Docentes privados, en alerta por presiones e incertidumbre en medio de la cuarentena
Desde Sadop cuestionaron el pago parcial de salarios en algunas instituciones. Y plantearon que “pocas” escuelas generaron campos virtuales o plataformas digitales.
Bajo un pedido de que los empleadores estén “a la altura de las circunstancias” luego de denunciar situaciones presiones, malos tratos y incertidumbre laboral a partir de cobro parcial de los salarios o amenazadas de pérdidas de puestos de trabajo, los docentes privados bonaerenses nucleados en el gremio Sadop manifestaron su preocupación en medio de la cuarentena por el coronavirus que dio lugar al desarrollo de un plan de continuidad pedagógica.
A través de un comunicado del Consejo Directivo Provincial, desde la seccional Mar del Plata de Sadop expresaron su “preocupación por la actividad en tiempos excepcionales” en el ámbito de la educación privada.
Desde el gremio advirtieron que las y los trabajadores de las escuelas de gestión privada comienzan “a vivir tiempos de zozobra, de presiones, de malos tratos y de incertidumbres laborales“.
En primer término, el sindicato lamentó que en el marco de la continuidad de las trayectorias educativas para que las y los estudiantes puedan seguir con el proceso educativo desde sus hogares “son pocas las escuelas –hay que decir que existen– que han generado campos virtuales o plataformas digitales donde las y los trabajadores puedan desarrollar sus tareas”.
“Muy por el contrario, se ha recurrido en casi la totalidad de los casos a elementos personales de las y los docentes, como su teléfono o computadora, en caso de que dispongan de ella”, sumaron y expusieron que ello “ha llevado a que información privada, como es el número de teléfono, haya sido puesto a disposición de la comunidad entera”.
LICENCIAS Y COBRO DE SALARIOS
Por otro lado, desde Sadop mostraron su alerta por la situación que atraviesan las y los docentes que están cumpliendo con suplencias o quienes tienen que renovar licencias por enfermedad. “Lamentamos que los inescrupulosos de siempre pretendan ahorrar un salario dejando sin tareas a docentes suplentes, o negando la reincorporación a docentes titulares, o solicitando documentación imposible de obtener en esta situación”, plantearon.
Asimismo, señalaron situaciones detectadas en torno al no cobro del salario o el cobro parcial y señalaron que en especial, en algunos niveles como el inicial, aparecieron “amenazas de pérdida de las fuentes de trabajo”.
“El 7 de abril venció el plazo legal para el cobro de los salarios del mes de marzo, y lamentablemente a medida que pasaron las horas, más y más escuelas de gestión privada de la Provincia de Buenos Aires informaban a sus docentes que no iban a cobrar o que iban a cobrar parcialmente, ya sea un porcentaje del salario o sin el aumento obtenido en el acuerdo paritario”, apuntaron.
Y así remarcaron: “Si bien es cierto que hay un atraso en el pago de las cuotas por parte de las familias, durante los primeros 15 días de marzo hubo actividad normalmente, con lo cual se entiende que el ingreso por cuotas debió ser casi el habitual recordando que la gran mayoría de las cuotas vencen el día 10 de cada mes”.
Pero además sostuvieron que el pago del salario de las y los trabajadores “en nada debe depender del pago de las cuotas por parte de las familias, ni mucho menos por el aporte estatal en aquellas escuelas que lo reciben, el cual no las exime de su relación exclusiva de empleo privado con las y los docentes”.
