe. La expresión de dolor que manifiesta desde hace más de diez años en cada una de las marchas de Víctimas del Delito para continuar exigiendo justicia por la muerte de Pablo y la de muchos más, se transforma en algo inexplicable en la plaza que ahora llevará formalmente el nombre de su hijo. Y eso, la llena de emoción. Porque Lidia no deja de ser una mujer sencilla de barrio, con mirada de “madraza”, un oído siempre dispuesto, una historia que marca y un abrazo que sana y reconforta desde el corazón.
