Obras privadas: afirman que la “protesta” de la Uocra tiene un “buen acatamiento”
Desde la Uocra Mar del Plata aseguran que alrededor del 70% de las construcciones están trabajando a pesar de no tener habilitación, a la espera de ser llamados a una mesa de diálogo.
La “protesta” que desde el viernes impulsa la Unión Obrera de la Construcción (Uocra) en Mar del Plata, que consiste en acudir a trabajar a las obras privadas para reclamar que el sector sea habilitado en la fase 3 de la cuarentena tiene un “buen acatamiento”, según el secretario gremial del sindicato, César Trujillo.
Uno de los sectores perjudicados por el retroceso de Mar del Plata a fase 3 de la cuarentena fue la construcción y puntualmente las obras privadas, que pudo retomar la actividad en medio de la pandemia -previa autorización municipal- pero ante el aumento de casos de coronavirus fue obligado a cerrar nuevamente, con rechazos tanto de la comisión de reactivación del Concejo Deliberante como de la Provincia.
Sin encontrar las respuestas favorables para retomar el trabajo, el viernes comenzaron una huelga particular por tiempo indeterminado, mediante la cual alrededor del 70% de las obras privadas habilitadas por la Municipalidad están trabajando actualmente, desoyendo el sistema de fases y a la espera de una mesa de diálogo con las autoridades.
“La única forma de terminar con la huelga es que haya una mesa de diálogo, que ellos nos expliquen por qué no nos dejan trabajar, y nosotros les explicaremos por qué sí. Nosotros hemos llamado a la Gobernación, al intendente obviamente y hasta que no nos sentemos a conversar sobre lo que motivó la huelga, la huelga sigue”, confirmó Trujillo a Qué digital.
Según explicó, desde que habían sido habilitados para volver a trabajar, en el mes de mayo, se labraron permisos para unas 700 obras, de las cuales alrededor de 500 estaban trabajando al momento del retroceso a fase 3. De ellas, actualmente el 70% participa de la “huelga”.
“El acatamiento fue bueno. Hay muchos que no están yendo porque están terminando changas, donde nadie los cuida, donde no hay protocolos para nada”, explicó Trujillo, enumerando uno de los principales argumentos de quienes defienden el retorno de la actividad.
Si bien hasta el momento no tiene registro de inspecciones o multas por parte de la Municipalidad para con las constructoras, sí aclaró que desde el gobierno local les pidieron que en caso de acatar la huelga, “que cumplan con el protocolo sanitario” que implica, además de las medidas preventivas individuales, la no utilización del transporte público.
Trujillo ratificó la validez de la huelga, por otro lado la calificó de “insólita”, y a su vez se refirió a quienes la cuestionaron, como el Colegio de Ingenieros y el de Arquitectos, haciendo énfasis en los riesgos de falta de cobertura de las aseguradoras de riesgos del trabajo para los obreros: “Estaban desinformados. El Centro de Constructores que nuclea a más de 400 empresas de Mar del Plata hizo las averiguaciones con las ART y su equipo de abogados. Están cubiertos de su casa al trabajo y del trabajo a la casa. Si no, no lo hubiésemos hecho”, indicó.
“Para el empresario es un gasto volver a poner en marcha la obra 60 días después de estar parada, y está también la ilusión del trabajador, porque nosotros si no laburamos no tenemos ni para comprar una garrafa. Queremos levantar la huelga, queremos una mesa de conversación y terminar con esto”, cerró.
