Entre cruces y acusaciones, Crovetto dio explicaciones
En medio de los numerosos reclamos, la secretaria de Educación participó de la reunión de la comisión de Educación en el Concejo Deliberante. En un clima tenso, hubo numerosas críticas y pocas definiciones de la titular de la Secretaría.
Mientras se suman los reclamos de distintos actores de la comunidad educativa municipal, la secretaria de Educación, Ana María Crovetto, participó de la comisión de Educación del Concejo Deliberante y dio explicaciones sobre su gestión. En un clima tenso, hubo cruces y acusaciones por parte de los trabajadores del sistema educativo municipal.
El encuentro comenzó demorado a partir de la presencia de un gran número de referentes de la comunidad educativa local y la no muy buena predisposicion inicial del oficialismo a cambiar el lugar de reunión y trasladar a la comitiva de la sala de comisiones al recinto.
En lo que fue una jornada tensa -con cruces y acusaciones de directivos, docentes y profesionales- Crovetto intentó justificar su accionar y defender su gestión. La reunión arrancó después de las 10 y finalizó pasadas las 13, luego de la exposición de docentes y directivos de las escuelas municipales, además de las intervenciones y críticas de los concejales de la oposición. Más allá del pedido formal de renuncia que minutos después efectuaría la oposición, toda la comunidad del sistema educativo municipal coincidió al afirmar que la funcionaria debe dar un paso al costado.
En lo que hace a las explicaciones de Crovetto, fue poco lo que pudo aclarar. Es que, durante sus intervenciones no logró responder prácticamente ninguna de las preguntas que se le hicieron y, más allá de eso, lo llamativo de la jornada fueron los repetidos cruces que tuvo con los docentes, quienes al margen de reclamar, se mostraron indignados por “las mentiras” de la funcionaria.
LA POLÉMICA POR EL INSTITUTO ALMAFUERTE
Uno de los primeros cuestionamientos por los que respondió la secretaria de Educación fue el relacionado con la utilización de módulos del Instituto Superior Almafuerte para cargos políticos. Al respecto, Crovetto admitió que hubo un error y que apenas se lo detectó -aunque en realidad fue después de los reclamos de los propios alumnos y docentes- fue subsanado y se le restituyeron los mismos a la comunidad educativa.
“Cargos políticos solo tenemos dos en la Secretaría, aunque probablemente haya algunos más”, fue el justificativo de la también educadora, en una frase poco afortunada que despertó burlas en el recinto de sesiones. Y tras su introducción, comenzaron los cruces. Es que la funcionaria relató cómo fue su visita al instituto, pero quien la interrumpió fue la propia titular del establecimiento quien la acusó de mentir, de perseguirla y de no haber asumido el compromiso necesario para con la institución.
A partir de allí, la reunión se desarrolló de manera ininterrumpida con intervenciones de una comunidad educativa que, cansada de exigir diálogo, optó por forzarlo en el marco de este encuentro. En ese sentido, Crovetto no se quedó atrás: se defendió de las acusaciones diciendo tener todos los papeles que acreditaban sus dichos, cuestionó la deserción de los alumnos en el Almafuerte y acusó a la anterior gestión de no haber comprado mobiliario pese al ingreso de una partida presupuestario con ese fin.
“Mi antecesora se llevó todo, no me dejó nada”, fue una de las frases de la secretaria de Educación, quien se mostró indiferente cuando las directoras de nivel inicial, primario y secundario le recriminaron la falta de diálogo y trabajo en equipo. “Tuve tres reuniones, una con cada uno de los estamentos; hubo petitorios en relación a la situación con la que encontré”, justificó, aunque también se excusó al afirmar: “Yo hago gestión, pero hay cuestiones que escapan de mí”.
UNA LISTA DE RECLAMOS Y NINGUNA RESPUESTA
Quienes también estuvieron presentes y plasmaron sus reclamos fueron los trabajadores del Programa Conectar Igualdad y del Programa Educativo Barrial (PEBA). Más allá de la particularidad de cada situación -en el caso del PEBA Crovetto aclaró que las demoras fueron responsabilidad del secretario de Economía, José Cano, quien no firmó las designaciones necesarias- los trabajadores coincidieron en las dificultades a la hora de mantener diálogo con la funcionaria, en la falta de proyección y gestión y en la necesidad urgente de respuestas.
Entre muchos conceptos, los educadores en general coincidieron en la necesidad de “revalorizar la importancia de la educación, el rol de los docentes y el compromiso evidenciado con las comunidades de cada establecimiento”. En ese sentido, fueron numerosas las exposiciones que reflejaron lo que pasa en los barrios: jardines de infantes en riesgo por la inseguridad, problemas de infraestructura, alumnos con jornada reducida, estudiantes sin educación física por falta de espacios, profesionales cumpliendo más de un rol por el mismo dinero, falta de nombramientos, ausencia de contención para los adolescentes e imposibilidad de brindarle un refuerzo alimentario a los más chicos.
