Doce procesados por venta de droga, entre ellos dos policías
La Cámara de Apelaciones confirmó los procesamientos con prisión preventiva en el marco de la causa que derivó en numerosos allanamientos en agosto de 2018. Actuaban en la Villa Mateotti, a metros de dos escuelas.
Doce personas -entre ellas dos policías– que fueron detenidas en el marco de una veintena de allanamientos realizados en agosto del año pasado seguirán detenidos con prisión preventiva luego de que la Cámara Federal de Apelaciones confirmara los procesamientos a partir de la investigación que desarticuló una banda dedicada al comercio de droga en la Villa Mateotti, a metros de dos escuelas y un jardín de infantes.
Según informaron desde el Ministerio Público Fiscal, la Cámara Federal de Apelaciones confirmó los procesamientos con prisión preventiva de las doce personas que están acusadas de integrar una organización dedicada al comercio de droga en la denominada “Villa Mateotti”. En la causa intervino el fiscal general ante esa instancia, Daniel Adler, quien solicitó la confirmación de las actuaciones realizadas por el juez Santiago Inchauti que había procesado a los acusados en septiembre del año pasado.
La organización, de acuerdo a la investigación, se dedicaba al abastecimiento de estupefacientes a grupos familiares, allegados y sujetos vinculados o no entre sí –de las cuales no trascendieron las identidades-, y actuó al menos desde agosto de 2014 hasta el día de los 25 allanamientos simultáneos realizados el 23 de agosto de 2018, que permitieron desbaratar la banda.
Su actividad se daba principalmente en lo que se conoce como “Villa Mateotti” o “Villa 35”, ubicada en la manzana comprendida por las calles Mario Bravo, Mateotti, Benito Lynch y Talcahuano, a escasos metros de una escuela primaria, una escuela secundaria y un jardín de infantes provincial.
La banda habría contado con la protección de efectivos de la Policía de la Provincia de Buenos Aires -lo que implica un agravante en la imputación-, quienes manejaban investigaciones a discreción o bien pasaban información sobre futuros o posibles allanamientos a quienes se dedicaban a la venta de drogas.
De acuerdo al análisis de los camaristas Alejandro Tazza y Eduardo Jiménez, se cuenta con un “importante caudal probatorio” para mantener las acusaciones; y repararon en que en los allanamientos se secuestraron, además de cultivos, marihuana y cocaína, armas y municiones en poder de algunos de los acusados.
La causa se conoció en agosto del año pasado cuando se llevaron a cabo los numerosos allanamientos que en su momento terminaron con quince personas detenidas. El megaoperativo, nombrado como “Acantilados blancos” incluyó la participación de una gran cantidad de efectivos de la Policía Federal y de la Policía de Seguridad Aeroportuaria (PSA) incluyó el despliegue de grupos tácticos y un helicóptero para coordinar los 25 allanamientos simultáneos que se llevaron a cabo.
