Crimen en Russia: “Guiraldes le apoyó el arma a la víctima”
Así lo declaró en el juicio el testigo clave en el caso. De todas maneras, ante la intervención de la defensa, reparó en que “no pudo” ver el momento exacto del disparo ya tenía obstruida la vista. Otros testigos desvincularon al acusado del hecho.
Se lo esperaba para el miércoles y se ausentó. Pero finalmente el testigo que es considerado clave en el juicio que se lleva a cabo por el asesinato de Juan Francisco Nicola Ríos -homicidio que tuvo lugar dentro del boliche Russia en junio de 2013– se presentó este viernes y ratificó que el autor del hecho fue el imputado, Marcos Guiraldes. Basó su acusación en que lo observó apoyarle un arma de fuego a la víctima, pero luego dijo no haber podido ver el momento preciso del disparo, ya que su visión estaba obstruida. La defensa, por su parte, puso en duda en el reconocimiento realizado en el inicio de la investigación.
El joven que era uno de los encargados de las relaciones públicas del boliche fue el primero en declarar ante el Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) Nº4 en la reanudación del juicio que comenzó esta semana.
De esta manera, relató que el hecho se produjo al poco tiempo de llegar al lugar, que mientras se encontraba en la barra principal escuchó una discusión a unos pocos metros de allí, que se dio vuelta y, sin poder escuchar los motivos de la pelea, vio cómo una joven le pasaba un arma de fuego a un chico, que luego se la apoyó en el cuerpo a la víctima. Ese chico, dijo, era el acusado.
Tras ello, sostuvo, la menor –que fue sobreseída en un juicio previo y que luego se suicidó– se abalanzó sobre el hermano de la víctima y por eso perdió la visión del momento exacto del disparo por lo que sólo escuchó la detonación y al instante vio a Nicola Ríos desvanecerse y ser sacado por sus allegados.
Ante la consulta puntual del fiscal, el testigo afirmó: “Quien tenía el arma era el acusado, en ese momento tenía diferente el pelo”. En ese mismo sentido, también dijo que luego del hecho y de su declaración preliminar realizó un reconocimiento fotográfico en sede judicial en el que “estaba el sujeto” pero aclaró que “no tenía el mismo color de pelo que durante la noche cuando tenía claritos”. El detalle relativo al color de pelo luego sería luego tomado por la defensa para deslizar dudas en torno al reconocimiento.
Ante la consulta del defensor Wenceslao Méndez, el testigo contó que al momento de presentarse en la comisaría a exponer lo que había visto, un oficial le mostró fotos y en ellas reconoció a la menor de edad en una imagen individual y al acusado en una grupal. En ese sentido sostuvo que había un “problema” entre el acusado -que estaba sin los claritos observados esa noche- y otro joven rubio que aparecía y que también había estado presente en el boliche esa noche.
Tras la declaración de este testigo, se presentaron ante el TOC Nº 4 otros testigos propuestos por la defensa, quienes aquella noche estuvieron en el boliche junto al acusado y sostuvieron que Guirales había estado junto a ellos “todo el tiempo”, a excepción de tramos cortos. Además, dijeron que no escucharon ni vieron nada de lo sucedido.
Una de las jóvenes que declaró y dijo no haber visto lo sucedido ratificó su dichos ante la Dirección Departamental de Investigaciones (DDI), contexto en el que sostuvo que, según rumores que se escuchaban en la escuela a la que concurría en el barrio Centenario, el autor del hecho había sido el primo de la menor que fue sobreseída y quien además es “muy parecido a Marcos salvo que tiene claritos hechos en el pelo”.
LA NOTIFICACIÓN QUE NUNCA LLEGÓ
La especulación sobre por qué el testigo faltó a la audiencia del miércoles también estuvo presente en el debate y ante la consulta de la defensa, sostuvo que nunca le llegó la notificación oficial, incluso tampoco para esta jornada, y que concurrió a partir de que le avisaron los familiares de la víctima.
