Accidentes en acantilados: el Municipio apunta a “persuadir con información”
Tras la muerte de un turista, desde Defensa Civil se centraron en la “toma de conciencia” respecto a permanecer cerca de los acantilados. Colocarán más cartelería.
A pocas horas de la caída de un turista de un acantilado en la zona sur de Mar del Plata que derivó en su muerte y mientras ingresó al Concejo Deliberante un pedido de información para conocer qué acciones y medidas preventivas toma el gobierno municipal, desde Defensa Civil se centraron -más allá de las medidas de mitigación y de obras concretas- en realizar campañas de concientización sobre los riesgos de accidente que implica permanecer cerca de los acantilados. De todas formas, prevén colocar otros 50 carteles más.
“Lo mejor que podemos hacer en materia de prevención, más que tomar cartas en el asunto y hacer obras o medidas de impedimento, tiene que ver con hablarlo y comunicarlo: persuadir con información a la población sobre el riesgo de permanecer sobre los acantilados, ya sea en el borde como en la famosas cuevas que son socavamientos por la erosión marítima”, planteó el titular de Defensa Civil, Rodrigo Goncalvez en diálogo con Qué digital.
Mientras aún se encuentran en investigación la muerte del turista español que falleció este domingo luego de caer desde la orilla de un acantilado en zona sur, puntualmente en el barrio El Marquesado, y mientras la principal teoría apunta a que el hombre se estaba tomando fotos sobre el borde cuando se produjo un desmoronamiento y así cayó al vacío, desde Defensa Civil plantearon en torno al reciente caso lo “impredecible” del comportamiento de la naturaleza que “no se puede manejar con acciones de mitigación operativas”.
Al reconocer la responsabilidad del Estado municipal en materia de prevención y ciertas “limitaciones”, Goncalvez llamó a “ser responsables” y graficó: “Muchas veces la gente lleva a su familia a los acantilados y estacionan a medio metro del borde. Los chicos corren en los acantilados, pero hay que entender que tenemos precipicios de 10, 15, 20 o más metros de altura que son mortales“.
Al considerar al acantilado como un “escenario natural” que representa riesgos para la vida de las personas “donde nos encontramos con estos fallecimientos absurdos y evitables como pasaron en las últimas horas”, desde Defensa Civil plantearon la necesidad a nivel municipal de “trasladar información a turistas y vecinos para que entiendan estas situaciones”.
Más allá de colocar carteles que adviertan sobre el peligro de los derrumbes a la población -desde el Municipio consideraron a la medida como “no determinante” pero “importante” como parte de una campaña de concientización– Goncalvez planteó como ideal que la sociedad “vaya evolucionando” y “se dé cuenta qué acciones representan un riesgo”.
En los últimos años, aseguró, se colocaron más de 80 carteles en distintas zonas de Mar del Plata. Sin embargo, muchos de ellos han sido robados o vandalizados. Según detalló el funcionario, buena parte de los carteles se ubican en las bajadas públicas a las playas “como lugares estratégicos que creemos conveniente ponerlos”.
Según detalló, los carteles se dividen en dos tipos. Por un lado, aquellos de material más denso colocados en altura y con soporte de hierro de alrededor de dos metros de altura, de los cuales se colocaron 50 en dos tandas. Mientras que el resto de la cartelería corresponde a un material “ultralivano” de PVC colocados, según explicó Goncalvez, por debajo de los acantilados “para que la gente que está en la playa los pueda visualizar”. En ese marco, adelantó que desde el Municipio se trabaja en la colocación de otros 50 carteles.
Desde el bloque de Acción Marplatense, presentaron en los últimos días un proyecto vinculado a las zonas de barrancos del sur para solicitar medidas de protección específicamente en la bajada de Los Acantilados que calificaron como “peligrosa” al tratarse de senderos que surcan los propios barrancos y por donde, en plena temporada de verano, transita una importante cantidad de personas.
Sin embargo, tras la reciente muerte del turista, los concejales Horacio Taccone y Paula Mantero fueron más allá y presentaron un pedido de informes para que el gobierno de Guillermo Montenegro explique las acciones que desarrolla en torno a “la prevención de siniestros producto del desprendimiento y derrumbe de acantilados” con, por ejemplo, señalización, difusión, presencia disuasoria y controles. A su vez, ingresaron un proyecto de ordenanza para declarar los espacios de barrancos como “Zona de Manejo Crítico Prevencional”.
Desde Defensa Civil señalaron a Qué digital que más allá del alto riesgo de desmoramiento de los acantilados, las estadísticas sobre los últimos años demuestran “consecuencias operativas mínimas”. Es que si bien sobre el invierno, estación del año en que se presentan condiciones meteorológicas más adversas, se registran más derrumbes “la estadística de mortalidad es muy baja, aunque sí tiene que ver con la accidentología”.
“Hemos tenido algunos lesionados y atenciones menores pero no hay una estadística recurrente de accidentes que se acerque a la de tránsito o a la de accidentes domésticos. Pero sí sabemos de la potencialidad de riesgo”, concluyó Goncalvez.
