Acampe en Ostramar: elegir entre indemnización o volver a trabajar para terceros
Esa fue la propuesta ofrecida por el frigorífico para destrabar el conflicto. Para los trabajadores no hay garantías de terminar con la precarización.
Diez días de acampe y tres audiencias ante el Ministerio de Trabajo ya pasaron desde que se agudizó el conflicto en torno al frigorífico Ostramar S.A. en la búsqueda de 16 trabajadores de poner fin a décadas de precarización laboral en el procesamiento de merluza y ser reconocidos por la firma de la familia Caputo, ya sea en sus propias instalaciones o lejos de las “cuevas” portuarias.
La protesta continúa a pesar de la última oferta de “los dueños del pescado”: según explicaron quienes llevan adelante la medida en Guanahani al 3100, la firma ofreció que pasen a trabajar para otra planta a la que distribuyen la materia prima, con mejores condiciones laborales, o bien aceptar indemnizaciones.
“Nos quieren tercerizar con uno al que ellos le dan pescado y nos apuran con aceptar eso o indemnización“, lamentaron en diálogo con Qué digital algunos de los 12 trabajadores y 4 trabajadoras que llevan adelante la medida que impide la salida de camiones hasta recibir una respuesta.
Según explicaron, la negativa para ser tercerizados otra vez pero bajo presuntas mejores condiciones laborales pasa porque más allá de las posibles mejoras, no sería garantía de dejar atrás las condiciones de precarización. También, advierten, por antecedentes de juicios laborales que aseguran ya tiene esa planta propuesta.
EL ACAMPE EN OSTRAMAR
Los camiones del frigorífico siguen sin salir por el bloqueo. (Foto: Qué digital)
Después de estar -en algunos casos- más de 20 años trabajando para una cooperativa “trucha”, el 28 de febrero los 16 trabajadores y trabajadoras se levantaron y decidieron iniciar un acampe permanente en las puertas del frigorífico Ostramar, de Guanahani al 3100, con acompañamiento del Sindicato Obrero de la Industria del Pescado (SOIP).
Es que 12 hombres y 4 mujeres (de la planta donde en total se desempeñan unas 27 personas) se cansaron de trabajar sin derechos laborales para una cooperativa denominada Owencoop que en realidad desde hace más de una década aseguran que no tiene ni matrícula pero seguía recibiendo pescado para su procesamiento. Es decir, una más de las cooperativas “truchas” que salen a la luz en el Puerto cuando sus trabajadores deciden exponer las condiciones en las que procesan el pescado que distribuyen los frigoríficos.
Justamente, la de Owencoop y Ostramar en el puerto de Mar del Plata es una historia que se repite: una de las grandes empresas del sector trae la materia prima a tierra y la distribuye en depósitos donde, a través de cooperativas “truchas” -e incluso inexistentes-, trabajadores realizan un procesamiento simple (fileteado, envasado) sin derecho laboral alguno.
Entonces, al momento de reclamar, como en este caso, ni el proveedor ni el empleador a cargo de la cooperativa, se hacen cargo de la situación o bien ofrecen como solución más tercerización del trabajo.
