Acantilados: reclamos de vecinos por la construcción de un barrio privado
Advierten que el emprendimiento inmobiliario “Casonas del Haras” generó modificaciones en el ambiente y provocó inundaciones. Además, denuncian que ocuparon calles. Piden respuestas al Concejo Deliberante.
La Asociación de Fomento del barrio Los Acantilados, a través de su presidente, Alfredo Pérez, pidió al Concejo Deliberante que le exija respuestas al gobierno de Carlos Arroyo por la instalación del barrio privado “Casonas del Haras”, el cual se levantó sobre la avenida Jorge Newbery y, aseguran, sin conciencia del impacto ambiental y ocupando espacio público al interferir en la circulación de dos calles.
Desde hace algún tiempo, quienes recorren la zona sur de la ciudad por la avenida Jorge Newbery observaron cómo se fueron levantando diversos barrios privados a lo largo del trayecto que, más allá de la avenida Mario Bravo, se transforma en la avenida Edison.
Uno de ellos es el “Casonas del Haras”, un emprendimiento privado que está en construcción en un extensísimo terreno que, situado en Jorge Newbery al 3050, se extiende a ambos lados del camino: hacia el mar en gran parte pero también hacia el interior, conectado con otro barrio privado como Haras Santa María del Mar.
Las denuncias de los vecinos tienen que ver con que aseguran que el terreno que ocupa el emprendimiento privado se ubica en una zona topográficamente deprimida, es decir, que suele inundarse cuando llueve por lo que la instalación de casas y la consecuente modificación del terreno -por donde además circula el arroyo Corrientes- ya provocó inundaciones en el resto del barrio. Esto, aseguran, fue analizado y confirmado por un especialista en hidrología del INTA.
Esas denuncias motivaron una primera presentación de la Asociación Vecinal en distintos estamentos, no sólo en el HCD, sino también en distintos organismos estatales bonaerenses competentes en la problemática ambiental en cuestión.
Imagen ilustrativa (Foto: www.casonasdelharas.com)
En consecuencia, antes estas evidencias, afirman que las obras no podrían haber sido autorizadas: “Las respuestas evidenciaron que la obra avanzó – y avanza – sin los permisos y autorizaciones que este tipo de emprendimientos requiere. Respecto a esto es relevante señalar que los permisos son indispensables, pero no suficientes. Como ya referimos, se trata de una zona de inundación natural”, agregaron en la presentación.
En cuanto a las consecuencias de esas obras sobre el espacio público circundante, aseguraron que con las lluvias que se dieorn en marzo se produjeron diferentes inundaciones y, por ejemplo, la calle 22 “se convirtió literalmente en un arroyo”. Pero además, desde la Asociación afirman que el emprendimiento privado cercó y ocupó indebidamente calles del barrio como la calle 22 y la 483, desde calle 22 a la 28.
“Entendemos que el Ejecutivo Municipal no está arbitrando los medios para que se adopten todas las medidas que garanticen las condiciones de sostenibilidad ambiental de la cuenca y el ecosistema de tipo humedal que conforma el predio del emprendimiento, como así tampoco está controlando que la obra se esté llevando a cabo dando cumplimiento a los requerimientos legales”, apuntaron.
En síntesis, los vecinos instaron al Concejo Deliberante a que le exija al gobierno la suspensión de las obras hasta tanto no se corroboren los permisos a partir del análisis del impacto ambiental y se elaboren informes por parte de las direcciones municipales competentes de Obras Públicas, Obras Privadas, Ordenamiento territorial y Gestión Ambiental.
