En la Feria del Libro, propuestas interactivas para niñas y niños
En la 14° edición, un stand no pasa desapercibido para las mentes curiosas. Autos que son libros, literatura no lineal y aromas que brotan de las páginas, son algunas de las propuestas.
En tiempos donde reina la tecnología por el uso (y a veces abuso) de celulares y computadoras, uno de los stands de la 14° Feria del Libro “Mar del Plata Puerto de Lectura” se reinventa y ofrece propuestas literarias para niñas, niños y adolescentes que rompen con los esquemas habituales de la literatura infantil y juvenil.
Durante una recorrida por la feria que se desarrolla en el Centro Cultural Estación Terminal Sur, QUÉ Digital conversó con Viviana, diseñadora gráfica y licenciada en Marketing, quien en su obsesión por recuperar la oralidad que se ha perdido mucho por el abuso en el uso de la tecnología busca generar otras posibilidades y a través de Atreyu trae a Mar del Plata propuestas por demás innovadoras e interactivas. Juegos de cartas, libros 3D o con aromas son algunos de los formatos que atraen a jóvenes y adultos.
En ese sentido, una opción que se vende mucho entre adolescentes es un juego de cartas compuesto por un mazo de 50 cartas cada uno con diversas temáticas como Ping Pong Literario, Contame, Palabrerío o Vocablos, todas propuestas que trabajan diferentes formas de oralidad, ya sea con preguntas y respuestas autorreferenciales -como ¿qué libro te marcó en tu infancia?-, o a través el armado de historias con cuentos clásicos, la poesía, el armado de palabras tipo scrabble, la literatura japonesa tipo haiku o el armado de historias por género. Estas opciones tienen un precio de $280.
Después, según contó Viviana, quienes visitan el stand se llevan muchos libros-álbum de diversas editoriales como Sudamericana, Ateneo, Pipala o Del Naranjo. Y sin dudas, lo más vendido y solicitado tiene que ver con aquello que sale de lo común, como son, por ejemplo, los manteles individuales lavables para dibujar, borrar y volver a pintar.
Aunque lo que se perdió sin dudas es la oralidad, también es cierto que recuperaron algunos de los formatos clásicos, como son los libros del tipo popups. “Durante un tiempo se perdió por los costos, ya que es un trabajo sumamente artesanal y manual, se imprime como cualquier libro, después llega el montajista que saca lo cortado a láser -antes se hacía con tijera- y lo monta libro por libro”, comentó la diseñadora al respecto.
Por eso las tiradas son limitadas: hay libros más simples y otros más complejos que se pueden apreciar en 3D y los precios van desde los $380 a los $700, porque sin lugar a dudas son pequeñas obras de arte. Para quienes suelen pensar: “Me gustaría meterme realmente dentro de la historia”, hay formatos que vuelven realidad el refrán: libros en los que el lomo no está pegado, por lo que niños y niñas pueden abrirlo y meterse a leer y también jugar.
Teniendo en cuenta lo accesible de la tecnología en estos tiempos, es importante reforzar las propuestas literarias, por lo que los libros se han vuelto más coloridos o más interactivos para que resulten “seductores”, según afirmó Viviana. Por eso, existen libros con aromas, con el mismo formato que aquellas revistas de cosmética en las que se debe raspar un sector para sentir el perfume.
De todos modos, cabe aclarar, no se trata de propuestas tan económicas como sí lo pueden llegar a serlo los libros-juguete, títeres, formas de madera para jugar, autos-libros o libros rodantes.
Por último, una de las propuestas literarias para adolescentes más buscada tiene que ver con romper con las historias lineales, como hace tiempo supo ser el clásico “Elige tu propia aventura”. En esta oportunidad, con “Orbil: el libro del revés” los y las adolescentes tienen la opción de elegir iniciar una historia en la mitad del libro y además pueden interactuar recortando o escribiéndolo.
