Cuáles son los otros “Rancho Móvil” del sur de la ciudad
Los avances y abusos de los privados sobre el espacio público son recurrentes lejos del centro, donde el Estado no llega para controlar, demora en hacerlo o incluso no ejecuta medidas judiciales.
El gimnasio de Playa Grande no llegó ni a terminarse porque, al ver que cada vez más organismos le pedían al Estado que revisara esa construcción ilegal, su dueño decidió desmontarlo. En la zona sur, el respeto a las normas estatales en torno a los espacios públicos costeros es todavía menor y los controles gubernamentales brillan por su ausencia, mientras las resoluciones judiciales y administrativas demoran en ejecutarse, tal como quedó demostrado días atrás en el acantilado donde se ubicó el Rancho Móvil.
El Rancho Móvil, además de una importante victoria para los vecinos que luchan para proteger los espacios públicos cumpliendo roles que en muchos casos competen a inspectores y funcionarios municipales, representa un importante precedente para muchos de los abusos que se cometen, sobre todo en las playas del sur.
Cuáles son algunos de los casos en los que privados avanzan sin freno alguno sobre el espacio público, incumpliendo no sólo con las ordenanzas vigentes sino también ignorando resoluciones judiciales de por medio.
BALNEARIO ABRACADABRA
Uno de los casos más emblemáticos de los últimos tiempos sin dudas es el del balneario Abracadabra, donde se construyó una estructura con hormigón sobre la arena y, pese a existir una orden de demolición dictada por el Juzgado de Faltas N°1 desde marzo de 2018, la Municipalidad no la ejecuta y la estructura sigueallí.
Desde la Asamblea por los Espacios Públicos, organismo que lleva adelante muchas de estas denuncias, detallaron: “En Abracadabra hicieron una construcción de cemento revestida con madera sobre la arena y eso no se puede, es ilegal. Ya tenemos una resolución de un tribunal de faltas para la demolición desde octubre del año pasado. Es un juez de faltas el que está ordenando la demolición de la estructura, perteneciente Playas del Faro S.A.”.
Según indicaron, es una estructura utilizada para actividades gastronómicas que llega a ser alcanzada por la marea cuando ésta sube: “Es de cemento en lugar de ser movible, como todas las construcciones que se hacen sobre la playa. Nosotros los enganchamos en invierno cuando estaban haciendo la construcción y revistiendo de madera pero ahí está y sigue en pie”.
CASAS EN LA RESERVA FORESTAL
Como el Rancho Móvil pero en la zona del barrio Alfar. Desde la Asamblea advierten que en el secror comprendidos entre las playas del Faro y Verde Mundo hay al menos tres casas de familia entre los árboles. “Una pertenece al dueño de una conocida libreria. Es una casa que tiene un escalera y salida directa a la playa”, agregaron.
DEFORESTACIÓN Y ESTACIONAMIENTO VIP EN BALNEARIO CONTAINER
Lindero a Verde Mundo se encuentra el “Balneario Container”, donde los vecinos denunciaron que también sus dueños deforestaron parte de la Reserva Forestal y, encima, armaron un estacionamiento para sus clientes en la Reserva.
“No sólo deforestó. Ahora, los días de semana deja estacionar autos en la Reserva Forestal, en una zona donde ya le ordenaron la reforestación y la prohibición para estacionar. Lo permiten los días de semana, porque la asamblea de Verde Mundo funciona los domingos y saben que ellos van, les sacan fotos y los escrachan. Esta es la última denuncia que hicimos”, señalaron desde la Asamblea.
DEFORESTACIÓN EN HORIZONTE
Los vecinos detallaron que hace dos años el concesionario deforestó 600 metros cuadrados en plena Reserva Forestal Paseo Costanero Sur. “Acá también hay resoluciones. Se ordenó la reforestación y no pasó nada. Cambiaron los dueños y, como Playas del Faro alquila su territorio, se pasan la pelota”, manifestaron.
EL ASCENSOR DE ACANTILADOS
El ascensor de Acantilados durante una recorrida de la Comisión de Turismo del HCD. (Foto: Gentileza Asamblea por los Espacios Públicos)
El “ascensor” del barrio Los Acantilados es una estructura instalada sobre el barranco que fue abandonada hace décadas por Playas del Faro y que hoy en día forma parte de las playas públicas que fueron recuperadas por los vecinos. Además de representar un riesgo ante un posible desprendimiento, los vecinos denuncian que allí, entre otras cosas, venden drogas.
“Es un caso en el que estamos pidiendo hace un montón y que ya fue presentado por la concejala Claudia Rodríguez en el HCD. Recuperamos la playa pero tenemos un ascensor que dejó un privado con usurpadores adentro y que es un antro. Ahí venden droga, hacen fiestas, lo ocupan. Y encima es un peligro porque en cualquier momento se le cae en la cabeza a cualquiera que pase por la playa. Lleva 20 años o más abandonado. Tiene que ser demolido. Los lugareños sabemos y tomamos recaudos, pero no todos lo saben”, concluyeron.
