Los policías detenidos por torturar a dos adolescentes tendrán que declarar este miércoles
Así fue programado por la Fiscalía N°12 tras los allanamientos realizados este martes en los que se detuvo a los cuatro efectivos de la comisaría sexta.
Los cuatro policías de Mar del Plata que fueron detenidos por haber golpeado y torturado a dos adolescentes de 14 y 16 años en un descampado deberán prestar declaración indagatoria este miércoles, de acuerdo a lo programado desde la Fiscalía N°12, a cargo de la investigación del grave episodio de violencia policial ocurrido el 17 de septiembre.
Después de las detenciones concretadas este martes a la mañana, tras los allanamientos llevados adelante en cada una de sus casas, los cuatro policías que hasta el momento integraban la comisaría sexta de la ciudad fueron alojados en la Alcaidía Penitenciaria de Batán y en el Destacamento Femenino.
Y, según confirmaron fuentes judiciales, este miércoles deberán ser trasladados a Tribunales para que el fiscal Juan Pablo Lódola, quien encabeza la causa, los notifique formalmente de la imputación en su contra y les brinde la posibilidad de prestar declaración indagatoria.
El sargento Jonatan Cabrera, la oficial Micaela Estigarribia, la sargenta Vanesa Cano y el oficial ayudante Ariel Estevez Pitrau están acusados por la fiscalía bajo los delitos de privación ilegal de la libertad agravada y torturas.
De la reconstrucción realizada por los investigadores se desprende que el sábado 17 de septiembre en la zona de las calles 210 y Beruti, Cano y Estévez interceptaron a los dos adolescentes, a quienes pidieron que se apoyaran contra el patrullero con el “pretexto de identificarlos“, y minutos después llegó el segundo patrullero con Estigarribia y Cabrera.
De acuerdo a datos publicados por la agencia Télam en base a la reconstrucción realizada en el expediente judicial, “sin mediar palabra, Cabrera le propinó un golpe de puño” en la boca al adolescente de 14 años y Estévez sacó su arma reglamentaria y se la apoyó en las costillas, en tanto que después Cabrera también “extrajo su arma reglamentaria e hizo lo propio sobre la cabeza” del adolescente para luego gatillarla y posteriormente esposar a ambos adolescentes.
Así fue que los policías detuvieron de manera ilegal a las víctimas y las trasladaron hacia un descampado ubicado en Strobel al 10500. “Ahora van a ver cómo los matamos y nadie se enteró, dos más no me van a hacer nada”, acusan los investigadores que le dijo Estigarribia a los adolescentes.
Asimismo, siempre de acuerdo a la reconstrucción de la fiscalía, una vez en el descampado los adolescentes fueron obligados a ponerse de rodillas y los policías continuaron apuntándoles con sus armas y golpeándolos, hasta que, finalmente, les ordenaron que se levantaran y que empezaran a correr mientras Estévez tenía una escopeta en la mano. La escena fue descripta como “si se tratase de una ejecución mortal, lo que hizo que los menores corrieran atemorizados a campo traviesa en el intento de ser alcanzados por los proyectiles de goma”.
