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Farmacoop, la cooperativa que produce test rápidos para detectar covid-19 en el país

La Anmat aprobó la semana pasada la producción a cargo de la cooperativa de Capital Federal en la que participan dos marplatenses.

La semana pasada, el gobierno nacional anunció que la Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica (Anmat) aprobó el primer test rápido serológico creado por científicos del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (Conicet) y es el primero producido en el país. La producción está a cargo de Farmacoop Limitada, una cooperativa que se conformó en Capital Federal con los trabajadores y trabajadoras despedidos del laboratorio Roux Ocefa. Con este test se puede saber en cinco minutos, con solo una gota de sangre, si una persona está o estuvo infectada con coronavirus. Una herramienta que este año, además de la vacunación, será fundamental para controlar la propagación del virus.

Bruno y Franco Di Mauro son dos hermanos marplatenses que, junto a 50 compañeros y compañeras, hace dos años sentaron un precedente: recuperaron un laboratorio referente en el mercado y proyectan que vuelva a serlo a base de trabajo.

 “Queremos demostrar que una cooperativa, una empresa recuperada, puede tranquilamente ofrecer los mismos estándares de calidad que una multinacional o una empresa privada. Con los test serológicos lo estamos demostrando, es el primero que se hace en Argentina”, afirmó en diálogo con Qué digital Franco Di Mauro, ingeniero industrial de la Universidad Nacional de Mar del Plata.

El recorrido no fue simple ni sencillo y como en otros sectores la pandemia modificó la planificación de la cooperativa. “A fines de marzo estábamos en instancias de negociaciones con la Anmat para la habilitación de la planta farmacéutica que es de lo que el laboratorio originalmente se ocupaba. Surgió la pandemia, se complicó todo y Anmat no hacía inspecciones y se fueron trabando nuestras posibilidades”, sostuvo.

En ese marco, se pudieron reunir con el viceministro de Salud de la provincia de Buenos Aires, Nicolás Kreplak, en un encuentro en el que le contaron la historia del laboratorio y el funcionario les propuso producir alcohol en gel para la Provincia. “Eso nos incentivó a preparar la planta que tenemos en Villa Lugano. La acondicionamos y nos pusimos a producir”, detalló y explicó que finalmente el convenio con el gobierno bonaerense no se concretó pero fue el primer impulso para salir al mercado.

“Además realizamos convenios con cooperativas de la zona para la producción de barbijos. Se encargaban de cortarlos y cocerlos y nosotros los acondicionábamos para la venta, lo cual generó un círculo virtuoso para las cooperativas también”, expuso Di Mauro.

En concreto, el proyecto de los test serológicos en Farmacoop surgió por abril del 2020 en el marco de un trabajo conjunto entre investigadores de la Universidad de La Plata, el Conicet y Bamboo, una empresa de base tecnológica que tenía un desarrollo para hacer los test rápidos de detección de anticuerpos. “Ellos venían trabajando con una empresa nacional de capitales nacionales que viene del agro, y mostró interés en escalar los proyectos científicos que generalmente quedan guardados en cajones y nunca se escala su producción”, apuntó Di Mauro.

En ese momento la cooperativa ya se estaba encargando de producir alcohol en gel, barbijos y alcohol líquido por lo cual habían tomado cierta notoriedad. “Nos contactaron para saber si queríamos ser parte de este proyecto y obviamente dijimos que sí porque nos pareció muy interesante. Para eso tuvimos que acondicionar un área productiva que teníamos acá en el laboratorio”, compartió.

A partir de ahí, y más allá del aspecto productivo, comenzaron también los trámites regulatorios con la Anmat “para contar con la aprobación”, de acuerdo a lo señaló el trabajador sobre el proceso detrás de la aprobación que se dio a conocer esta semana. Ahora es oficial y Farmacoop cuenta con la aprobación final del registro del producto para poder comercializar este test.

UN TEST RÁPIDO DE DETECCIÓN A NIVEL LOCAL

Por primera vez, un producto médico desarrollado por el Conicet, a través de su gerencia de Vinculación Tecnológica, licenció una tecnología médica que a partir de ahora es producida y comercializada por la cooperativa Farmacoop Limitada.

“El test específicamente lo que hace es detectar los anticuerpos. Si tenés los anticuerpos generados en el organismo significa que tenés o estuviste infectado con covid”, expresó Di Mauro. Y en esta misma línea agregó: “El anticuerpo que se genera en el organismo se llama Igg, lo cual es detectado por nuestro test”.

Por lo tanto, una persona puede saber si tuvo o tiene coronavirus. “El anticuerpo permanece en el organismo alrededor de dos o tres meses y aparece a los siete días de la infección; es por eso que también se recomienda si a una persona le da positivo nuestro test, complementar con una PCR porque todavía puede estar en el período ventana en el cual puede contagiar”, recomendó.

Di Mauro reconoce que la productividad en seis meses puede ser mayor. Actualmente la maquinaria tiene una capacidad de producir 50.000 test mensuales “pero queremos apuntar a unos 500.000, crecer diez veces la producción actual”, afirmó.

