Viernes 29 de marzo | Mar del Plata
25/07/2017

San Cayetano: “Será una gran fiesta popular en un año difícil”

El cura párroco Juan Pablo Cayrol contó que “el barrio ya se preparando a full” para la festividad del 7 de agosto del santo del pan y el trabajo. “La situación laboral está muy complicada”, dijo. Será la última misa del obispo Marino antes de su salida.

San Cayetano: “Será una gran fiesta popular en un año difícil”
(Foto: archivo/QUÉ Digital)

A fines de julio cada año el barrio San Cayetano se revoluciona de cara al 7 de agosto, día de San Cayetano. La expectativa de los creyentes para ese encuentro íntimo con el santo del pan y el trabajo ya se siente entre los vecinos que rodean la parroquia, quienes desde hace días están en plena organización de la festividad religiosa más convocante de Mar del Plata. El cura párroco Juan Pablo Cayrol habló con QUÉ de los preparativos para esta “gran fiesta popular” que se repetirá en medio de “un año muy complicado por la situación laboral”.

Mar del Plata es la tercera ciudad argentina con mayor cantidad de personas sin trabajoEl 10,4% de los marplatenses está desocupado, lo que equivale a unas 30.000 personas. El desempleo continúa siendo una preocupación colectiva y se espera, como cada 7 de agosto, que miles de fieles se acerquen al templo de Moreno al 6700 para pedir empleo o agradecer tenerlo.

La fecha es esperada por muchos. “El barrio se revoluciona y este año empezamos con mucha anticipación, preparando a full todo el sonido, las vallas, la iluminación y todo lo necesario para vivir ordenadamente una gran fiesta popular”, señaló el padre Cayrol a menos de dos semanas de la celebración.

Los vecinos de la zona ya se están preparando. “Son muy generosos todos. La gente ya empezó a marcar su lugar, van poniendo los nombres en la plaza, en las veredas donde van a instalar sus puestos, hay una linda actitud”, continuó.

El 29 de julio comenzará la novena. Serán nueve días “en los que se va rezando por los jóvenes, por la caridad, el trabajo y la familia” y la expectativa para el 7 “es grande”, fundamentalmente debido a “la gran necesidad de trabajo que hay en Mar del Plata”.

Cayrol, quien desde hace largos años está al frente de la parroquia de San Cayetano, se refirió puntualmente al tema del empleo: “La situación de la ciudad no es fácil y en lo laboral es difícil, es un año difícil, aunque hace años venimos con serios problemas en Mar del Plata”.

SAN CAYETANO (2)

En 2016, el santo del pan y el trabajo convocó el 7 de agosto a “una cantidad de personas sustancialmente mayor a la de años anteriores”, según contó durante la última procesión el padre Cayrol. Y para la fecha que se avecina, la expectativa es similar, aunque depende fundamentalmente de tres variables.

Según el cura párroco, hay tres motivaciones que influyen. La primera, la situación laboral. “El problema del trabajo viene siendo crítico hace mucho tiempo. Hemos pasado por crisis portuarias, crisis textiles… a mayor dificultad, más gente es la que viene”, dijo.

La segunda variable no se modifica, sino que crece y tiene que ver con “la amistad con el santo” porque “hay gente que más allá de que tenga o no trabajo viene porque quiere al santo, porque le reconforta en el alma ese encuentro íntimo para el cual esperaron horas y que luego dura segundos, aunque solo lo puede dimensionar cada persona dentro suyo”.

Y la tercera variable tiene que ver con el tiempo: “Si llega a ser un día lluvioso seguro vendrá menos gente, porque a los adultos mayores lógicamente se les complica”. Hasta ahora, está pronosticado cielo nublado pero sin lluvia para el próximo lunes 7 de agosto.

“HAY DOS TIPOS DE PERSONAS QUE VIENEN QUE ME IMPRESIONAN”

Cayrol, buen conocer del público que cada año visita la parroquia y se acerca a San Cayetano, hizo especial hincapié en las personas que le dan continuidad a la tradición, pero remarcó que “hay dos tipos de personas que me impresionan y me llenan de emoción”.

En primer lugar, dijo, “me sorprende la cantidad de hombres” ya que “en general en la Iglesia participan más mujeres: en las colectas, las misas y entre los voluntarios siempre hay más mujeres”. Pero en San Cayetano “tal vez por la cultura del trabajo, sin plantear un problema de género, vienen muchos hombres y la verdad es que muchísimos se emocionan, es una imagen muy fuerte”.

Y el segundo público al que se refirió, sabe bien Juan Pablo Cayrol que llega a la ceremonia minutos después de las 17: “Empiezan a aparecer los matrimonios jóvenes con los chicos, cuando salen de la escuela. Parejitas jóvenes de 25 a 28 años, con sus hijos, es realmente muy lindo y conmovedor”.

Sin embargo, en cuanto al público en general, precisó también que “hay gente que viene desesperada o decepcionada por el trabajo, mientras otros vienen a pedir por un ser querido. La verdad es que hay algo increíble en ese encuentro con el Santo que no se explica con palabras, pero que tiende a generar una postura más positiva frente a la vida”.

LA ÚLTIMA GRAN MISA DEL OBISPO ANTONIO MARINO

La peregrinación hacia la parroquia y luego por las calles que rodean al templo tiene su punto cúlmine, entre las distintas homilías, en la misa central que cada 7 de agosto por la tarde encabeza el obispo de Mar del Plata frente a la plaza repleta de fieles.

Días atrás se conoció que el Papa Francisco nombró como nuevo obispo de Mar del Plata a Gabriel Mestre, quien hasta ahora se desempeñaba como vicario general de la diócesis y párroco de la Catedral. Con 48 años, será el séptimo obispo diocesano, y primer marplatense elegido como obispo. La medida se da luego de la renuncia de Antonio Marino, quien naturalmente presidió la misa de San Cayetano durante los últimos años.

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En marzo pasado, el hasta ahora obispo de Mar del Plata, Monseñor Antonio Marino, había presentado su renuncia, de acuerdo a lo estipulado por el derecho canónico y teniendo en cuenta que está a punto de cumplir 75 años.

Si bien la misa en la que se despedirá Marino se realizará el 19 de agosto, la última gran ceremonia que presidirá será precisamente la de San Cayetano, la festividad religiosa más convocante que tiene la ciudad.

“Vamos a escuchar con atención las palabras de Marino en la que será su última misa. Y al mismo tiempo estoy muy feliz de que Gabriel Mestre haya sido convocado por el Papa, lo conozco desde que era seminarista y es formidable, es un cura muy completo y en ámbito de lo popular tiene una gran llegada”, dijo al respecto el padre Cayrol de cara a la última misa de San Cayetano que celebrará Antonio Marino en su rol de obispo.

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25/07/2017