Caso Bernaola: la fiscalía cambia la acusación a homicidio simple
Así lo estableció el fiscal Pablo Cistoldi en el pedido de prisión preventiva contra Federico Sasso. La modificación supone una mayor expectativa de pena de cara al futuro juicio.
En el marco del pedido de prisión preventiva para Federico Sasso, el joven de 19 años que se encuentra detenido luego de haber atropellado y matado a Lucía Bernaola, la Fiscalía de Delitos Económicos cambió la acusación de homicidio culposo a homicidio simple, lo que supone una expectativa de pena mayor de cara al futuro juicio.
Para establecer el cambio de la calificación, el fiscal Pablo Cistoldi tuvo en cuenta los informes periciales recientemente incorporados a la causa como la pericia mecánica y la accidentológica, sumados a las declaraciones de los tres jóvenes que acompañaban a Sasso a bordo del auto al momento del hecho y “al contenido de las publicaciones en Facebook e Instagram“.
La modificación de la calificación supone una expectativa de pena mayor de cara al futuro juicio. El homicidio culposo contempla penas entre 3 y 6 años de prisión mientras que el homicidio simple, entre 8 y 25 años. Esta última calificación, por ejemplo, se aplicó recientemente en la condena impuesta a Lucas Carnero, el joven condenado a diez años por atropellar y matar a un policía.
Basado en este cambio de calificación, la elevada expectativa de pena que representa, “lo inconmensurable del daño generado y la ausencia de todo gesto del imputado hacia las víctimas” es que el fiscal reforzó el pedido de prisión preventiva.
Por fuera de la calificación, y en cuanto al pedido de prisión preventiva, el fiscal tuvo en cuenta el riesgo de fuga que se fundamenta en “la magnitud de la escala penal de los delitos, la falta de arraigo ya que la familia del imputado se ha retirado del domicilio una vez ocurrido el hecho, desconociéndose su paradero actual y el claro desapego a la ley manifestado en las múltiples y graves violaciones a las normas de tránsito, incluyendo la fuga del lugar del hecho”.
