Jueves 28 de marzo | Mar del Plata
06/02/2018

“Lavacoches”, un rebusque que crece pero que no está permitido

Muchos “cuidacoches” ofrecen este servicio para recaudar más dinero. Cuidar los vehículos no está prohibido, pero sí lavarlos en la vía pública. Qué dice la normativa y cómo son los controles.

“Lavacoches”, un rebusque que crece pero que no está permitido
(Foto: ilustrativa / QUÉ Digital)

Entre los llamados “trapitos” o “cuidacoches”– actividad de todo el año, pero que aumenta en verano- hace años viene en alza un “servicio” o rebusque paralelo que les permite obtener algo más de dinero a quienes ejercen esta actividad. Se trata de los “lavacoches”, es decir, aquellos que además de cuidar el vehículo ofrecen el lavado de la carrocería en la vía pública, algo que por ordenanza no está permitido en Mar del Plata y que Inspección General controla y sanciona, pero las autoridades municipales reconocen no poder erradicar.

Cada verano muchos jóvenes, hombres y mujeres, llegan a Mar del Plata para “hacerse la temporada” cuidando autos estacionados cerca de centros comerciales, plazas, zonas plagadas de edificios, los accesos a distintas playas y en las cercanías de locales gastronómicos, boliches, teatros y espacios culturales, entre otros.

Llegan principalmente desde distintas localidades del Gran Buenos Aires y desde otras provincias debido al movimiento turístico de la ciudad entre diciembre y marzo. A ellos se suman los que ya ejercen esta actividad durante el año en la ciudad. No obstante se estima que en verano el 80% no son de Mar del Plata.

La actividad de los “cuidacoches” no está prohibida por ninguna ordenanza. Si bien se avanzó sobre la creación de un registro de “trapitos”, ninguna normativa establece el impedimento para cuidar coches a voluntad. Lo que sí está prohibido por ley es el delito de extorsión, es decir, “ponerle un precio a la calle” y obligar al propietario del vehículo a pagar una cifra fija a cambio de su cuidado, como ocurre frecuentemente en algunas playas o bien en los alrededores de los estadios José María Minella y del Polideportivo “Islas Malvinas” cuando se disputan determinados partidos.

La Subsecretaría de Inspección General de la Municipalidad realiza periódicamente -junto a la Policía Bonaerense y la Policía Local- operativos de identificación de “cuidacoches”. Según sostuvo Emilio Sucar Grau, titular de Inspección General, “se identifica en estos controles a muchas personas que tienen pedidos de captura”, pero actualmente se reforzó el trabajo para sancionar a los “lavacoches”.

En casi el 100% de los casos, quienes se ofrecen a lavar los vehículos estacionados en la vía pública son los mismos que los cuidan. Forma parte de un “rebusque” que creció con el tiempo y que implica poder recaudar más dinero por el lavado del exterior de autos y camionetas.

Si bien en muchos casos para lavar el vehículo ya se impone cierto precio sumado al del cuidado, la actividad de los “lavacoches” se encuentra prohibida no solo por intentar fijar un valor, sino porque por ordenanza no se permite en general el lavado de vehículos en la vía pública.

Concretamente, la Ordenanza Nº 21.573 aprobada por el Concejo Deliberante y promulgada por el Ejecutivo municipal, establece en su artículo Nº 110 la prohibición de lavar autos en la calle. De acuerdo a la normativa, está prohibido arrojar y canalizar en la vía pública líquidos de cualquier naturaleza y/o descargar en la acera el agua de los edificios; el uso o canalización hacia la vía pública de detergentes, productos clorados o alcalinos; y lavar autos en la vía pública durante las 24 horas.

Vale aclarar que la prohibición rige para toda aquella persona que lave un vehículo en la vía pública, así sea de su propiedad, lo que obliga a lavarlos en lugares cerrados o bien en comercios habilitados como lavaderos.

“Infraccionamos a los que lavan autos porque esta actividad no está permitida”, resumió el subsecretario de Inspección General y explicó que lo que en el lavado “hay aguas servidas que terminan derramándose y contaminando el Medio Ambiente y los desagües”.

Para el lavado de los coches se utiliza agua y en varios casos detergentes o sustancias que “mejoran” el lavado. Sin embargo, estos fluidos desembocan directamente en las napas.

Cada vez que se detectan lugares en los que hay “lavacoches”, según explicó Sucar Grau, “se procede a sancionar a quienes lavan coches y a secuestrar los elementos para que dejen de hacerlo”.

Los controles sobre la actividad de los “lavacoches” han aumentado en el último tiempo, pero el “rebusque” también se incrementó y se multiplicó en diferentes arterias y zonas de la ciudad.

“Son muchos los que lavan, principalmente en las arterias de mayor circulación. Es imposible estar en todos lados, pero sí recorremos Güemes, la costa, Olavarría, zonas de alta circulación en las que encontramos algunos lavacoches”, señaló el funcionario.

“Está claro que no lo podemos erradicar al 100% porque debería haber un inspector en cada cuadra”, reconoció el subsecretario de Inspección General, pero remarcó que “se trabaja en este aspecto junto a la policía y se recorre la ciudad para identificar y sancionar a los que lavan coches mientras cuidan”.

Ver más: , , , , , , , ,

06/02/2018