Malvinas, 40 años: “No hemos bajado nunca los brazos por el reconocimiento”
Desde el Centro de Ex Soldados Combatientes lamentaron haber “conocido la discriminación y la marginación” y resaltaron la “lucha por su dignidad”.
Con la celebración de “no haber bajado nunca los brazos por el reconocimiento“, con el lamento de “haber conocido la discriminación y la marginación” y con el impulso del mensaje de “Memoria, Verdad y Justicia” para que “nunca más se abuse y violente contra la vida o la dignidad del que pueda ser más débil o que piense distinto”, el Centro de Ex Soldados Combatientes de Mar del Plata expresó este sábado sus sentimientos al cumplirse 40 años de la Guerra de Malvinas, en el marco del acto central llevado adelante en el monumento ubicado en el centro de la ciudad, que concentró a un importante número de personas que se acercaron para conmemorar un nuevo aniversario del conflicto bélico impulsado por la última dictadura cívico militar.
Después de dos años sin actos masivos por el impacto de la pandemia del coronavirus, el Monumento a los Caídos de Mar del Plata volvió a ser este sábado el escenario de un emotivo acto, homenaje y desfile encabezado por el Centro de Ex Soldados Combatientes de la ciudad y por autoridades municipales y militares.
El documento del Centro de Ex Soldados Combatientes de Mar del Plata no fue leído en esta oportunidad por su presidente, Fernando Álvarez, sino que fue José María Coty Lambertini el encargado de poner en palabras las reflexiones y sensaciones a 40 años de la guerra.
Esas palabras, advirtieron en el documento, eligieron que estuvieran en esta oportunidad fundamentalmente dirigidas a todas las personas que los acompañaron a lo largo del trayecto “y quienes hicieron posible que cada vez que tropezábamos, nos levantemos y siguiéramos adelante, a quienes mantienen viva la memoria”, según expresaron.
“Hoy podemos decir que no hemos bajado nunca los brazos por el reconocimiento, la memoria, el respeto y el homenaje permanente hacia nuestros verdaderos héroes, la batalla incansable que nos permitió mantenernos vivos, con la frente en alto”, destacó una primera parte del documento, reconoció a instituciones “que llevan bien en alto el compromiso de la gesta” y planteó que en ese camino se logró “mantener viva la esperanza de que algún día, por la vía diplomática, recuperemos lo que nos pertenece”.
En el mensaje, también se evidenció el contexto político en el que se produjo la guerra. “La decisión de aquel momento fue de un gobierno dictatorial y represor que quiso distraer a la población de la crisis económica y social en la que había sumido al país, echando mano a una causa tan sentida y convocante para todos los argentinos”.
En esa misma línea, desde el Centro entendieron que esa “reprochable decisión no puede desmerecer el sentir popular, el sacrificio de sus hombres y la entrega de la vida de jóvenes, los verdaderos héroes, por defender lo que consideramos desde siempre parte de nuestro territorio usurpado desde 1833 por el colonialismo inglés”.
Tras ello, el documento reparó en el estrés post traumático de la guerra, “nunca tratado al regreso”, sufrido por muchos de los excombatientes y destacó haber sobrepasado “todas las adversidades” y la “indiferencia y la campaña desmalvinizadora” producida tras el regreso de la guerra
“Hemos conocido la discriminación y la marginación“, lamentaron y recordaron a quienes se suicidaron a la vuelta “tal vez porque esa la indiferencia dolía más que cualquier otro dolor y agudizaba su padecimiento”. Así, destacaron a quienes impulsaron el comienzo de una lucha por la “dignidad”.
En otro tramo, el mensaje reparó en que el Centro acompaña la causa impulsada desde 2007 por excombatientes por violación a los derechos humanos por parte de sus superiores. “Está entre nuestro pilares fundacionales luchar por un Estado democrático y encolumnarse en defensa de todas las causas que han atentando y atentan contra los derechos más elementales, sobre todo si es el Estado quien los provoca”, expuso.
Y así también el documento manifestó su acompañamiento a las organizaciones “que mantiene esta lucha de Memoria, Verdad y Justicia”, al ser “acciones y valores para que nunca más se abuse y violente contra la vida o la dignidad del que pueda ser más débil o que piense distinto”.
Finalmente, desde el Centro destacaron la ordenanza aprobada el año pasado en Mar del Plata que institucionalizó el Programa de Salud para la atención de todos los veteranos, una deuda que empieza a repararse a 40 años. “Prohibido olvidar”, cerró el documento.
