Escuela Nº 52: sentada en reclamo de bancos y sillas para estudiar
Los estudiantes del nivel secundario decidieron salir a la calle para exponer la situación que atraviesan: cursan en seis aulas, en el edificio de la primaria, y el Consejo Escolar no les da respuestas. “Cada año nos reducen más”, advirtieron.
Cansados de esperar respuestas y soluciones para poder estudiar en un espacio digno, los alumnos y alumnas de la Escuela Secundaria Nº 52, ubicada en Moreno y San Juan, decidieron este martes salir a la calle y realizar una sentada para visibilizar la situación ¿Qué reclaman? Algo tan básico como sillas y bancos para poder cursar dignamente.
Ante la falta de respuestas del Consejo Escolar y del Municipio, los jóvenes estudiantes -en total son 300- salieron a la calle y llevar consigo los escasos bancos y sillas con los que cuentan. Así, buscan destrabar el conflicto y que el Estado, finalmente, se digne a otorgarles el mobiliario necesario para poder estudiar.
“Organizamos está sentada porque desde febrero pedimos bancos y sillas y la respuesta del Consejo Escolar es que el intendente no quiere pagar el flete, que la Municipalidad no quiere pagar. Mandamos cartas, recurrimos a diferentes medidas de reclamo, pero como nadie nos respondió decidimos hacer esto”, explicaron.
En ese sentido, los alumnos y alumnas contaron cómo transitan sus días en la escuela: sin una biblioteca ni un espacio donde hacer educación física, divididos en seis aulas en un sector reducido, sin un espacio propio para las orientaciones de Teatro y Comunicación: “Estamos en un edificio prestado, porque es de la Escuela Primaria Nº 61. Cada año nos reducen más”
Al respecto, los alumnos que decidieron salir a la calle luego de que los directivos del establecimiento agotaran las vías de reclamo formales cuestionaron el desinterés del Estado en relación a su situación. “Con lo poco que tenemos intentamos acomodarnos, mucho de lo que hacemos sale de los bolsillos de nuestros padres, de la cooperadora: juntamos plata nosotros para agrandar la Dirección”, admitieron.
Finalmente, y por fuera de la falta de mobiliario, los estudiantes denunciaron serios problemas de infraestructura, algo que queda a la vista cada vez que llueve. “Tenemos problemas de infraestructura, filtraciones cuando llueve. El director hizo todos los pedidos, los hizo en diciembre y en febrero, pero nadie contesta. Estamos esperando las mesas y las sillas”, completaron.
