ARA San Juan: “Dieron la vida por la patria y la patria los abandona”
Jésica Gopar, esposa de uno de los tripulantes del submarino que lleva casi cinco meses desaparecido, cuestionó la ausencia del Estado y habló de un presente entre el dolor, la angustia y las deudas.
A casi cinco meses del último contacto con el submarino ARA “San Juan”, los familiares de los 44 tripulantes continúan transitando un duro momento, no solo por la incertidumbre de saber qué pasó –y por la falta de recursos para la búsqueda– sino por la ausencia del Estado y las dificultades económicas. “Ellos dieron la vida por la patria y la patria, que no es la gente, los abandona”, resumió Jésica Gopar, esposa de Fernando Gabriel Santilli, uno de los submarinistas.
En un video que difundió a través de sus redes sociales, y al recordar que el domingo se cumplen cinco meses de la desaparición del navío, Jésica habló sobre el presente no solo de su familia sino de la gran mayoría de los familiares. “El mes que viene vamos a tener que comenzar los trámites para la presunción de fallecimiento; lamentablemente seguimos estando solas y desamparadas”, graficó.
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En ese sentido, Jésica expuso las dificultades que atraviesan las mujeres de los tripulantes, quienes quedaron “a cargo de todo, de las deudas, de nuestros hijos, de nuestra casa, con nuestras falencias”. “La gente nos ha ayudado mucho, pero el Estado y las fuerzas armadas están ausentes”, se lamentó y criticó duramente a las autoridades por no cumplir con los compromisos asumidos.
Al respecto, recordó que en su momento el Estado se había comprometido -por iniciativa propia- a otorgar becas para los hijos de los tripulantes en edad escolar, pero nada de eso pasó: “Prometieron becas para los chicos que estudian, fueron firmadas en enero y febrero pero no tienen respuestas. Y las mamás que llevan a los chicos al colegio todavía siguen pagando cómo pueden las deudas y sobre todo las cosas que han quedado pendientes, inclusive la educación”.
Con una gran entereza, pero un evidente cansancio en su voz producto del paso de los meses, la mujer de Fernando Gabriel Santilli admitió que “nada es fácil” para quienes hoy luchan por saber la verdad y así habló sobre dificultades económicas, deudas y grandes necesidades. “Nada es fácil para nosotras, nuestros esposos no eran ricos: el seguro de vida parte de $10 mil pesos, no hablamos de millones. La vida de mi esposo Fernando Gabriel vale $10 mil pesos. Estamos en una situación compleja, muchas familias la están pasando muy mal, casi no tienen para comer”, evidenció.
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Finalmente, y tras agradecer las muestras de apoyo, las donaciones y la solidaridad de la comunidad, Jésica pidió ayuda para poder seguir. “Les pido que no nos abandonen; tenemos que llegar a esta instancia porque a cinco meses el Estado y las fuerzas armadas nos han soltado las manos. Parece una frase tan tonta, pero no nos dejen solos porque a ellos los dejaron solos, hoy nadie busca al submarino. Ellos dieron la vida por la patria y la patria, que no es la gente, los abandona”, completó.
