Luego del período de prueba y calibración, finalmente este lunes comenzó a implementarse el control de las velocidades máximas a través de dos radares móviles. Los equipamientos se distribuirán en distintos puntos de la ciudad, y las multas serán remitidas a los domicilios de los conductores infraccionados.
Los dispositivos, que comenzaron a funcionar durante la mañana de este lunes, se instalarán en los accesos a la ciudad, avenidas y calles con altos flujos vehicular y peatonal
Ante los controles, se instalará la correspondiente señalización a 200 metros de distancia para advertir al conductor.
“Este equipamiento nos permite detectar la infracción, emitir el acta pertinente y remitirla al domicilio del infractor para que después se presente en el Juzgado de Faltas a fin de regularizar su situación”, explicó el subsecretario de Control, Adrián Alveolite.
Además detalló que las multas equivalen a 300 unidades fijas y cada una equivale a un litro de nafta Premium, con lo que el valor se actualiza permanentemente.
En cuanto a la incorporación de nuevos radares, comentó que se está terminando de confeccionar el nuevo pliego. “En los próximos días estaremos haciendo el llamado a licitación pública para que las empresas puedan presentarse a fin de proveer el equipamiento, instalación y mantenimiento de nuevas tecnologías apostadas a la seguridad vial”, dijo.