Aborto: la Interrupción Voluntaria del Embarazo se convirtió en ley
Con 38 votos a favor y 29 en contra, el Senado de la Nación transformó en ley una histórica deuda con las personas gestantes. Cómo se vivió la votación en Mar del Plata.
Luego de más de doce horas de exposiciones, el Senado de la Nación convirtió en ley este miércoles a la madrugada el proyecto de legalización del aborto presentado por el gobierno nacional, denominado “Regulación del acceso a la interrupción voluntaria del embarazo”, un histórico reclamo de los movimientos de mujeres y disidencias.
Tras 15 años de presentaciones ininterrumpidas de proyectos por parte de la Campaña Nacional por el Derecho al Aborto Legal, Seguro y Gratuito y el primer tratamiento realizado en 2018, finalmente este año el proyecto oficialista encontró los votos necesarios para convertirse en ley: 38 senadores y senadoras votaron a favor, mientras que 29 lo hicieron en contra, en tanto que hubo una abstención.
En el marco de una sesión iniciada a las 16 de este martes, minutos después de las 4 de la madrugada de este miércoles finalmente se produjo la votación, que fue seguida de cerca por una multitud afuera del Congreso de la Nación y lo propio ocurrió en Mar del Plata, con una vigilia montada desde la tarde frente a la Municipalidad.
Al conocerse el resultado de la votación, seguida atentamente desde una pantalla gigante instalada sobre el frente de la Municipalidad, la emoción invadió la calle.
El Senado también aprobó el proyecto paralelo del gobierno nacional, el cual apunta a la creación de un Programa de los 1.000 días, con el objetivo de generar políticas de contención a quienes deciden ser madres y protección a la primera infancia.
La “Regulación del acceso a la interrupción voluntaria del embarazo” aprobada esta madrugada con el objetivo de “contribuir a la reducción de la morbilidad y mortalidad prevenible” mediante la legalización y despenalización, establece principalmente que en Argentina las mujeres tengan la posibilidad de decidir interrumpir el embarazo en los términos planteados por la ley a instancias del sistema de salud pública en el durante y en el post aborto, y la prevención de los embarazos no intencionales mediante el acceso a información, educación sexual integral y a métodos anticonceptivos eficaces.
En otro de sus artículos la ley establece que el acceso libre y gratuito a la interrupción voluntaria del embarazo abarca a los casos de personas gestantes que decidan hacerlo hasta la semana catorce inclusive del proceso gestacional. Por fuera de ese plazo, la ley contempla únicamente los casos de interrupción legal: si el embarazo fuera resultado de una violación, si se tratara de una niña de menos de 13 años, o si estuviera en peligro la vida de la persona gestante.
Además, la regulación establece pautas como la necesidad de ser atendida la solicitud de la persona gestante dentro de los diez días, y condiciones en torno a la atención sanitaria segura y el post aborto, puntualmente en lo que hace al trato digno, la privacidad de la misma y el respeto a la confidencialidad.
El 11 de diciembre durante su tratamiento y aprobación en Diputados, el proyecto original tuvo una serie de modificaciones, principalmente a la incorporación de una objeción de conciencia en las instituciones médicas privadas (que deberán derivar al paciente pero no pueden negar la atención post aborto ni ceder la cobertura del mismo) y el acompañamiento obligatorio a menores de 16 años.
Otro de los puntos del proyecto de legalización del aborto en Argentina contempla la educación sexual integral y salud sexual y reproductiva. En ella se establece la responsabilidad de todas las jurisdicciones de implementar la Ley N° 26.150 de Educación Sexual Integral (ESI) “estableciendo políticas activas para la promoción y el fortalecimiento de la salud sexual y reproductiva de toda la población”.
