La Justicia hizo lugar a la medida cautelar presentada por la Casa del Trabajador que buscaba “frenar el grave abuso” de los concesionarios de las playas e intimó a los más de treinta balnearios de la ciudad a que los accesos al sector público sean “irrestrictos y libres”.
La medida la tomó el juez Juan Facundo Gómez Urso el mismo día que se hizo una sombrilleada frente a la Municipalidad en reclamo de que el poder Ejecutivo local tome cartas en el asunto.
Además de exigir el acceso libre e irrestricto, Gómez Urso intimó a los balnearios a “abstenerse de extender en los límites otorgados a su concesión y de extender el factor ocupacional“. Por otra parte, el juez también ordenó que se debe respetar “el libre disfrute de los espacios públicos no sujetos a concesión, hasta tanto se dicte sentencia”.
El abogado de la Casa del Trabajador, Julio Hikkilo, consideró que Gómez Urso “actuó con mucho criterio” y que “puso un freno al abuso del sector privado” y agregó: “Consideramos que las políticas privatizadoras espantan al turismo y perjudican al trabajador“.