Cheppi: “Estamos dispuestos a competir con quien sea”
El precandidato a intendente por el oficialismo se mostró confiado y no descartó la interna con Gustavo Pulti. Dijo que hay dos modelos en juego y que dependiendo de las alianzas habrá dos propuestas: “El FpV y los otros”.
“El candidato es el proyecto”, dice Carlos Cheppi y repite el eslogan con el que en esta oportunidad decidió hacer campaña en Mar del Plata, de cara a las próximas elecciones. Ya conoce el juego de la política local y por eso es cauto a la hora de esbozar definiciones respecto a algunas de las incógnitas en torno a su precandidatura a intendente como referente del Frente para la Victoria (FpV) ¿Competirá con Gustavo Pulti en las Primarias, Abiertas, Simultáneas y Obligatorias (PASO)? ¿Apoyará a Florencio Randazzo como precandidato a suceder a Cristina Fernández de Kirchner como máxima autoridad de la Nación?
Asegura que las definiciones llegarán, pero a su debido tiempo. Lo único que dice saber con certeza es que quien gane la interna del FpV será el próximo intendente del Partido de General Pueyrredon. “Por eso hay que ganar las PASO”, entiende y afirma no tener miedo a competir, algo que por estas horas no es menor, luego de que el intendente anunciara a algunos medios su intención de conformar un “Frente Marplatense” para competir con otras fuerzas que apoyen el proyecto nacional.
Respecto a la ciudad, advierte que la necesidad primordial está puesta en la baja oferta de empleo. “Mar del Plata sigue teniendo un problema importante que es el de la oferta laboral, en todos los niveles, para todos los niveles sociales, desde los profesionales que se reciben hasta la persona de trabajo con menor formación”, sostiene.
Carlos Cheppi tiene 60 años y nació en Mar del Plata. Es ingeniero agrónomo y en 1987 tuvo su primer contacto con el Frente para la Victoria, de la mano de Néstor Kirchner. Fue ministro de Agricultura de Santa Cruz y luego continuó su tarea en el INTA (Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria) aunque ya en la provincia de Buenos Aires. Pasó por la Secretaría de Agricultura y Pesca de la Nación, hasta que la presidenta le encomendó el cargo de embajador argentino en Venezuela. En paralelo, en 2005 comenzó con su carrera política local y en ese contexto se presentó, en 2011, como candidato a intendente, aunque quedó en tercer lugar. Luego, en 2013, acompañó la lista de concejales encabezada por el actual edil Daniel Rodríguez.
– ¿Cómo te encontrás ubicado para estas elecciones?
– Vamos a participar de las PASO, eso está claro, vamos a presentar una lista sin dudas. Obviamente en eso después va a depender también si el intendente juega o no juega dentro del Frente, pero eso lo tendrán que definir ellos. En este tiempo se han ido sumando otras agrupaciones y en ese contexto las expectativas son buenas, hemos mantenido un nivel de intención de voto interesante, más allá de que yo he estado en Venezuela.
– ¿Qué creés que necesita Mar del Plata?
– Diría que en términos generales, en relación a lo que fue la campaña de 2011, no han cambiado demasiado las cosas. Mar del Plata sigue teniendo un problema importante que es el de la oferta laboral, en todos los niveles, para todos los niveles sociales, desde los profesionales que se reciben hasta la persona de trabajo con menor formación. Entonces desde ese punto de vista, el problema de la ciudad sigue siendo la necesidad de generar 40 o 50 mil puestos de trabajo; y estoy convencido que se puede. Mar del Plata tiene capacidad y diversidad, pero hay que armar un proyecto de ciudad, sino es muy complejo generar eso.
– ¿Cómo influye en el armado político el hecho de que desarrolles funciones en Venezuela?
– Claramente no es lo ideal, lo ideal sería estar acá todo el tiempo. Pero eso también tiene que ver con la historia política de cada uno; yo empecé con este grupo político en Santa Cruz. Uno es parte de una cosa que era local allá en Río Gallegos, luego fue provincial y ahora es nacional. Y en eso ha sido el historial de cargos que yo tuve desde 2003. Entonces, entiendo que soy parte de una estructura mucho mayor y que por eso estoy donde estoy.
