Boston: hay 10 despidos más y no pagarían las indemnizaciones
El conflicto empeoró en las últimas horas. Un apoderado de la empresa comunicó que se presentarán a concurso de acreedores. Ya son 70 los trabajadores echados.
La histórica cadena de confiterías Boston está al borde de la quiebra. Este miércoles en el Ministerio de Trabajo un apoderado de la empresa informó que los dueños se presentarán a convocatoria de acreedores y que en las próximas horas se producirán 10 nuevos despidos, lo que elevará a 70 el número de trabajadores echados.
“La situación empeoró”, resumió Nancy Todoroff, dirigente sindical de Gastronómicos en dialogo con QUÉ Digital, quien contó que un abogado de Buenos Aires que oficia de nuevo apoderado de la empresa le confirmó a al gremio que los dueños se presentarán a concurso de acreedores, lo que entre otras cuestiones “implica que la plata para las indemnizaciones no está” y que cada trabajador “se tendrá que presentar a convocatoria y va a cobrar poco dentro de mucho tiempo”.
Hasta el fin de semana eran 60 los trabajadores que recibieron sus telegramas de despido. En la audiencia de este miércoles, el apoderado de la firma les anunció directamente que en las próximas horas otros 10 empleados de la Boston serán echados con la misma modalidad.
En medio de la tensión y el conflicto, el fin de semana los trabajadores repartieron café y medialunas “a voluntad”: respaldados por los gremios Unión de Trabajadores del Turismo, Hoteleros y Gastronómicos de la República Argentina (Uthgra) y Pasteleros, en total entregaron más de 80 docenas de facturas y las acciones se desarrollaron en el local ubicado en la zona de Varese y en el de Buenos Aires y Belgrano. Además de dialogar con vecinos y turistas, recaudaron fondos en una alcancía y juntaron firmas en apoyo a la lucha de los trabajadores.
“La gente está mal. Es tanta la desesperación que por más que hagamos lo que hagamos, a algunos se le siembran dudas”, admitió la representa de Uthgra, quien reconoció que “no le podemos creer nada a la empresa porque los dueños mienten todo el tiempo” y “actúan con maniobras extrañas y poco claras”.
La mala noticia de que la empresa llame a concurso de acreedores implica una maniobra por parte de la empresa que volverá “realmente muy difícil que se puedan cobrar las indemnizaciones” porque “no hay manera de pelearla”, lamentó Nancy Todoroff.
La incertidumbre crece con el paso de cada días y a pesar de la lucha de los trabajadores, “el panorama es cada vez más complejo”. Dentro del panorama adverso, “lo mejor que podría pasar es que aparezca algún comprador y negociar el tema de que paguen los sueldos y hacer el reclamo de las indemnizaciones y tome a la mayor cantidad de trabajadores”, explicó la dirigente sindical aunque también admitió: “Eso último va a ser difícil porque algunos tiene 25 o 30 años de antigüedad “.