Es por eso que en el transcurso de este tiempo irán capacitando y acondicionando al personal para cumplir con las proyecciones en un año en el que, por lo que prevén, los test rápidos serán necesarios para prevenir aun más la propagación del virus.

UNA COOPERATIVA QUE COMIENZA A ESTABLECERSE

El marplatense Bruno Di Mauro es el presidente de Farmacoop Limitada y su hermano mayor definió que fue él quien “traccionó toda la recuperación del laboratorio una vez que quebró Roux Ocefa” para que finalmente el mismo sea recuperado por las y los trabajadores.

El laboratorio cuenta con dos plantas en Capital Federal. La parte productiva se encuentra en Villa Lugano, mientras que en Villa Luro está la parte administrativa y el laboratorio donde se realizan los controles de calidad. Hoy en día la cooperativa le da trabajo a 50 trabajadores y trabajadoras y, a su vez, hay personal que sigue cumpliendo con el aislamiento ya que pertenece a grupos de riesgo, pero de todas formas sigue cobrando su salario.

Además, dentro del laboratorio funciona un centro cultural y un bachillerato popular, aunque por la pandemia su funcionamiento se vio un afectado. “Las dos plantas son muy grandes y por lo tanto recibimos toda propuesta que realice un aporte a la sociedad”, reconoció Di Mauro.

Roux Ocefa fue un laboratorio que fundó Julián Augusto Roux en 1935. Se posicionó como una compañía farmacéutica de excelencia que fabricaba y comercializaba más de 100 productos con una planta estable de 500 trabajadores y trabajadoras. En 2016, la empresa entró en concurso de acreedores, en un proceso que incluyó suspensiones y despidos.

Ante la crítica situación, las y los trabajadores propusieron conformar una cooperativa pero el sindicato con intervención en el sector propuso un comprador, que se hizo cargo del laboratorio pero rápidamente fracasó. Así que la empresa fue adjudicada a un nuevo directorio que profundizó la crisis. “El último directorio empezó a vaciar la empresa, no estaban pagando los sueldos y hasta se robaron maquinarias”, ejemplificó Di Mauro.

“A partir de ver que no había soluciones por parte del sindicato ni de la gestión fue que un grupo de trabajadores decidieron ocupar la fábrica”, recordó Di Mauro y destacó que entre esos trabajadores se encontraba su hermano Bruno, quien ahora preside la cooperativa.

En octubre del 2018, las y los trabajadores iniciaron una toma pacífica de las plantas y después de mucha lucha y sacrificio el juez le brindó el “proceso de continuidad a la cooperativa”. Así, se convirtieron en el primer laboratorio recuperado a nivel mundial.

En los últimos dos años a nivel jurídico, Di Mauro explicó que finalmente le dieron el “proceso de continuidad a la cooperativa para que pueda explotar los productos y los establecimientos de Roux Ocefa” .

En base a los ingresos y las inversiones vamos mejorando las plantas, porque la última gestión antes de la cooperativa no solo no le pagó a los trabajadores, sino que rompió y hasta se robaron máquinas, dejaron todo destruido. Fue una masacre lo que hicieron y levantar todo esto costó mucho trabajo pero está teniendo sus frutos.

Actualmente, Farmacoop no solo se encarga de producir test serológicos. Es más, con la maquinaria que se les adjudicó ahora cuentan con un área productiva para preparar cualquier tipo de test. “No es que son solamente test para covid se pueden hacer test serológicos de cualquier enfermedad como el dengue, chikungunya, zika y también test de embarazo”, describió, entre otros.

Por otro lado, cuentan con una “línea cosmética” que está compuesta por alcoholes y barbijos. Y en el corto plazo, proyectan retomar la producción del primer producto del laboratorio anterior: una crema hidratante que se llama Aqualane. “Estamos por realizar el primer lote piloto para lanzar este producto, estaríamos arrancando a fines de febrero”, indicó Di Mauro.

Por último, la cooperativa tiene como objetivo que este año les otorguen la habilitación para volver a producir medicamentos. “Es la habilitación más complicada a nivel Anmat, es más exigente pero es la razón de ser de este laboratorio y es lo que las trabajadoras y trabajadores saben hacer”, reconoció y agregó: “Necesitamos los certificados de los productos para poder volver a producir”.

Todavía Farmacoop Limitada no cuenta con el permiso de continuidad definitiva. Y es por eso que desde el Consejo de Administración se continúa con las gestiones con el juez que lleva la causa. Por ese motivo, contar con este tipo de proyecciones productivas es de suma relevancia, ya que sin dudas son el puntapié para obtener el reconocimiento definitivo y poder explotar el laboratorio como corresponde. “La idea es generar también una estabilidad para los compañeros y las compañeras, decirles que esto es nuestro y el día de mañana no va a venir nadie a sacárnoslo”, afirmó Di Mauro.

“Queremos demostrar que con esfuerzo las cooperativas pueden salir adelante, pero también con el apoyo del Estado en lo que es ciencia y tecnología”, vislumbró el hermano mayor de los Di Mauro.