Concejales piden que se autoricen clases presenciales en Mar del Plata
Elevaron una iniciativa para pedir a la Provincia que se permitan actividades para el último año de educación primaria y secundaria.
Mientras Mar del Plata se mantiene en la fase 3 de la cuarentena al menos hasta el próximo domingo por la cantidad de casos de coronavirus, un proyecto de resolución presentado por la concejal radical Cristina Coria en compañía de otros ediles del oficialismo busca pedirle formalmente al gobierno provincial que autorice el regreso de las clases presenciales para los últimos años de las escuelas primarias y secundarias de Mar del Plata con los protocolos correspondiente. Cabe recordar que por disposición de la Provincia por ahora solo una veintena de los 135 distritos bonaerenses se encuentran en condiciones de iniciar gradualmente tareas presenciales.
El proyecto de resolución, impulsado desde el radicalismo con el acompañamiento de otros sectores del oficialismo, busca que el Concejo solicite formalmente al gobierno de la Provincia para Mar del Plata “la autorización del dictado de clases presenciales en las escuelas para estudiantes del último año de educación primaria y secundaria con los requisitos, aforos y protocolos establecidos en el Plan Jurisdiccional de la Provincia para un regreso seguro a las clases presenciales”.
Además, el expediente -que ahora deberá empezar a ser discutido en las comisiones internadas del Concejo- pide a la Provincia la “autorización para el desarrollo de los actos de colación de fin de curso, en espacios abiertos, con los requisitos, aforos y protocolos que estime convenientes”.
El proyecto, presentado en las últimas horas en el Concejo, plantea coincidir “en la mirada particularizada sobre los alumnos que están atravesando el último año, que desde un punto de vista educativo, social y psicológico están ante un cambio de ciclo, un punto de inflexión en sus vidas y que, por lo tanto, requiere un cierre que excede lo pedagógico y atraviesa lo emocional”.
“Esa finalización de etapa requiere compartir, al menos por unas semanas antes del fin del ciclo lectivo, el espacio físico en clases presenciales, recuperando el contacto social y el espacio de contención entre los y las estudiantes, por supuesto, contemplando las posibilidades y condiciones edilicias y todos los requisitos para un adecuado cuidado sanitario”, afirma el expediente.
Y, finalmente, repara en que “nada de lo expuesto implica un desconocimiento de la compleja situación sanitaria que atraviesa nuestro país, ni de los cuidados que deben mantenerse sin vacilaciones” y considera que el pedido “significa reconocer la importancia, no sólo desde el punto de vista pedagógico, sino emocional y social, del cierre de una etapa educativa”.
La semana pasada, luego de que el Consejo Federal de Educación (CFE) aprobara un “marco de análisis y evaluación de riesgo” con indicadores epidemiológicos para orientar a cada una de las provincias en la toma de decisiones respecto a si es posible o no retomar algún tipo de actividad en las aulas, el gobierno bonaerense definió los primeros distritos que comenzarán a transitar el regreso a las clases presenciales, tanto en las escuelas de gestión estatal como privada al evaluarse como “de bajo riesgo epidemiológico”.
Se trata de los municipios de Daireaux, Bragado, Tres Lomas, Lobos, Lezama, Salliqueló, Alberti, General Lavalle, Adolfo Alsina, Monte Hermoso, 9 de Julio, Puán, 25 de Mayo, Guaminí, Monte, General Lamadrid, Rauch, Florentino Ameghino, Carlos Tejedor, González Chaves y Chascomús, los cuales iniciarían recién el próximo lunes el progresivo regreso de los primeros grupos de estudiantes a las aulas.
“Todas estas decisiones las iremos tomando junto con la autoridad sanitaria provincial y en el marco del diálogo que sostenemos al interior del sistema educativo y con las autoridades municipales, expuso la directora general de Cultura y Educación, Agustina Vila.
