Marcha por las playas públicas: “Hay que exponer el problema”
Un nutrido grupo de personas participó de la sexta edición de la actividad organizada por Verde Mundo. Críticas al Municipio por apelar la presentación judicial a favor del libre acceso y mucho color en una jornada artística y ambiental.
Muchos dicen que el arte es una expresión transformadora y que esa premisa se puede aplicar a todos los ámbitos. Entonces, los integrantes de la asamblea Verde Mundo, el Colectivo Faro de la Memoria y numerosos vecinos de la zona sur -preocupados por la problemática– decidieron este sábado llevar adelante la sexta edición de la marcha por las playas públicas.
¿De qué se trata? Una actividad que ya es tradición en época estival y que llama a la comunidad a comprometerse y luchar por los espacios públicos, a través también de distintas expresiones artísticas. Y en el marco de una disputa judicial respecto a esta problemática, la marcha tuvo otro condimento, teniendo en cuenta que el propio Municipio apeló una presentación judicial efectuada con el objetivo de que se garantice el acceso irrestricto a los espacios costeros.
La marcha comenzó pasadas las 16 y partió de la rotonda del faro. Hasta allí se acercaron familias, amigos, músicos, artistas y muchos vecinos interesados en defender “los bienes comunes”. Con carteles, sombrillas intervenidas artísticamente y un metro a escala especialmente confeccionado para medir la playa pública, el nutrido grupo partió por la costa, con dirección al médano de San Jacinto, donde funciona la Reserva Educativa de Verde Mundo y donde se llevó adelante un festival cultural y gastronómico.
“Somos muchos los que trabajamos para apoyar esta lucha por el libre acceso, tenemos mucha energía, convocamos para que esto se haga visible y se logre colocar dentro de la agenda local. Hay que exponer el problema para que haya una solución”, sostuvo Karina Huarte, minutos antes de empezar a marchar.
En ese sentido, la vecina e integrante de uno de los grupos que viene reclamando por más y mejor espacio público, destacó la importancia de esta actividad y de todas las que se llevan adelante en la Reserva San Jacinto.
“Allí hay un médano, que es el último virgen que queda y es una Reserva Educativa, trabajamos todo el año llevando chicos de las escuelas, sin apoyo municipal, con el empuje de la asamblea y lo que se recauda en los festivales. Hacemos visitas y también hay talleres. Trabajamos por la construcción ambiental”, apuntó.
Respecto a la toma de conciencia por parte de la comunidad, para Karina ha habido un cambio, pero falta. “Es un tema que lleva 30 años, pero lo cierto es que cada vez la comunidad se va dando cuenta un poco más y se prepara para unirse, aun con diferencias partidarias o ideológicas”, sostuvo y agregó: “Acá estamos todos para construir algo nuevo sobre un bien común que, en realidad, deberían proteger nuestros funcionarios”.
LA APELACIÓN Y LA POSTURA DEL GOBIERNO
Finalmente, y respecto a la situación judicial -en especial luego de que la Justicia hiciera lugar a la apelación del gobierno local y pusiera en suspenso la medida cautelar dictada a principios de mes– la vecina aseguró que “la apelación es innecesaria y discriminatoria”. “Lo que hicieron no representa nuestros derechos y nos parece que la apelación demuestra la posición del Municipio en esta lucha por los espacios públicos costeros”, completó.
