Brandon Romero: a dos años del homicidio, su familia espera por el juicio
Este martes se realizará una concentración en Tribunales, la primera de las actividades programadas para esta semana. El juicio contra el policía Bogado será en mayo.
“Cuenten la que cuenten, el Estado no te puede matar”, fue la última frase que cantó este sábado en Mar del Plata Patricio Santos Fontanet antes de levantar una bandera con la leyenda “Basta de gatillo fácil”, y los rostros de Luciano Olivera y Brandon Romero. Lo hizo a pocos días de este 5 de julio en el que se cumplen dos años del homicidio del joven panadero perpetrado por el policía Pedro Arcángel Bogado, que será juzgado en mayo de 2023.
La bandera se la acercaron integrantes de la Campaña Brandon Romero, que forma parte de las distintas expresiones de movilización popular que se gestaron desde entonces. A través de ella, allegados y familiares esperan potenciar una lucha que alcance repercusión suficiente para que, de cara al juicio que se llevará adelante en mayo de 2023, su asesinato por parte de un efectivo policial no quede impune.
En suma, se cumplen dos años de visibilización de un caso que, como tantos otros, espera por parte de la Justicia como también de los responsables políticos de las fuerzas represivas y las condiciones socioeconómicas de desigualdad, un cambio de paradigma.
Frente a ello se hace para familiares, allegados y organizaciones se hace necesario poner el cuerpo y como parte de las actividades por los dos años, este martes se reunirán en un acto desde las 11 en Tribunales. Además, el viernes desde las 17 habrá un conversatorio en el Aula Magna del Complejo de la Universidad Nacional de Mar del Plata y el sábado desde las 12, una concentración en el Centro de Operaciones y Monitoreo (COM), donde además se llevará adelante un festival.
“Se cumplen dos años del caso de gatillo fácil que conmocionó la ciudad de Mar del Plata en plena cuarentena. El fusilamiento que fue comprobado luego de distintas pericias de investigación, no representa un caso aislado, sino que es parte de una política represiva y de criminalización de la juventud trabajadora, comandada por el ministro de Seguridad, Sergio Berni y reproducida por todos los gobiernos, perpetuada en el tiempo”, difundieron al respecto en las últimas horas en torno a la concentración que se realizará este martes.
EL HECHO
Según la reconstrucción de los hechos realizada por el particular damnificado ante el juez de Garantías, Saúl Errandonea, el 5 de julio de 2020 Romero había participado de una “juntada” luego de la cual, se fue a bordo de dos motos con otros cuatro jóvenes. La primera de las motos -en la que iba Romero- pasó alrededor de las 6.30 por la rotonda de Tarantino y Ruta 226. Segundos después, la que los secundaba.
En esa intersección, la segunda moto habría tenido un “encontronazo” con la de Bogado: según el policía, le intentaron robar la moto; según pudo saber la familia en base a testimonios de los motociclistas, estuvieron a punto de chocar y discutieron de manera encendida al punto de intimidarlo con un arma.
No obstante, Bogado se fue del lugar pero no abandonó la ruta: metros más adelante -en el kilómetro 6- estacionó y esperó agazapado con el arma reglamentaria desenfundada. Según la reconstrucción del abogado de la familia, César Sivo, seis minutos después del encontronazo con la segunda moto, la que ocupaba Romero volvió en dirección a la rotonda de Tarantino y en el camino se encontró con el policía y su moto a un costado del camino: al ver la moto sola Romero se bajó de la moto en la que viajaba y allí fue sorprendido de Bogado que, a pesar de que estaba desarmado, disparó contra el joven panadero.
De acuerdo la acusación, al momento del hecho el policía vació su cargador compuesto de entre 11 y 13 balas y siete de ellas dieron en el cuerpo del joven, quien quedó tendido sobre el asfalto, fue arrollado por al menos dos autos y murió. En el lugar, según lo expuesto, sólo se hallaron vainas del arma reglamentaria del efectivo, pero no se pudo contar con un testimonio clave como el del joven que manejaba la moto en la que iba Romero: el fiscal lo imputó por robo.
EL JUICIO
Desde el primer día, la familia de Brandon Romero sostiene que se trató de un caso de gatillo fácil, remarca que no tenía antecedentes penales -a diferencia de lo que fue informado oficialmente ese día- y recalca que el joven panadero que esa noche se había retirado de una “juntada” a bordo de una moto, fue fusilado por el policía. Mientras tanto, la causa judicial avanzó durante la instrucción a cargo del fiscal Alejandro Pellegrinelli en torno a una “legítima defensa” en el marco del intento de robo, y solicitó un sobreseimiento.
A fines de agosto, la Cámara de Apelación y Garantías de Mar del Plata confirmó la elevación a juicio -que será bajo la modalidad por jurados ante la elección del acusado- y el rechazo al sobreseimiento del policía Pedro Bogado, tal como había dispuesto previamente el juez de Garantías Saúl Errandonea, en contra de la postura del Ministerio Público Fiscal que había desistido de acusar al efectivo.
En ese marco y como parte de la larga espera por un juicio a partir del cual la familia espera que se termine de calificar lo sucedido como un caso de gatillo fácil y se condene al policía por homicidio agravado, el juez del Tribunal Oral en lo Criminal N°1, Facundo Gómez Urso, hizo lugar a un pedido de la defensa de la familia del joven para que el policía se presente cada 15 días en Tribunales para ratificar su domicilio, teniendo en cuenta que espera el juicio en libertad a pesar de la grave imputación que rige en su contra.
En esta modalidad de juicio por jurados, donde además no habrá representación y acusación por parte del Ministerio Público Fiscal, el veredicto de culpabilidad requerirá en el jurado un mínimo de 10 de los 12 votos afirmativos sobre la existencia del hecho en que se sustenta la acusación y la participación del imputado.