En su momento hubo una posibilidad concreta y que busqué en 2006 de volver a Mar del Plata, pero siempre tuve cargos nacionales. En ese contexto se construyó lo que se construyó. Y en esta etapa, la presidente me mandó a Venezuela, y obviamente cuando me lo dijo hablamos de Mar del Plata, pero la necesidad estaba allá. Uno trata de continuar la política local, pero con los condicionamientos que hay. Quizás, si no hubiera tenido la posibilidad de ser parte de un proyecto nacional mi carrera política acá tal vez no hubiera existido. En términos concretos, claro que sería mejor estar acá, pero se da esta situación.
PULTI, EL FRENTE PARA LA VICTORIA Y LA INTERNA MÁS ESPERADA
– Gustavo Pulti ya manifestó públicamente que apoyará a Daniel Scioli como candidato a presidente. Entonces, ¿Cheppi irá con Florencio Randazzo?
– Nosotros en esto hemos sido muy cautos y por eso nuestra campaña es “El candidato es el proyecto”. Faltan cosas por definir claramente, hay historias, por lo que no me sorprende que Pulti haya elegido apoyar a Daniel Scioli, porque tienen una historia detrás. Con Scioli tengo una excelente relación personal, lo conozco por mis cargos nacionales, tengo muy bien diálogo con él. Pero nosotros no vamos a cerrar absolutamente nada hasta que no se definan todos los candidatos de manera concreta.
Por otro lado, Randazzo es un tipo muy respetable, ha tenido pila de cargos a nivel nacional, provincial, gestiona muy bien, está clarísimo eso; también tengo la mejor relación en lo personal con él, lo mismo con Sergio Urribarri o con Jorge Taiana. No es un problema de relaciones esto, y llegado el momento, que no falta mucho, definiremos.
– ¿Hoy en día, cuál es el vínculo del FpV con el intendente?
– Pulti ha sido un aliado del gobierno siempre, aunque ha mantenido su identidad como referente de Acción Marplatense. Él ha manifestado claramente que está dispuesto a participar de las PASO en el FpV, pero todavía no lo confirmó oficialmente. Y nosotros no tenemos problema de jugar con quien sea; hemos emergido en la política local a partir de las PASO y estamos acostumbrados a eso. Es muy probable que el transcurso de las semanas aparezcan otras listas y están en todo su derecho.
Creo que las PASO son una herramienta muy interesante para que quien tenga ganas y demuestre voluntad de competir lo puedan hacer. Después, se pasará o no el límite y se seguirá. Me parece que es una instancia muy sana y además, descomprime esto del dedo, sino es muy complicado, porque no siempre se puede conformar a todo el mundo. En este momento, estamos dispuestos a competir con quien sea, pero con una idea clara: el que gane la interna va a ser el próximo intendente, de eso no tengo dudas y por eso hay que tratar de ganar esa interna.
DOS MODELOS DE PAÍS EN JUEGO
– ¿Cuál es el escenario en cuanto a la disputa en estas elecciones 2015?
– Se ponen en juego dos modelos totalmente distintos, uno que se inició en 2003 con Néstor Kirchner, que continuó Cristina y que ha dado pasos tremendamente importantes en todos los niveles, desde la generación de trabajo a la política internacional y ni hablar de lo que significó la estatización de las AFJP, la asignación universal, el Procrear. A cualquiera le va a ser muy difícil volver esas cosas para atrás; entiendo que faltan cosas, claro, pero hay que profundizar el modelo.
– ¿Y por qué la gente debería elegir el camino del FpV y no el del PRO o el del Frente Renovador?
– Para empezar, el hecho de que Mauricio Macri diga que hay que pagar lo que dice Griesa implica 200 mil millones de dólares y es volver atrás todo el proceso de desendeudamiento y de independencia política. Eso es lo que se está jugando hoy en día, no es cualquier cosa. Entonces ahí está la diferencia, esos son los modelos. A mi criterio extraña desde lo local que grupos que siempre fueron o estuvieron del lado nacional hoy cierren alianzas con el PRO, como Vilma Baragiola, o tal vez Carlos Arroyo. Me parece que dependiendo de cómo se hagan esas alianzas va a haber dos propuestas: el Frente para la Victoria y los otros.
