Denuncian a un vecino de Cerrito Sur por abusar de cinco chicas
Se trata de Juan Ángel Campanella, esposo de la tía de las denunciantes, y hay cinco denuncias penales por lo sucedido años atrás, cuando las jóvenes eran menores de edad.
Un grupo de mujeres de Mar del Plata denunció públicamente lo sucedido años atrás en el barrio Cerrito Sur, en el marco de la radicación de cinco denuncias penales por abuso sexual en relación a Juan Ángel Campanella, un vecino de la zona quien, según expusieron, abusó de ellas cuando eran menores de edad.
Acompañadas por familiares y referentes de la organización Votamos Luchar –que decidió acompañar a las jóvenes en la denuncia pública, en busca de reparación y justicia ante la ausencia de respuestas estatales- las víctimas narraron cómo este hombre, que vive a tan solo seis cuadras de ellas y era monaguillo, las violentó mientras aún eran niñas.
“Ante la justicia burguesa que no da respuesta, ante el Estado capitalista que es cómplice y responsable de la opresión de las mujeres, nuestro camino es construir poder popular en manos de la clase trabajadora y forjar la autodefensa popular”, destacaron desde el Votamos Luchar.
Y en ese sentido, expusieron que las denuncias penales -con el patrocinio del abogado Manuel Fernández- son cinco por el momento, aunque saben que “son más de quince los casos” en los que Campanella habría abusado de mujeres y niñas durante los últimos años.
“Nosotros las felicitamos por la fuerza que están teniendo y el mensaje que se animan a dar para que otras personas sepan que la culpa, la vergüenza, la tiene que sentir el agresor: Juan Ángel Campanella merece todo nuestro repudio como sociedad y esperamos que con la presión social y que en la Justicia también se llegue a un fallo justo”, sumaron.
En cuanto a los testimonios, dos de las jóvenes -entre las denunciantes hay hermanas y primas- relataron durante una conferencia de prensa en el centro cultural El Séptimo Fuego que tenían 9 años cuando fueron abusadas en la casa de su tía y dijeron que conocen casos en los que las víctimas fueron sometidas por este hombre en repetidas ocasiones, “sobre todo una de las chicas que tenía 3 años”.
“Hay casos que fueron hace cuatro o cinco años también. Acá también hay una chica presente que es menor de edad, que sufrió el abuso hace cuatro años”, apuntaron y dijeron que hoy, finalmente, pueden hablar “en el contexto en el que estamos, en el que no nos sentimos solas”.
“Este tipo sigue su vida normal y no solo es un pedófilo sino que a gente grande le hizo lo mismo y sabemos que hay muchísimos casos. Sabemos de 15 casos que conocemos, el caso más reciente es del año pasado, de una trabajadora. Así que la que pueda hablar, que lo haga”, pidieron en relación a la aparición de testimonios contra este hombre.
En ese sentido, recordaron que Campanella fue monaguillo en una iglesia y que conoció a su mujer –la tía de las jóvenes- mientras ella era monja en la Gruta de Lourdes: “Nosotros teníamos vínculo con nuestra tía e íbamos siempre a pasar las fiestas, íbamos siempre después del colegio: todos los hechos pasaron en su casa”.
Tras asegurar que algunos de los casos que pudieron conocer ocurrieron hace muy poco -el último el año pasado, con una chica que trabajaba en la misma zona que el denunciado-, las jóvenes contaron que luego de radicar la denuncia en la comisaría de la mujer decidieron hacer una publicación en Facebook y eso sumó más testimonios.
“Cuando hicimos la denuncia en su momento, como no había acceso carnal no nos dieron mucha bolilla. Decían que no podían hacer nada y este año tuvimos que pedir una restricción luego de la publicación que hicimos en Facebook, porque tuvimos un poco de miedo”, relataron respecto a las repercusiones de su denuncia pública.
Finalmente, las jóvenes denunciantes le hablaron a otras víctimas de abuso y las alentaron a denunciar. “Es muy liberador contar y hablarlo. No estamos solas”, destacaron y aseguraron que pese a que saben que los tiempos de las justicia son lentos, ellas esperan “continuar con la condena social y que toda la ciudad sepa”.
