Arroyo, a los alumnos de la Escuela N°58: “No dejen de quejarse”
El intendente recorrió nuevamente las obras de la escuela del barrio El Martillo y les pidió disculpas “por los errores de los mayores” a los alumnos que reclamaban las obras hace dos años.
Por segunda vez, el intendente Carlos Arroyo recorrió junto a funcionarios las obras que se están realizando en la Escuela Secundaria N°58, la cual debió ser clausurada en abril de 2017 por el estado del edificio. En su recorrido, le habló directamente a los alumnos y además de pedirles que “no dejen de quejarse”, les pidió disculpas “por los errores de los mayores”.
Con el argumento de largas gestiones burocráticas, las obras se iniciaron en enero, a 20 meses de la clausura de la escuela, que presentaba una muy delicada situación edilicia desde hace cinco años pero que llegó a un punto límite tras un temporal en abril de 2017. Ahora, en año electoral, el intendente y parte de su gabinete recorrieron por segunda vez las instalaciones.
A lo largo de estos 20 meses, los alumnos cursaron de forma irregular las clases, primero en algunas aulas del Ente Municipal de Deportes, a casi 20 cuadras del establecimiento, luego también acudieron a clases en una capilla y en paralelo cursaban en aulas de la escuela Primaria N°36 que funciona en el edificio lindante con la secundaria.
Ante estas idas y vueltas, en medio del recorrido, el intendente habló directamente a los alumnos y se sinceró: “Antes que nada quiero pedirle disculpas a los alumnos que son víctimas de los errores de los mayores. Lamento que esto no se haya hecho antes, nosotros hemos hecho hasta lo imposible y sé lo difícil que es mantener una escuela, pero es muy importante que colaboren los alumnos, que los padres se acerquen a la escuela y la hagan propia” y concluyó: “Luchen por la escuela, no dejen de quejarse, soliciten y pidan siempre que los funcionarios están para servirles”.
Por su parte, también se conocieron declaraciones del director del establecimiento, Martín Carrocera, quien detalló: “Se hizo un arreglo total del colegio, empezaron con los techos por donde entraba tanta agua que deterioró todo, también las canaletas, el piso del gimnasio de arriba, se arreglaron todos los cielorrasos, se cambió el tendido eléctrico, las luces, todas las paredes, se pintó todo, se hizo una preceptoría que antes no teníamos, arreglaron también las paredes de lo que era la dirección, las fallas que tenían los baños y bueno, fue algo completo”.
