“Las joyas del juez”: jubilado denuncia violento allanamiento
Luis Leonardo Lamilla, de 67 años, vive en Santa Rosa del Mar. Asegura que la policía entró violentamente a su casa y lo acusó del robo a un magistrado. “No tuve nada que ver; somos muy pobres, pero tenemos dignidad y valores”, sostiene.
Un jubilado de 67 años que vive en el barrio Santa Rosa de Mar denunció ante la Justicia que la semana pasada fue víctima de un violento allanamiento por medio del cual se lo acusó de haberle robado a un juez. Más allá de negar tener algo que ver con el hecho, el hombre asegura que el procedimiento fue por la tarde mientras estaba con su familia y que en ese contexto los policías rompieron las puertas, obligaron a las mujeres a desnudarse para revisarlas y se llevaron dinero que había juntado para comprarse una pierna ortopédica. “Somos muy pobres, apenas tenemos para comer, pero tenemos mucha dignidad y valores”, expresa.
Luis Leonardo Lamilla, con el patrocinio de la Casa del Trabajador, se presentó en las últimas horas ante la Justicia para radicar la denuncia de lo sucedido y para exigir, principalmente, una reparación por los daños provocados.
“Tengo 67 años, estoy jubilado, percibo haberes mínimos mensuales y vivo en uno de los barrios más humildes de la ciudad, Santa Rosa del Mar. Lo poco que tengo lo conseguí a fuerza de trabajo”, señala en el inicio de la presentación realizada ante la Justicia.
De acuerdo al relato, el pasado 11 de abril alrededor de las 14, un grupo de policías “fuertemente armado” llegó a su casa de la calle 433 bis entre 50 y 52 mientras él se encontraba con su esposa, su nuera y sus nietos menores de edad, y “sin mediar palabra tiraron abajo la puerta de ingreso y entraron”.
“Con las armas que portaban nos apuntaban a la cabeza, incluso a mi nieto de dos años. Nosotros nos sorprendimos por semejante operativo, pero no ofrecimos ningún tipo de resistencia. Los efectivos a viva voz pedían que entreguemos ‘las joyas del juez‘”, relata Luis y señala: “Yo desde hace aproximadamente un año no puedo caminar, ya que me cortaron una pierna. A pesar de esta situación los policías me obligaban a que caminara, apuntándome en la cabeza con un arma”.
Asimismo, afirmó que uno de sus nietos recibió un disparo de bala de goma en su pierna “cuando intentaba calmar a su hermanito menor que se había asustado”. Además, enumeró que les “dispararon a animales domésticas y amenazaban con matar a una perrita”.
“En forma insistente y violenta nos exigían que entregáramos el ‘oro y las joyas del juez Trogu’. Asimismo, obligaron a mi mujer y nuera a desnudarse para revisar su vagina aduciendo que allí tenían la joya. Algo absolutamente indígnate y violento”, relata en otro tramo de la presentación.
En este marco, cuenta que luego de que el operativo se extendiera durante cuatro horas, los efectivos “no encontraron absolutamente nada de lo que buscaban”. Y afirma: “Era obvio, nosotros no robamos a ningún juez ni a nadie ni guardábamos en nuestra casa sus pertenencias. Somos muy pobres, apenas tenemos para comer, pero tenemos mucha dignidad y valores”.
Por otro lado, el jubilado relata que cuando empezaron a ordenar la casa se encontraron con que “se habían llevado $12 mil que había ahorrado para comprar la pierna ortopédica”.
“Aparentemente se me acusa de un robo, siendo insólito esto ya que no puedo caminar, no tengo antecedentes penales y no tuve absolutamente nada que ver con el robo de las millonarias ‘joyas del juez'”, apunta y en la denuncia cuestiona: “No sé si se trató de un error de inteligencia o un accionar tendiente a quedar bien con el juez víctima del robo. Pero lo cierto es que si querían registrar mi domicilio, yo les abría la puerta, no era necesario que la rompieran y que actuaran en forma violenta con nosotros. Por el hecho denunciado, los chicos están atemorizados, no duermen y necesitan un tratamiento psicológico, el cual no lo puedo brindar por falta de recursos”.
