Femicidios: números para materializar y combatir el horror
Los relevamientos del 2016 hablan de más de 200 mujeres asesinadas, casi 300 hijos sin sus padres y una muerte en manos de la violencia machista cada 30 horas en el país. La unidad de las mujeres y el rol del #NiUnaMenos.
El 2015 fue el año del #NiUnaMenos. En 2016, se sumó el #VivasNosQueremos. Por fuera de las consignas, y más allá del rol clave del movimiento de mujeres a la hora de visibilizar la problemática, en este Siglo XXI hablar de hechos relacionados con la violencia de género o violencia machista, lamentablemente, se transformó moneda corriente.
En ese marco, y al conmemorarse en Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, algunos organizaciones dieron a conocer los resultados de distintos relevamientos realizados a nivel nacional en los últimos meses, casi un año, y que plasman en números los estragos del horror que viven miles de mujeres, inmersas en un círculo difícil de romper.
Más allá de las diferencias, lo cierto es que de los informes se desprende que más de 200 mujeres fueron asesinadas en el último año, casi 300 hijos perdieron a sus padres (173 de ellos son menores de edad) y se registra una muerte cada 30 horas en manos de la violencia machista.
De acuerdo al informe presentado por la asociación Casa del Encuentro, entre el primer día de este año y el 31 de octubre último hubo 230 femicidios, que dejaron sin mamá a 294 personas, en su mayoría menores de edad. El informe da cuenta de las cifras de un período donde se realizaron dos marchas con la consigna #NiUnaMenos, que sirvieron para que miles de mujeres se animaran a hablar.
En paralelo, el último relevamiento del Registro Nacional de Femicidios de Mumalá da cuenta de un panorama incluso peor, con un total de 271 femicidios en los últimos once meses y un mes por demás violento: en octubre se contabilizó un asesinato cada 20 horas, lo que convirtió al décimo mes del año en el período con mayor número de muertes por violencia de género.
Por su parte, la campaña Argentina Cuenta la Violencia Machista – de la que participaron casi 60 mil mujeres, quienes respondieron una encuesta vía web vinculada con quince dimensiones diferentes de violencia contra las mujeres, que van desde el abuso hasta el acoso, pasando por el maltrato y la discriminación- no solo aportó datos relacionados con las experiencias del grueso de la población, sino que se enfocó en un mes clave para el movimiento de mujeres: octubre de 2016.
Según el relevamiento, en la Argentina durante el mes de octubre de 2016 hubo 21 femicidios en 23 días, “cifras que sólo confirman la urgencia y la enorme dimensión que representa el problema de la violencia machista en la sociedad”. No casualmente, el 19 de octubre de este año, Argentina vivió el primer paro nacional de mujeres, consecuencia directa del brutal femicidio de Lucía Pérez, ocurrido en la ciudad.
Sería por demás irresponsable reconocer al movimiento de mujeres por su labor en los últimos dos años. Si bien es cierto que la lucha y las reivindicaciones, por fuera de las diferencias, tuvieron una fuerte presencia en la agenda mediática en los últimos 24 meses, también lo es que el trabajo es de larga data, algo que se vio reflejado, especialmente en Mar del Plata, en el desarrollo del 30° Encuentro Nacional de Mujeres.
#NIUNAMENOS, UNA BISAGRA EN LA HISTORIA
Hay una consigna quedará inmortalizada para siempre como la frase más representativa de esta lucha: #NiUnaMenos, visible en banderas, fotos en redes sociales y carteles y consolidada de la mano de un nuevo movimiento contra la violencia machista, que tomó peso tras la multitudinaria movilización del 3 de junio de 2015.
“Lo que ocurrió ese día no fue una reacción impotente frente a los femicidios; fue una movilización federal y transversal que sirvió para explicar que el femicidio es el punto más trágico, visible e irreparable de una cadena a veces invisible de violencias. Fue la expresión de un reclamo masivo hacia los poderes del Estado para que las más de 280 muertes violentas de niñas, mujeres y adolescentes que se contaban hasta el año pasado, no quedaran impunes”, señala al respecto el informe Argentina Cuenta la Violencia Machista.
Y en ese sentido, se expone en el trabajo realizado, “un año después, el 3 de junio de 2016, la convocatoria en las plazas de todo el país volvió a ser masiva: y el número de femicidios no se modificó; en la Argentina sigue muriendo una mujer cada 30 horas sólo por ser mujer”.
¿Qué cambió en los últimos años para que la violencia machista surgiera como uno de los problemas de relevancia? ¿Por qué el #NiUnaMenos impactó tan fuerte en la comunidad? ¿Ascendieron los femicidios y los episodios violentos o son las mujeres quienes se animaron a hablar y denunciar?
Para el colectivo de Argentina Cuenta la Violencia Machista “los 3 de junio de 2015 y 2016 funcionaron, en muchos sentidos, como acompañamiento a quienes aún no se atrevían a denunciar una situación de violencia, a quienes se sentían solas frente a las violencias más trágicas y, también, a las que sufren cotidianamente”.
En ese marco, Mar del Plata se convirtió en uno de los escenarios del horror, en particular en octubre cuando el femicidio de Lucía Pérez convocó a miles de mujeres a parar y movilizarse en una jornada de luto. Días después, el brutal femicidio de Valeria Britez –mamá de siete chicos y asesinada por su esposo de un disparo en la cabeza-convirtió nuevamente a la ciudad en noticia, por un trágico y violento hecho. En el mientras tanto, se siguen sumando las mujeres que ya no están, y el reclamo sigue siendo uno: #NiUnaMenos, porque #VivasNosQueremos.
