Balnearios: piden que Pablo Fernández dé explicaciones
El radicalismo presentó un proyecto para interpelar al titular del Ente Municipal de Turismo. Lo acusa de dejar vencer los plazos de las concesiones y prorrogar de hecho la explotaciones comerciales.
Luego de que este martes la directora general de Unidades Turísticas Fiscales del Ente de Turismo, Mónica Rábano, participara de la comisión de Obras del Concejo Deliberante en el marco del tratamientos de varios expedientes relativos a las licitaciones de balnearios, el radicalismo presentó un proyecto por medio del que solicita que el titular del Ente, Pablo Fernández se presente a dar explicaciones.
Es que, lo acusan de dejar vencer los plazos de los contratos de las concesiones y prorrogar de hecho la explotación comercial de las unidades turísticas.
El proyecto para interpelar a Fernández en el Concejo fue presentado por el edil Nicolás Maiorano, el mismo que la semana pasada pidió que concurran varios funcionarios por otros cuestionamientos. En este caso, el pedido está centrado en supuestas irregularidades en los plazos de las concesiones de los balnearios.
En concreto, el proyecto presentado señala que actualmente se encuentran con contratos vencidos las Unidades Turísticas Fiscales de Playa Bristol; Popular; La Perla 1, 2, 3, 4, y 5; Camping Municipal; Torreón del Monje; Playa Cardiel; Playa Escondida; y Cantera 1, entre otras.
En ese sentido, se apunta que solo la cantidad evidencia “que la ordenanza que establece que una vez finalizado el período de concesión las Unidades Turísticas Fiscales deberían ser restituidas a la Municipalidad -o bien, en el tiempo previo a su finalización realizar un nuevo llamado licitatorio- no ha sido utilizada en forma excepcional, sino que es práctica habitual de la administración Pulti dejar vencer los plazos de los contratos de las concesiones, y prorrogar de hecho la explotación comercial de las unidades”.
Sobre los casos planteados, el proyecto especifica que “en algunos casos tienen actos administrativos que efectivizan las prórrogas de hecho, y en otros, ni siquiera se ha formalizado la voluntad del Estado municipal para extender las concesiones“.
Finalmente, Maiorano sostiene que la cantidad de unidades turísticas prorrogadas de hecho, además del tiempo transcurrido en cuanto a la extinción de la concesión, “hacen pensar que la excepcionalidad se ha desvirtuado a favor de un método de forma no transparente que extiende prerrogativas sobre privados en desmedro del interés público”.
