Sábado 20 de abril | Mar del Plata
03/02/2021

Natalia Melmann, a 20 años: el equilibrio entre recuerdos dramáticos y felices

Gustavo, el papá de la joven brutalmente asesinada en febrero de 2001, expone los sentimientos que lo recorren ante cada aniversario. Y reitera el reclamo por una Justicia “más rápida y comprometida”.

Natalia Melmann, a 20 años: el equilibrio entre recuerdos dramáticos y felices
(Fotos: archivo / Qué digital)

El de Natalia Melmann –la adolescente de 15 años que fue secuestrada, torturada, violada y asesinada en Miramar el 4 de febrero de 2001 por policías– fue uno de los crímenes más conmocionantes de la época. Pasados exactos 20 años, Gustavo, su papá, dice que cada año la extraña más, que cada vez se hace “más duro”, que cada aniversario está atravesado por recuerdos dramáticos, pero también por aquellos felices “por todo lo que Nati fue como persona”.

Pasaron 20 años y el Poder Judicial aún tiene cuestiones fundamentales por resolver: dictar un nuevo fallo contra un cuarto policía acusado -que fue absuelto en 2018 pero al año siguiente el Tribunal de Casación anuló la decisión-, mientras otros tres cumplen reclusión perpetua desde 2002; y también desentrañar a quién pertenece un quinto perfil genético que fue hallado en un rastro en el cuerpo de Natalia Melmann. Por eso, Gustavo reclama por una Justicia “más rápida y comprometida” porque, además, hace un par de años enfrentó constantes idas y vueltas por salidas transitorias de los asesinos y porque teme que en algún tiempo puedan acceder a la libertad condicional.

Horas antes de la llegada de este 4 de febrero que marca el cumplimiento de los 20 años del femicidio de su hija, Gustavo dice que por estos días la tiene presente en cada momento. Cada aniversario, cuenta, se convierte en una catarata de recuerdos, emociones, sensaciones.

“Ante cada año la extrañamos más, se nos hace más duro y más presente la lucha que debe haber dado con estos hombres para que no la maten, la manera en la que la torturaron se nos vuelve y nos queda el fantasma”, dice con suma emoción y también señala que vuelven a él las imágenes de cuando recogió su cuerpo en el vivero municipal y lo “custodiaba” para llevarlo a la morgue.

Gustavo expresa que cada año regresan “todos esos momentos dramáticos y todos los momentos felices por todo lo que fue Nati como persona: solidaria, abocada a estudiar”.

Y la recuerda: “Con gran esfuerzo se levantaba a las 4 de la mañana para estudiar, iba a ser obstetra, quería adoptar chicos porque sabía que había muchos chicos que no tenían familia. Entregada solidariamente a todas sus amigas, a la escuela, era delegada estudiantil, abanderada. Era un ser excepcional, comprometido como Laura (su mamá), con su compromiso”.

También rememora que aquellos tiempos, meses antes del estallido social, eran “muy duros” para su familia. “En la época del 2001 estábamos en una extrema pobreza y no le pudimos dar más”, se lamenta hoy, 20 años después, como cada día atravesado desde el brutal crimen.

Pero, además, lúcidamente manifiesta su dolor por “la cobardía de muchos y la complicidad porque estos monstruos ya existían en Miramar”. Es que entiende que los asesinos de su hija “tendrían que haber estado presos hacía muchísimos años por torturas, homicidios y cuestiones en las que siempre los apañaron”.

EL HOMENAJE, A 20 AÑOS

Este jueves los familiares de Natalia Melmann inaugurarán una señalización que desde hacía mucho querían colocar: una placa será descubierta en la zona de las calles 24 y 21 de Miramar, a partir de las 18, con el apoyo de las secretarías de Derechos Humanos de la Nación y la Provincia.

También, a través de las redes sociales durante todo el día se realizarán actividades virtuales para recordar a la joven y mantener el reclamo de justicia.

El apoyo de cada vez más gente a medida que fueron pasando los años es algo que no deja de destacar la familia de Natalia. “Ha sido fundamental, constantemente, cada vez más el apoyo”, señala Gustavo y destaca también el acompañamiento del movimiento feminista. “Hasta ha trascendido las fronteras de nuestro país, siempre nos están llamando de distintas partes del mundo. Y es mérito de ella, de su lucha; luchó por su vida y sigue acompañando, sirve para poner con su manito un alto a todos estos homicidas de mujeres”.

Leer también:

UN PROCESO JUDICIAL TODAVÍA INCOMPLETO

En octubre de 2002 tres policías, Oscar Echenique, Ricardo Anselmini y Ricardo Suárez, fueron condenados a reclusión perpetua al ser considerados “coautores de los delitos de privación ilegal de la libertad agravada, abuso sexual agravado y homicidio triplemente calificado por ensañamiento, alevosía y en concurso de dos o más personas para asegurar el resultado”. También fue condenado a 25 años Gustavo “Gallo” Fernández, por su participación en el secuestro, aunque la pena luego fue reducida a 10 años de prisión.

En aquel proceso -que tiene todas sus condenas firmes- no estuvo un cuarto policía acusado, Ricardo Panadero, ya que la Justicia lo había sobreseído previamente. Sin embargo, luego la Suprema Corte bonaerense dejó sin efecto aquella resolución y un segundo juicio se realizó en 2018 bajo la acusación contra Panadero de privación ilegal de libertad, abuso sexual agravado y homicidio doblemente agravado.

Sin embargo, el Tribunal Oral en lo Criminal N°4 lo absolvió al considerar una falta de “pruebas suficientes” para condenarlo por el crimen de Natalia Melmann, y más tarde, en 2019, el Tribunal de Casación bonaerense resolvió anular ese fallo y ordenar el dictado de una nueva sentencia, a cargo de otro Tribunal, al entender que los jueces realizaron un “arbitraria selección” en la credibilidad de testigos e informes periciales.

Por ahora, ese nuevo debate no tiene ninguna certeza para su realización.

Lo que falta es el compromiso de la Justicia”, entiende Gustavo y al juicio de Panadero, al que califica como “vergonzoso”, suma una nueva preocupación: tras haber luchado años atrás para que las salidas transitorias de los tres policías condenados fueran finalmente revocadas –con permanentes idas y vueltas en un interminable laberinto judicial-, teme que el próximo año puedan llegar a acceder a la libertad condicional. “Lo que necesitamos es que la Justicia sea más rápida y sea comprometida. Que se comprometa no solamente con la causa de Natalia sino con todos los femicidios”.

Ver más: , , , , , , , , , , , , , , , , , , , , , , ,

03/02/2021