Para sobrevivir en la calle, solidaridad, abrigo y contención

En Mar del Plata, al igual que en distintos puntos del país, numerosas organizaciones trabajan de forma autogestiva para acompañar a quienes pasan sus días en las calles. Organización, entrega y compromiso.

(Fotos: QUÉ Digital)

Vivir en la calle. Dormir en la calle. Pasar los días entre el crudo asfalto, la tierra húmeda y fría de alguna plaza y la mirada indiferente de los que pasan sin siquiera detenerse. Atravesar un día más, sobrevivir una a una las noches más frías del año. Y ahí, entre las historias de vida, la indiferencia y, muchas veces, la insuficiencia de los mecanismos del Estado, están ellas y ellos: voluntarios y voluntarias quienes no solo en invierno, sino durante todo el año, ponen el cuerpo y el alma y dan todo por el otro, sin esperar nada a cambio.

En Mar del Plata, al igual que en todo el país, numerosas organizaciones y entidades -algunas vinculadas con la Iglesia, otras no- trabajan codo a codo para atender el flagelo de la situación de calle en el Partido de General Pueyrredon. Llegan, muchas veces, adonde el Estado no. Y a fuerza de solidaridad, compromiso y entrega, se encargan no solo de ofrecerle un plato caliente a quienes pasan sus días en la calle, sino también una palabra de aliento, una mirada tierna, un abrazo sentido.

Red Solidaria es una de las organizaciones que atiende la problemática y Juan Hay es su referente en la ciudad de Mar del Plata. Cuenta que desde hace cinco años trabajan en conjunto con otras entidades, en especial con el desayunador Cáritas Don Bosco -que funciona en Rivadavia y Don Bosco- y es donde concentran las donaciones de ropa y alimentos que reciben.

“Ahí trabajamos con una población de 70 personas, todavía no hay un número muy claro del total de la gente que hay en calle. Si bien en estas ultimas épocas se fue sumando, no hay una estadística justa”, se sinceró el referente, respecto a una problemática que desde hace años todos dicen conocer, pero nadie puede resolver. Y más aún si lo que no abunda son, justamente, números claros y concretos, que permitan justamente elaborar y desarrollar políticas públicas.

En ese sentido, Juan destacó la tarea y la organización, dado que más allá de la actividad particular que realiza cada entidad -además de Red Solidaria, trabajan en la ciudad la ONG Nada es Imposible, la Asociación Ayuda al Alcohólico en Recuperación (Asaar), Fundación Sí, Cáritas, La Noche de la Caridad y Casa Puentes, entre otras- lo cierto es que con los años se ha logrado conformar una red que, gracias a la gente que la compone, día a día y año a año combate la soledad, el frío y la indigencia.

“En La Noche de la Caridad dan un número de 300 viandas por noche, pero hay que calcular que no toda la gente está en la calle sino que hay muchas viandas que se le dan a gente que tiene hogar, pero está en una situación muy complicada. De ahí hay que destacar también lo que hace Cáritas con el Hogar Nazaret, donde se albergan entre 80 y 90 personas“, sumó Juan Hay.

Si bien en Mar del Plata “hay gente en situación de calle pero no es un número muy grande con respecto a Capital Federal u otras ciudades”, lo cierto es que más allá de los números, detrás de cada persona que pasa sus días en las calles, sin un abrigo, sin contención y sin la posibilidad de salir adelante, hay historias, muchas atravesadas por la marginalidad, la desigualdad, las adicciones y la falta de oportunidades.

Y en ese sentido, en una ciudad como Mar del Plata, que recibe visitantes principalmente en verano y alberga incluso a muchas familias que vienen a “hacer la temporada”, la situación se vuelve todavía más compleja: “En temporada viene mucha gente de afuera a hacer la temporada y hay mucha gente que se queda en la calle y ahí se multiplica el número. Después hay gente que se va quedando en la ciudad y gente que se vuelve a su lugar: la Municipalidad y la Provincia tiene pasajes para ayudar en estas situaciones, para que la gente vuelva a su lugar”.

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