Ataques neonazis: los ocho acusados, ante el juez
En el Tribunal Oral Federal, el fiscal y las defensas presentaron el acuerdo de juicio abreviado, que contempla penas máximas de tres años. Afuera, organizaciones protestaron y repudiaron el acuerdo. El lunes se conocerá a decisión del juez.
Tras la investigación, la elevación a juicio de la causa y las idas y vueltas, este miércoles los ocho jóvenes acusados de haber cometido numerosos ataques neonazis estuvieron en el Tribunal Oral Federal (TOF) en el marco de la audiencia en la que la fiscalía y las defensas presentaron el acuerdo de juicio abreviado al que arribaron para evitar el juicio oral, lo que evidencia -una vez más- la notable diferencia de criterios existente entre la fiscalía de instrucción y la que lleva adelante los juicios.
Si bien estaba prevista para después de las 9, la demora en el traslado de un grupo de los jóvenes que permanece detenido hizo que la audiencia comenzara recién pasadas las 11, luego de que los últimos acusados llegaran al Tribunal, ubicado en Luro y Santiago del Estero, en medio de un repudio por parte de las organizaciones denunciantes.
En ese sentido, los reclamos de las organizaciones no solo tuvieron que ver con los ataques perpetrados por los jóvenes, sino que también estuvieron dirigidos al fiscal, Juan Manuel Pettigiani, a quien cuestionaron por haber avanzado en el acuerdo que ahora deberá ser homologado o no por el juez Néstor Parra. El mismo contempla penas de tres años de prisión para cuatro de los imputados y la suspensión del juicio a prueba para tres, además de la absolución de uno. Tras la audiencia, el juez informó que el lunes dará a conocer su decisión.
Durante la audiencia, las partes presentaron los argumentos y los detalles por los cuales arribaron al acuerdo de juicio abreviado, y las querellas esgrimieron las razones por las que se oponen a la decisión del fiscal, quien básicamente consideró que durante la investigación no fueron recolectadas las suficientes pruebas para condenar a los acusados por haber conformado una organización creada para concretar ataques basados en odio.
DEL JUICIO ORAL AL JUICIO ABREVIADO
En febrero de este año el juez federal Santiago Inchausti había elevado la causa por los ataques neonazis a juicio y había acusado a Oleksandr Levchenko, Alan Emanuel Olea, Gonzalo Paniagua, Nicolás Caputo, Franco Martín Pozas, Giuliano y Giordano Spagnolo, y una persona menor de edad, de haber actuado, en grupo o individualmente, en diversos episodios de violencia –que van desde pintadas, daños materiales, amenazas de muerte y fuertes golpizas-, cuyas víctimas no eran elegidas al azar, bajo la reivindicación del nazismo.
En ese entonces, a cada uno de los acusados se les imputó además los delitos de lesiones graves y leves, daños y amenazas de acuerdo a su participación en los doce hechos que forman parte de la investigación como integrantes una organización destinada a imponer sus ideas por la fuerza, delito previsto en el artículo 213 bis del Código Penal, en concurso ideal con el delito de pertenecer a una organización y realizar propaganda basados en ideas o teorías de superioridad de una raza, religión o grupo étnico, reprimido en el artículo 3 de la Ley 23.592.
Sin embargo, varias de esas consideraciones no fueron tenidas en cuenta por el fiscal Pettigiani -que debe llevar la causa a juicio- y el pasado viernes 16 llegó a un acuerdo de juicio abreviado con las defensas, en lo que una vez más muerta las notables diferencias de criterio dentro del propio Ministerio Público Fiscal de órbita federal.
