Vildoza: “Me voy muy feliz porque sé que voy a un buen lugar”
El gran base que tuvo el Tricolor jugó su último partido con la camiseta del Cervecero y dejó a su equipo entre los mejores cuatro del país. Ahora lo esperan en el Baskonia de España, club que dirige otro base y ex selección Argentina, Pablo Prigioni.
Luca Vildoza se despidió de su primer amor y pronto dejará la ciudad para sumarse a su nuevo club, el Baskonia de España, que para la próxima liga lo dirigirá el ex selección Argentina, Pablo Prigioni. El base que se creó en Quilmes y que se marchó dejando a su equipo entre los cuatro mejores del país, se lleva muchas cosas de la ciudad, pero ante todo, el talento propio que fue formando en su corto camino basquetbolístico con el Tricolor. “Hicimos una gran temporada, así que me voy muy feliz porque se que voy a un buen lugar”, dijo en su despedida, tras el tercer partido con San Lorenzo.
Un pibe marplatense categoría 95, de familia de básquet, con sus primeros pasos dados en Kimberley, pero que se terminó de crear en Quilmes, club con el que debutó a los 15 años. Y que luego de varios años en el Cervecero, en el 2016 firmó su segundo contrato como profesional para el Baskonia de España, institución que a tantos argentinos recibió en su historia dentro del mundo de la pelota naranja.
Siempre rodeado de la redonda anaranjada es como vivía Luca. Con tan sólo 15 años debutó en la máxima categoría del básquet con la camiseta de Quilmes, también a la misma edad vistió la celeste y blanca, en un Sudamericano U15. Aunque no siempre fue todo color de rosas, ya que en un partido amistoso allá por el 2013, Vildoza sufrió una quebradura expuesta en su brazo izquierdo. Pero un año antes, en 2012, el base de 16 años se quebró ambas muñecas en un intento de volcada.
Así de duros fueron los comienzos de un base de exportación, que partido a partido que disputó con la del Tricolor desparramó por varios estadios y por el Polideportivo Islas Malvinas un talento inigualable, como el que pocos tienen, pero como el que él mismo creó en los gimnasios del club de Luro y Guido. Vistió la camiseta de la selección Argentina mayor, dejó a Quilmes entre los mejores cuatro del país e inclusive, en reiteradas veces del año, se acercaron veedores de la NBA para ver quien es Luca Vildoza.
“Estos años que estuve acá entregue todo y la gente me apoyó en todo momento. Hicimos una gran temporada, así que me voy muy feliz porque se que voy a un buen lugar”, detalló el capitán del Cervecero, entre lagrimas, minutos después que sonará la chicharra que le puso fin a la gran temporada de Quilmes.
Es una incógnita saber en qué puesto jugará en España. Sabiendo sus condiciones, que suelen parecer naturales, podría jugar de base, como así también de escolta. Pero lo cierto es que en Mar del Plata dejará un gran vacío y difícil de tapar, aunque su compañero ofensivo, Eric Flor, más de una vez hizo el trabajo de Luca y de buena manera. Sus logros serán festejados en Quilmes porque saben que volverá a vestir la camiseta con la que creció profesionalmente.
Vildoza es del Baskonia hace más de un año, pero las autoridades españolas lo cedieron para que el joven se quede un año más en el club que lo vio crecer. Tras esta temporada que nunca se imaginó, el propio capitán de Quilmes se encargó de asegurar: “Todavía no caí en que me voy, en que se terminó la liga. Ahora estoy relajado porque se que dejamos a Quilmes en lo más alto de la Liga Nacional, por eso me voy contento y muy agradecido”.
En cuanto a lo colectivo y luego de un emotivo abrazo con su abuela que siempre lo observa con los ojos bien abiertos desde la tribuna, Vildoza consideró: “Es difícil despedirme y sé que en España me van apoyar, pero como esta hinchada no hay y tengo todos mis respetos por el club porque desde el primer momento me hicieron sentir parte de esto”.
