Derechos LGBTIQ: “Estamos en una época de retroceso notorio”
Lo afirmó el presidente de la Amadi, Javier Moreno Iglesias, en el marco de la masiva Marcha por del Orgullo LGBTIQ. “Vemos cómo opera la política aliada a sectores religiosos anti derechos”, dijo sobre la consigna “Estado Laico ya”.
En el marco de la masiva Marcha por el Orgullo LGBTIQ que se desarrolló este sábado en Mar del Plata, el presidente de la Asociación Marplatense de Derechos por la Igualdad (Amadi), Javier Moreno Iglesias, celebró primero los derechos adquiridos a lo largo de los últimos años en materia de igualdad de género, pero al mismo tiempo advirtió “la intromisión de sectores religiosos antiderechos” en la política y el momento de “notorio retroceso” que se vive en Argentina.
La marcha de este sábado en las calles de Mar del Plata reunió a miles de personas que salieron a celebrar y reivindicar la diversidad. La fiesta en la que se transformó el centro entre la música y la colorida movilización también tuvo lugar para reflexiones sobre el presente del colectivo LGBTIQ en la ciudad y en Argentina.
La consigna elegida para este año fue “Estado laico ya: políticas públicas sin políticas religiosas”, que según los organizadores resume una de las luchas que enfrentan actualmente las organizaciones que defienden los derechos de este colectivo.
“Queremos manifestar el repudio absoluto a cómo se inmiscuyen a los discursos religiosos y operan políticamente en nuestros legisladores y en lo que tienen que ver con legislaciones que otorgan derechos”, dijo a QUÉ Digital Moreno Iglesias, representante de Amadi.
Al ahondar en la consigna, expuso que quienes están dentro de este colectivo y deben luchar todos los días por el reconocimiento de sus derechos como iguales más allá de cualquier diferencia de género ven “claramente cómo está operando la política aliada a sectores religiosos anti derechos” que “son los que oprimen” y “quieren restar derechos a la diversidad”.
Esa consigna envuelve también un conjunto de luchas históricas de quienes deben enfrentar la adversidad que en la sociedad implica no ser heterosexual, con una diversidad que ganó derechos en los últimos años pero en la que también la expectativa de vida de una persona trans sigue siendo de entre 35 y 45 años, y se registra la muerte de una chica trans cada 10 días en Argentina.
“Siguen muriendo chicas trans asesinadas terriblemente, las estadísticas son alarmantes”, señaló el presidente de Amadi y también remarcó que persisten las dificultades para encontrar un empleo, como así también la falta de entrega de medicamentos para el VIH, el peligro del trabajo sexual y el incumplimiento del cupo laboral trans aprobado por ley y, en Mar del Plata, ratificado por ordenanza pero sin aplicarse.
“El cupo laboral trans ya debería haber sido implementado. Se aprobó por ley y en Mar del Plata se acompañó con una ordenanza, pero no entra ninguna persona trans a trabajar en el Municipio”, siguió.
Por otro lado, como ocurre cada año, en la Marcha del Orgullo LGBTIQ “siempre hay motivos para festejar” y de ahí surge el color, la música y la alegría que se compartió este sábado durante casi toda la tarde en el monumento de Luro y Mitre y luego a lo largo de distintas calles de la costa y el centro comercial durante la multitudinaria marcha.
“Este año lo cerramos con estos reclamos y necesidades urgentes, pero también celebramos la inauguración de la cátedra Diana Sacayan en la Facultad de Psicología”, dijo el presidente de Amadi en relación al reciente homenaje a la activista trans asesinada.
“Celebramos también -siguió- la primera sentencia que reconoce la figura de travesticidio” y además, “la sentencia al grupo neonazi por primera vez en Argentina”, en la que meses atrás la Justicia Federal confirmó la existencia de una organización “con una ideología totalitaria, violenta y racista” y condenó a siete de los acusados a penas de entre 4 y 9 años de prisión. Algunas de las víctimas, no casualmente, pertenecían al colectivo LGBTIQ que este sábado volvió a salir a la calle a festejar pero también a reclamar por la defensa de sus derechos.
