“Hemos transformado el dolor en fuerza y coraje para la lucha”
En la apertura del 30º Encuentro Nacional de Mujeres, unas 55 mil personas se congregan en la ciudad para dar comienzo a un evento histórico. “No hay #NiUnaMenos sin emergencia nacional, sin políticas públicas y sin presupuesto”, dijeron.
Miles de mujeres. Cientos de banderas. Gente del Norte, del Sur, del Centro de Argentina. Incluso representantes de países vecinos. El 30º Encuentro Nacional de Mujeres comenzó este sábado en la ciudad y, como no podía ser de otra manera, Mar del Plata está invadida de luchadoras, de mujeres que desde su lugar aportan a lo que consideran es una revolución colectiva, que excede el color político y las circunstancias individuales.
Fue todo un año de organización, luego de que durante el 29º Encuentro Nacional de Mujeres se eligiera a Mar del Plata como sede, como lugar, justamente, de encuentro. Y como era de esperarse, fueron miles las mujeres que llegaron a la ciudad para participar, algunas por primera vez, otras desde siempre. La consigna es amplia, pero el objetivo es uno: empoderar la lucha de un sector históricamente oprimido y relegado a un segundo plano.
En ese contexto, y tras la apertura de las puertas del estacionamiento del Estadio Mundialista, los distintos grupos se fueron ubicando y el clima fue de celebración. Con diferentes pancartas y banderas, en su mayoría relacionadas con la necesidad de que el #NiUnaMenos no sea solo una consigna, el canto que más se escuchó y sintió fue uno: “A pesar de todo, les hicimos el Encuentro”.
Pasadas las 10, y con la totalidad del lugar colmada, las integrantes de la comisión organizadora del evento subieron al escenario y cantaron el Himno Nacional Argentino, en una versión folklórica que despertó aplausos y mucha emoción. Luego, llegó el momento de la lectura del documento elaborado especialmente para esa edición del evento.
“En el año del #NiUnaMenos las mujeres llegamos a este Encuentro Nacional de Mujeres para decir basta de femicidios y emergencia nacional en violencia sexual y doméstica, estableciendo políticas públicas y un verdadero y profundo cambio social, cultural y económico”, se leyó, lo que despertó el intenso aplauso y vitoreo por parte de las presentes.
En ese sentido, desde la comisión destacaron el crecimiento de los encuentros en estos 30 años y remarcaron el espíritu de los mismos, relacionado con la construcción y la defensa de un espacio “profundamente democrático”. “Es un ejemplo de organización único, por su carácter plural, federal, horizontal, autoconvocado y autofinanciado, para que tengamos la libertad de expresarnos sin que nadie nos condicione”, remarcaron.
A su vez, las organizadoras resaltaron la importancia de que en los talleres que se desarrollarán durante los próximos días, todas las mujeres puedan recuperar su voz “en un clima de consenso e igualdad que permite, a pesar de las diferencias, estar unidas para luchar contra la doble opresión que sufrimos como mujeres y trabajadoras”.
“A lo largo de estos 30 encuentros, el movimiento fue tomando fuerza hasta convertirse en el más trascendente hecho social, político y cultural. Este es el reflejo de la lucha de las mujeres argentinas contra el patriarcado y la explotación de la sociedad capitalista”, sumaron y reflexionaron: “Hemos transformado el dolor y la angustia en fuerza y coraje para la lucha; y así lo demostramos con el #NiUnaMenos”.
Sobre esto mismo, desde la comisión consideraron que pese al impacto de la convocatoria de junio de este año, “después de ese día no hubo cambios”. “No hay un registro oficial, no hay un plan de acción, el presupuesto sigue siendo miserable en relación a la situación que padecen las mujeres; hubo 40 femicidios más y el silencio oficial sigue más vigente que nunca”, cuestionaron.
En esa línea, una de las consignas de este 30º Encuentro Nacional de Mujeres es, justamente, “no hay #NiUnaMenos sin emergencia nacional, sin políticas públicas y sin presupuesto”. Y por eso, desde la comisión consideraron necesaria la continuidad de estos espacios de debate, porque “son una manera de avanzar con las conquistas logradas”.
“Podemos decir muchas cosas de los encuentros, amarlos, criticarlos, defenderlos o exigir más y esto es precisamente el encuentro, la voz de todas y el respeto ante todo por nuestras historias, nuestras vidas, nuestras luchas, nuestras palabras”, resumieron y sumaron: “Vamos encontrando los caminos para la liberación”.
LA OTRA CARA DE MAR DEL PLATA
En cuanto a la situación local, las organizadoras consideraron necesario “mostrar la otra cara de la ciudad feliz”. “Es la de mayor índice de mujeres muertes y desaparecidas; es una ciudad con alarmantes índices de denuncias de violencia familiar (800 por mes); es la ciudad de la trata, con más de 450 prostíbulos que funcionan con impunidad; y también es una de las ciudades con mayor desocupación y trabajo en negro”, enumeraron.
Sin embargo, desde la comisión también repararon en la historia de lucha de las mujeres en la ciudad, “rompiendo el silencio en las calles de la ciudad”. Así, recordaron el escrache y clausura de La Posada, las denuncias al diario La Capital por publicar oferta sexual y la anulación del rubro 59; y el acompañamiento a Rocío Girat, a Victoria Montenegro y Anahí Tanguikian, entre otras cosas.
Finalmente, y en cuanto a las exigencias en el marco de este Encuentro, desde la comisión pidieron nuevamente la de emergencia en violencia sexual y doméstica; la inmediata reglamentación de la ley 264.85; la reapertura de la fiscalía de delitos contra la integridad sexual; la imprescriptibilidad del delito de abuso sexual; igual salario por igual trabajo; educación sexual para decidir, anticonceptivos gratuitos para no abortar y aborto legal seguro y gratuito para no morir; legalización y despenalización del aborto; y no a la trata ni a la explotación sexual, entre varios puntos.
