Mar del Plata inicia su primera temporada de verano en pandemia
Desde este martes, la ciudad se encuentra ante el desafío de atravesar el primer verano de su historia de frente a una pandemia, con un turismo regido por protocolos, cuidados y con un ojo puesto en el sistema sanitario.
Este martes comenzó oficialmente la temporada de verano 2020-2021, la primera de la historia atravesada por una pandemia, o al menos por la más letal desde que se concibe a Mar del Plata como la capital del turismo nacional. Hasta el 4 de abril, según lo estipulado en las resoluciones provinciales, la actividad turística deberá estar signada por los protocolos sanitarios, las medidas de cuidado personal y con un ojo puesto en el sistema de salud.
Después de meses atípicos atravesados por la cuarentena para prevenir la transmisión de la covid-19 y las actividades que dejaron de realizarse o empezaron a adaptarse a la nueva normalidad, vuelve el turismo, una de esas actividades más afectadas.
La temporada 2020-2021, además, aparece para Mar del Plata como un desafío. En medio de un panorama epidemiológico que aparenta estabilizado, más que nunca asoma como un empujón frente a la crisis económica que en la ciudad arrojó números exorbitantes de desocupación y pobreza.
Frente a condiciones económicas que por lógica también afectaron a los potenciales veraneantes, la Mar del Plata de la fase 4 del sistema de distanciamiento social, preventivo y obligatorio (DISPO) comienza este martes una (si no la) principal apuesta para una recuperación económica con el afán de sostener lo más posible el equilibrio con la cuestión sanitaria.
LA PANDEMIA EN MAR DEL PLATA
Epidemiológicamente, el inicio formal de la temporada encuentra a Mar del Plata con menos de 150 casos diarios desde el 15 de noviembre. A lo largo de la pandemia, entre los meses de julio y agosto se experimentó el brote y el inicio de la circulación comunitaria, y el sistema de salud llegó a importantes niveles de tensión en el mes de septiembre, cuando incluso se registró el pico de 477 casos (25/9).
Luego, los casos diarios se mantuvieron aproximadamente entre los 330 y los 230 al menos hasta el 30 de octubre. Luego, al igual que la tendencia a nivel nacional y provincial, comenzó una baja de casos que se mantiene y que incluso llegó a registrar por debajo de 100 contagios diarios el pasado domingo, el día con menos casos desde el 21 de agosto.
PERMISOS PARA VIAJAR
Además de la complejidad que supone la gestión de una pandemia en sí, a lo largo de la misma una de las principales dificultades de los gobiernos estuvo en la claridad a la hora de comunicar medidas para evitar la propagación. El desarrollo de la futura temporada no quedó exento de esas desprolijidades.
A medida que se aproximaba la hora de planificar la temporada, Mar del Plata y el país atravesaban su situación más delicada, al punto de poner en duda en palabras de algunos funcionarios la realización de la temporada. Inevitablemente la misma debía llevarse a cabo, y desde el gobierno provincial y municipal apuntaron y apuntan a tener “la mejor posible” dentro del contexto adverso. La primera “prueba” fue la llegada de propietarios no residentes desde el 1 de noviembre.
En cuanto al turismo en general hubo idas y vueltas en las que -por ejemplo- anunciaron la obligatoriedad de una aplicación “Cuidar Verano”, finalmente este lunes -un día antes- formalizaron la creación del certificado obligatorio que las y los turistas deben tramitar para llegar a la ciudad. En él, se les solicitan datos personales y del grupo familiar con el que viajarán y detalles de la estadía.
En cuanto al turismo y el coronavirus, el protocolo establecido por la Provincia establece que los turistas no podrán permanecer en hoteles y alojamientos en caso de contraer la enfermedad o ser casos sospechosos. En consecuencia, deberán volver a sus ciudades de origen en 24 horas en la medida de sus posibilidades o ser alojados por el Municipio en un dispositivo específico para que cumplan con el aislamiento.
TRANSPORTE
Si bien el transporte terrestre de larga distancia volvió a estar habilitado desde noviembre para trabajadores esenciales, este 1º de diciembre comienza a ser una opción para quienes deseen viajar con fines turísticos. Al menos por el momento, el tren a Mar del Plata dispone de una frecuencia diaria, en tanto que, con la aprobación del Ministerio de Transporte, los micros de larga distancia funcionan con grandes limitaciones en el país y según lo dispongan las empresas. En el caso de los servicios desde y hacia Mar del Plata las opciones aún son prácticamente nulas.
PROTOCOLOS
Días atrás, el gobierno de la Provincia de Buenos Aires anunció una serie de protocolos que se deben llevar adelante como mínimo en los municipios dispuestos a recibir turismo en la próxima temporada de verano. Se trata de trece pautas de funcionamiento para las principales actividades turísticas que pueden ser consultadas en la página web de la Provincia y en la del Ente de Turismo de Mar del Plata.
Entre las principales medidas de regulación, por ejemplo, se encuentran los balnearios y playas públicas. En los primeros, se establecieron medidas de prevención signadas por el distanciamiento social y el uso de las instalaciones, mientras que en las segundas los controles en los ingresos para evitar desbordes aparecen como los principales lineamientos. Todo a cargo de la supervisión de un Municipio que dijo que será “inflexible” en los controles pero que bien desistió de ellos cuando desde la Provincia no se habilitaban actividades como la gastronomía, entre otras.
A ello se suma la complejidad que revisten rubros como el entretenimiento y la gastronomía. Las limitaciones para la actividad teatral están a la orden del día, los boliches solo podrían funcionar al aire libre (aún no difundieron un protocolo) y la gastronomía solo debe tener ventilación natural con aforo o realizarse en espacios abiertos. En ambos sectores rigen dos cuestiones que para las autoridades sanitarias son básicas: la limitación de personas por sobre la capacidad total y la prohibición de uso de sistemas centralizados de aire acondicionado para evitar la propagación del virus.
SISTEMA SANITARIO
El cumplimiento o no de los protocolos sanitarios tendrá implicancia directa con lo que suceda con el sistema sanitario, dado a que más allá de la implementación de una temporada más extensa, la llegada de turistas multiplicará a niveles más que importantes la población y la circulación de personas.
En primer término, tanto el gobierno nacional como el provincial y el municipal confluyeron en los primeros meses de pandemia para ubicar en Mar del Plata un hospital modular que, más allá de no funcionar gran parte del tiempo en todo su potencial por la falta de profesionales, sirvió para contener la demanda local de camas de terapia intensiva.
Además, para liberar camas de internación leve y moderada el Municipio equipó hoteles -que por la vigencia de la cuarentena no tenían otra función posible- y también aportaron para descomprimir la circulación y la ocupación de camas en el sistema de salud.
De cara a la temporada al menos por el momento no se anunciaron medidas de fortalecimiento sanitario de complejidad como lo fue el hospital modular, aunque sí se inició la construcción de una “Unidad de Refuerzo Sanitario”, que el Ministerio de Turismo de la Nación ubicó en los principales destinos turísticos a los fines de testear, diagnosticar y atender en primera instancia a pacientes sospechosos de coronavirus.
