Los argumentos de la Justicia para que Maciel salga de la cárcel
En medio de los cuestionamientos de la familia de Lucía Pérez, el juez de Garantías Gabriel Bombini aclaró que no se trata de un arresto domiciliario sino una “medida de coerción atenuada”, otorgada en base al delito y la situación del acusado.
En medio de los cuestionamientos de la familia de Lucía Pérez en relación al posible arresto domiciliario de Alejandro Maciel -el hombre de 59 años imputado por “encubrimiento agravado” en el marco de la investigación por el brutal crimen de la adolescente, ocurrido el año pasado– desde la Justicia de Garantías salieron a explicar por qué consideraron pertinente que el acusado salga de la cárcel y se interne en una institución con fines terapéuticos, con monitoreo electrónico.
A través de un comunicado, el Colegio de Magistrados respaldó la decisión del juez de Garantías Gabriel Bombini, quien a fines de la semana pasada accedió a concederle al imputado la morigeración que había sido solicitada por su defensa, en el marco de la investigación por el brutal crimen de Lucía Pérez. Alejandro Maciel se encuentra detenido desde octubre del año pasado en la Unidad Penal Nº 44 de Batán, imputado por “encubrimiento agravado”.
En ese sentido, en su resolución el juez explica que contrario a lo difundido, lo concedido no es “un arresto domiciliario” sino que se trata de una medida de coerción atenuada que implica el ingreso del acusado a una institución con fines terapéuticos – la ONG Proyecto Vida Digna- con monitoreo electrónico del Servicio Penitenciario Bonaerense (SPB), mediante la colocación de una pulsera magnética.
En lo relativo a los motivos para atenuar la medida de coerción, para el magistrado existen suficientes pruebas de que el acusado presenta “problemas de salud” y en ese sentido explica que para asegurarse la correcta aplicación del beneficio se establece la condición “de que se deberá adjuntar un informe semanal del Patronato de Liberados, que incluirá el cumplimiento del tratamiento psiquiátrico y psicoterapéutico en la institución”.
Al respecto, Bombini también menciona que “el encubrimiento agravado es de una pena pasible de condena de ejecución condicional con expectativa de excarcelable, a lo que se le suma la carencia de antecedentes penales condenatorios de Maciel” y por eso considera que es posible que Maciel salga de la cárcel. Además, el magistrado repara en el hecho de que el imputado “ya lleva casi 10 meses detenido sin conclusión sobre la investigación” y también hace hincapié en las “diversas patologías de salud que pueden poner en riesgo su integridad física”.
Sobre el posible riesgo de fuga, para el juez de Garantías lo cierto es que el mismo “puede ser conjurado adecuadamente con la medida de detención en un espacio alternativo y con los controles de monitoreo electrónico, tutorías conductuales y del Patronato de Liberados, para así, atender su situación de salud, y satisfacer la diversidad de intereses en juego”.
Alejandro Maciel es uno de los tres detenidos por el brutal crimen de Lucía Pérez, ocurrido el 8 de octubre en la zona sur de la ciudad. Al momento del asesinato de la chica de 16 años, el hombre de 59 años se desempeñaba como trabajador en el Centro Provincial de Atención en Adicciones (CPA), dependiente del Estado, y antes de su detención permaneció prófugo algunos días. Los otros dos implicados en el crimen son Matías Farías y Juan Pablo Offidani; Farías está imputado en la causa por “abuso sexual seguido de muerte agravado por el suministro de droga en concurso ideal con femicidio”, en tanto Offidani lo está como “partícipe necesario”.
