Jueves 25 de abril | Mar del Plata
23/05/2015

“La vida de mi hija no se paga con un curso de manejo”

Natalia Parodi pide juicio para condenar al conductor de un camión municipal que causó en Miramar la muerte de Antonella, su nena de 5 años. Le otorgaron la probation y el fiscal Pablo Cistoldi propuso someterlo a clases de conducir.

“La vida de mi hija no se paga con un curso de manejo”
(Foto: Lucho Gargiulo)

El caso de Antonella Rivero es de esos en los que la Justicia, más allá de sus tecnicismos y encuadres legales, no expresa sentido común. Este viernes, el mismo día en el que se cumplieron dos años de la muerte de esta nena de 5 años -causada en Miramar por el conductor de un camión municipal en pésimas condiciones-, la Justicia le negó a su madre la posibilidad de ir a juicio y le dio la probation a Juan Carlos Peralta, quien al día de hoy conserva su licencia, continúa manejando y la condena que impulsa el fiscal del caso, Pablo Cistoldi, consiste en negarle conducir y someterlo a un curso de manejo.

El 22 de mayo del 2013, como todas las mañanas, Natalia Parodi subió a su bicicleta junto a su hija para llevarla al Jardín de Infantes Nº 902 de Miramar, ubicado a unas pocas cuadras de su hogar. Eran cerca de las 8 cuando un camión municipal con los frenos rotos según la pericia mecánica, sin VTV, con sus ruedas lisas y un limpia parabrisas literalmente atado con alambre, las chocó y las hizo caer cuando doblaban por la avenida 9. El camión pudo frenar recién en la esquina y segundos antes había rozado a otra madre.

Por el impacto, Natalia cayó hacia el lado de la vereda, sufrió una fractura en el sacro y estuvo cuatro meses sin poder caminar. Pero fue Antonella, de 5 años, quien sufrió la peor parte: cayó hacia el otro lado, sufrió serias lesiones y una ambulancia la trasladó en estado inconsciente hasta el Hospital Municipal “Marino Cassano”, donde poco pudieron hacer por ella y finalmente falleció.

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Por el hecho se abrieron dos causas judiciales: una en la Fiscalía Nº 11 de Delitos Culposos contra Juan Carlos Peralta, el conductor del camión, y otra en la Fiscalía de Delitos Económicos para determinar quién fue el responsable de que el vehículo municipal saliera en esas condiciones a la calle.

La segunda de las causas impulsó una revisión de la flota vehicular del Municipio de General Alvarado, ya que el que causó la tragedia no era el único camión que carecía de las condiciones mínimas de seguridad para circular. Una semana después del fatal accidente, varios transportes de la Comuna fueron enviados a Mar del Plata a hacer la VTV que muchos no tenían. Algunos la pasaron, otros no.

PEDIR JUSTICIA SIN QUE PUEDA HABERLA

Natalia Parodi tiene 35 años y sabe que nada ni nadie, lamentablemente, le devolverá a Antonella. Sin embargo, hay algo de lo que está convencida: “La vida de mi hija no se paga con un curso de manejo”.

Según la mamá, esa fue la condena que el fiscal Pablo Cistoldi pidió para el conductor del vehículo. “Nosotros sabíamos que él iba a pedir la probation. Lo sabíamos porque se lo había dicho a mi abogada, Adelina Martorella”, contó.

El caso tuvo idas y vueltas. En un principio la Fiscalía pidió la elevación a juicio oral, pero la defensa de Peralta apeló. Luego la jueza de garantías respaldó la elevación a juicio oral, pero volvieron a apelarlo y ahora, este viernes, el mismo día en el que se cumplieron dos años de la muerte de Antonella, la Justicia le dio la probation a Peralta. La familia de la víctima, por supuesto apelará.

Cuando Natalia habló con el fiscal del caso, encontró una respuesta que la desconcertó por completo. Cistoldi le dijo “que la vida es así, que a veces se gana y a veces se pierde”.

“Estamos hablando de una nena de 5 años. El fiscal debería defender a la víctima, a Anto, no al imputado. En la audiencia Cistoldi dijo que pedía la probation porque no hubo intencionalidad, sino que se trató de ‘un momento de imprudencia’, pero es increíble la frialdad con la que Cistoldi habla de una vida, en este caso la de una nena de 5 años. ¿Y quieren que ahora haga un curso manejo? Me están cargando”, analizó su madre.

Juan Carlos Peralta nunca estuvo detenido. La Justicia decidió no sacarle la licencia de conducir, trabajó en estos meses como remisero y continúa trabajando en la Municipalidad de General Alvarado, como barrendero, aunque la madre de la víctima se pregunta “¿si era barrendero por qué manejaba un camión?”, pero luego, en un intento de encontrar respuestas a una imprudencia naturalizada, se contesta: “La lógica en Miramar es así: si tenés carné, te podés subir”.

DOS AÑOS VACÍOS

Recién cuatro meses después del hecho, Natalia pudo volver a caminar tras la fractura en el sacro que le provocó el impacto. Ya para entonces, se vio inmersa en un mundo de pasillos judiciales, marchas en la calle para exigir justicia por su hija, un cartel con la foto de Antonella con una mueca pícara (cuenta su mamá con una sonrisa que era “muy compradora” y “un poco chanta”) y también abogados, fiscales, notas en los medios de comunicación y un dolor diario que jamás ella ni su familia pensaron que podrían vivir.

MAMA ANTONELA MIRAMAR © (1)

 

En los dos años que ya pasaron, la familia de la víctima no tuvo contacto con Peralta. No se conocían y en todo este tiempo el conductor jamás se acercó a Natalia para reconocer lo que había pasado.

La madre de Antonella ahora apelará la probation, básicamente porque es lo único que le queda frente a la carencia de sentido común de un sistema que decide darle la espalda.

Por eso, reclama: “Queremos llegar a juicio. En realidad, lo que yo quiero es que me la devuelvan a ella, pero nadie me la va a devolver. Tengo en claro que no va a ir preso, porque la pena es de dos a cinco años y es excarcelable si llegamos a juicio. Nos estamos conformando con sacarle la licencia de 10 a 15 años y tener que conformarse con eso, es una mierda. Todo esto te cambia la vida”.

Pero a veces, solo a veces, la vida cambia para bien. Hoy Valentino tiene tan solo 50 días de vida y duerme plácidamente en su “cochecito” mientras Natalia cuenta su historia. Es su bebé, que mucho costó que llegara y que hoy es el segundo motivo de su sonrisa y lo único que le trajo un rayo de luz en estos dos años vacíos.

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23/05/2015