Despidos y conflicto en Textilana: “El Ministerio de Trabajo no interviene”
Desde la comisión interna reclamaron la intervención del organismo estatal. Acusaron que el último despido se produjo con un “procedimiento totalmente trucho”.
Tras un nuevos despido concretado en el inicio de la semana y después de haber denunciados que medidas del mismo tipo alcanzaron a unas 50 trabajadoras en el último año, la empresa Textilana de Mar del Plata se mantiene atravesada por un nuevo y repetido conflicto, y desde la comisión interna acusaron al Ministerio de Trabajo de no tomar intervención. “Deja pasar esta situación colaborando con el incremento de la superexplotación en la planta y los despidos”, apuntaron.
Después de un 2021 atravesado por denuncias de maltrato laboral, reclamos en las puertas de los locales de “Mauro Sergio” y audiencias sin mayores avances en el Ministerio de Trabajo, la semana se inició en la fábrica ubicada sobre la Ruta 88 y calle 47 con el despido de una trabajadora que hacía 14 años se despeñaba para la planta.
Desde la comisión interna explicaron que la falta de respuestas que encontró la trabajadora tanto el jueves como este lunes cuando no la dejaron entrar a la planta, la empresa finalmente envió la carta documento de la mujer en la que adujeron que se trataba de un despido con causa por “comportamientos agresivos y violentos”.
“En los días se produjeron nuevos despidos por parte de la empresa con un procedimiento totalmente trucho, la compañera que fue despedida se enteró de su situación en las puertas de la planta antes de ingresar a trabajar. Luego en la carta documento que se le envió la patronal (totalmente tarde) se expresaron causas de despido en la que el único testimonio que tienen para probar es un gerente de producción y el propio dueño“, denunciaron desde la comisión interna encabezada por María Demateis.
De esta manera, y tal como ha ocurrido con diversos despidos ocurridos en los últimos años, desde el espacio de representación de las y los trabajadores cuestionaron que se trata de una “arbitrariedad total y una impostura enorme ya que la empresa tiene cientos de casos de denuncia por acoso y abuso laboral por las cuales hay expedientes y testimonios en el Ministerio de Trabajo de la Provincia”.
Puntualmente sobre el último despido, Demateis remarcó que “se le inventó una causa para no pagarle nada a la hora de despedirla”.
En ese contexto, y mientras el conflicto sigue latente en la fábrica, desde la comisión interna apuntaron también contra el rol que cumple el Ministerio de Trabajo. “Venimos denunciando todos los descuentos y despidos arbitrarios a compañeras que tenían licencia psiquiátrica, los maltratos y acosos laborales y sin embargo el Ministerio de Trabajo no interviene y deja pasar esta situación colaborando con el incremento de la superexplotación en la planta y los despidos”, acusaron.
El año pasado, aunque las situaciones denunciadas acumulan muchos años, trabajadoras de la fábrica decidieron empezar a romper el silencio -pese al temor impuesto por conservar sus fuentes laborales- para denunciar prácticas de maltrato laboral. Esa situación derivó en audiencias en el Ministerio de Trabajo con negociaciones que, cuando en algunos casos parecían encaminarse, volvieron a fracasar por la postura intransigente de la firma y registraron mayores avances.
