Boleto: “El contrato se ha tornado de imposible cumplimiento”
Para justificar el nuevo pedido de reajuste tarifario, el empresario Juan Inza hizo hincapié en la inflación en alza, el tope en los subsidios y la suba en el dólar.
A menos de tres meses de concretado el último aumento, en el marco del nuevo pedido de actualización de la tarifa plana de colectivos -los empresarios buscan llevarlo de $13.55 a $19.30-, el máximo referente del sector, el empresario Juan Inza justificó la necesidad de un reajuste al afirmar: “El contrato de concesión que nos vincula con la Municipalidad de General Pueyrredon, en las condiciones económicas actualmente vigentes, se ha tornado de imposible cumplimiento”.
En la nota que presentaron ante el Concejo Deliberante y que lleva la firma de Inza -quien monopoliza prácticamente la totalidad del servicio y es uno de los empresarios procesados en la causa “choferes fantasmas”– desde la Cámara Marplatense de Empresas de Transporte Automotor de Pasajeros (Cametap) ahondaron en el impacto de la inflación en alza, el tope en los subsidios para el sector y la suba en el dólar.
Al respecto, advirtieron que “resulta imprescindible que la Municipalidad de General Pueyrredon materialice las potestades públicas indispensables para morigerar los efectos nocivos que los altos costos provocan en la ecuación económica financiera de los concesionarios que se encuentran nuevamente en una situación de desequilibrio que puede afectar la debida prestación del servicio”.
Y en base a su propio estudio de costos, consideraron que la tarifa adecuada para el Partido de General Pueyrredon debería ser $19.30, es decir, $5.75 más que en la actualidad. Esto, en base a “una fuerte devaluación del signo monetario con la consecuente inflación en el precio de los insumos básicos y necesarios para la prestación del servicio público de transporte urbano colectivo de pasajeros”.
Entre los numerosos argumentos expuestos, los empresarios nucleados en la Cametap advirtieron que “el proceso inflacionario incide directamente sobre los costos” a punto tal que, al día de la fecha, “y pese al aumento tarifario otorgado en el mes de agosto de 2018, la tarifa plana actual se encuentra notoriamente desactualizada”.
Acto seguido, ahondaron en cómo su ecuación económica financiera está sufriendo “una grave distorsión” como consecuencia de la devaluación del peso y la consecuencia suba en la inflación, lo que afecta “directamente a los insumos básicos necesario para la correcta prestación del servicio público de transporte urbano colectivo de pasajeros”.
“El contrato de concesión que nos vincula con la Municipalidad de General Pueyrredon, en las condiciones económicas actualmente vigentes, se ha tornado de imposible cumplimiento”, enfatizaron y además advirtieron que de no haber una actualización, esta situación desembocará “en un impedimento para brindar un servicio regular y eficiente”.
SUBSIDIOS, DÓLAR Y SALARIOS
Por otro lado, los empresarios también hicieron alusión al impacto de la decisión del gobierno de nacional de transferir los subsidios a la órbita provincial, con la particularidad de que la Provincia fijó los montos máximos a distribuir a las empresas prestatarias a partir del mes de enero del 2019 y que además se eliminó el cupo de gasoil a precio diferencial o subsidiado. Cabe recordar que, tiempo atrás, estos mismos empresarios pegaron cartelería en las unidades para advertir que, en caso de una quita de subsidios, el boleto pasaría a costar $40.
“Esto significa que, a partir de enero del 2019, las empresas que conforman esta Cámara deberán adquirir el 100% del combustible a precio de mercado o surtidor”, graficaron y expusieron que como consecuencia de la congelación de los montos a precios de 2018 “a partir de ahora todo incremento en el precio del combustible deberá ser paleado indefectiblemente con aumento tarifario”.
En cuanto al dólar, advirtieron que la variación constante a la que se ve afectada la moneda extranjera también impacta en la ecuación económica financiera y en ese marco detallaron: “Si el valor del dólar aumenta un 10%, entonces el valor de la tarifa plana debe aumentar un 5%.
Y en lo relativo a los salarios de los trabajadores del sector, aseguraron que la actual tarifa no contempla las últimas readecuaciones, pese a que las mismas “ya se están abonando”. “El último acuerdo firmado en diciembre prevé un incremento para enero, febrero y marzo que no se encuentran por supuesto cubiertos por subsidios, además de dejar abierta la cláusula de ajuste ‘gatillo’ como consecuencia del monitoreo de la inflación”, señalaron y completaron.
Finalmente, desde Cametap trazaron una comparación en relación al valor de la tarifa en distintos puntos del país y llegaron a la conclusión de que en la actualidad “hay 55 ciudades argentinas donde el precio de la tarifa es superior a los $ 13.55 que se perciben en esta ciudad” y que el actual valor del boleto se ubica por debajo del promedio del país ($18.29).
“En conclusión, la ciudad de Mar del Plata posee un boleto plano inferior en la cantidad de $4.74 (un 26%) al promedio nacional. Junto a ello, su boleto es inferior a la totalidad de ciudades análogas como Córdoba, Rosario, Mendoza o Bahía Blanca”, completaron.
